El gobierno francés de Emmanuel Macron ha puesto en marcha una campaña de presión contra el grupo Stellantis para que la producción del Peugeot e-208, actualmente en la planta española de Zaragoza, abandone este centro y pase a Francia. En concreto, el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, ha arrancado una campaña para que este modelo se incorpore en una de las fábricas francesas del grupo, sin concretar cuál.
De momento, sin embargo, el consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares, asegura que esta idea no está encima de la mesa. La tensión entre ambos es creciente, tal como recogen diferentes cabeceras del país francés. De hecho, el ministro ha indicado, en declaraciones para radio RMC, que "el reto industrial de Francia es construir no solo vehículos de alta gama, sino también pequeños vehículos eléctricos como el Peugeot e-208 en nuestro territorio", apuntando directamente con nombre y apellidos a este modelo.
Francia sumará ayudas para convencer a Stellantis
En paralelo, el mismo Emmanuel Macron ha anunciado una bonificación de 7.000 euros contra la deslocalización de la producción de automóviles, sin concretar cómo se determinarían estas cifras. El gobierno galo muestra como una de sus prioridades la deslocalización de la producción de automóviles, con un objetivo de 2 millones de vehículos producidos en Francia para el año 2030.
Le Maire dispara: "Espero que el jefe de Stellantis, Carlos Tavares, coja el guante y asuma este reto. Nuestro gobierno está dando ayudas muy importantes a la industria, estamos intentando promover la compra de vehículos eléctricos en el territorio. Y, por lo tanto, deseo que los industriales también muestren, sencillamente, un poco de patriotismo económico".
El malestar del efecto Musk
Tavares, de momento, cierra filas: "La ecuación económica vinculada a la deslocalización forzosa de este proyecto no sería del interés de la empresa, ni del país. Además, estamos pidiendo a Elon Musk o BYD que fabrican coches del segmento B en Francia", mostrando un claro malestar por la apuesta más firme de Macron hacia el gigante americano.
El Peugeot e-208, la joya de la corona
De momento, el grupo se ha limitado a invertir en sus fábricas francesas la producción de 12 modelos eléctricos, más bien SUV de gama media. Pero el pequeño 208, número uno de su segmento en Europa, con cerca de 50.000 unidades vendidas en el 2022, va hacia la fábrica de Zaragoza. Pero no solo hay este destino que cuece en Francia. El futuro pequeño modelo eléctrico de Citroën se producirá en Eslovaquia.
Stellantis lo justifica por las diferencias de costes de producción entre países europeos, pero también por la nueva competencia de los vehículos eléctricos chinos. El fabricante, que publica resultados récord, pretende mantener su margen de dos dígitos y se emplaza a hacer las reflexiones oportunas más adelante: "Leeremos posteriormente los resultados y sabremos quién tuvo razón en el contexto de la competición china", ha concluido Carlos Tavares. Y ha añadido: "Tengo dudas muy serias que podamos producir vehículos muy compactos de una manera muy rentable en nuestro país".