Nueva York, Florida, Texas, Georgia, Los Ángeles, California, Washington D.C., Pensilvania… estas son algunas de las ubicaciones que ha elegido la marca de moda Mango para expandir su red de tiendas en los Estados Unidos, y convertirlo en su tercer mercado más importante en volumen de ventas, en 2026. Por detrás de España, que acapara el 23% de la facturación, y de Francia. Un plan de crecimiento que inició en 2022 y que está acelerando en tan solo dos años para llegar a tener 50 tiendas en propiedad a finales de 2024, 10 más de las previstas en la estrategia inicial. Para ello, en lo que queda de 2024, Mango abrirá 30 nuevas tiendas después del notorio peso que han adquirido los Estados Unidos en el aumento de las ventas en el último año, cuando se ha situado en el top 5 en la lista de mercados que más contribuyen en los ingresos anuales, un propósito que se habían marcado para 2024.
El punto de partida de esta nueva estrategia fue la inauguración, en mayo de 2022, de una flagship store en la Quinta Avenida de Nueva York, a la que le siguieron tres aperturas más en Florida (dos en Miami y una en Orlando). Únicamente con estas cuatro aperturas, en 2022, Mango incrementó la superficie de venta en Estados Unidos en 2500 m². Y así sucesivamente, hasta finalizar 2023, con 21 tiendas propias abiertas y 41 puntos de venta entre los establecimientos de la cadena, las franquicias y córners en grandes almacenes. La empresa que fundó y preside Isak Andic también tiene presencia online a través de su propio canal —con el que también comercializa sus colecciones de complementos para el hogar, Mango Home— y en marketplaces. El grupo no ha dado a conocer qué preferencias tienen para determinar en qué lugares situar los nuevos establecimientos, pero su trayectoria de más de 20 años en los Estados Unidos y la incorporación de las nuevas tecnologías en la empresa le dan información sobre qué clientes siguen a la marca online. Sobre sus características, las inauguraciones responden al concepto de tienda New Med, inspirado en el Mediterráneo y caracterizado por el espíritu y la frescura de la marca, según la compañía.
La tienda de la Quinta Avenida se ha convertido en un buque insignia de la marca: una superficie de venta de 2100 m² y productos de sus líneas Woman, Man y Kids, ubicada en el edificio Grande Dame, un inmueble de finales de la década de 1920 que destaca por su arquitectura y por haber sido sede de grandes empresas como NBC, Columbia Pictures y Coca-Cola. El espacio de venta de los establecimientos restantes oscila, en función de la ubicación en calles céntricas o en centros comerciales, entre los 100 m² y los 400 m², por regla general. Es, además, una de las que más ingresos genera, junto a establecimientos como los de la calle Serrano, en Madrid; el paseo de Gracia, en Barcelona; Haussmann, en París; Oxfort Street, en Londres; o Corso Vittorio Emanuele, en Milán.
La marca quiere “seguir doblando su peso en los Estados Unidos, porque es muy relevante, incluso en las ventas online, aunque nos centramos en la propuesta de valor de la tienda física”, explicó este lunes el consejero delegado del grupo, Toni Ruiz, durante la presentación del balance económico del pasado año. En 2023, la compañía de Isak Andic obtuvo un resultado neto de 172,1 millones de euros, un 112% más que los 81 millones del año anterior, y la facturación superó los 3.100 millones de euros, al incrementar un 15% las ventas, un 20% a ritmo de cambio constante. “Hemos registrado mejores resultados” en cuarenta años de historia, añadió.
Con esta base y el objetivo de seguir creciendo, Mango ha presentado este lunes la nueva hoja de ruta para los próximos tres años (2024-2026), centrada en reforzar su propuesta de valor diferencial, la apuesta por la innovación y sostenibilidad y el impulso de las ventas mediante una gran expansión de su parque de tiendas y el crecimiento de todos sus canales. Así, la compañía llevará a cabo hasta 2026 un ambicioso plan de expansión, con 500 nuevas aperturas, centrando sus esfuerzos en mercados clave como Estados Unidos, España, Francia, Italia, Reino Unido, India o Canadá. La inversión conjunta será de 600 millones de euros.
Almacén descentralizado en Pensilvania
Para soportar el crecimiento en los Estados Unidos, el grupo cuenta con un centro de distribución en Easton (Pensilvania), uno de los seis almacenes descentralizados que posee —junto a Palau-solità i Plegamans (Barcelona), China, Turquía, Alemania y México— y que se nutren del centro logístico en Lliçà d’Amunt (Barcelona), que inició sus operaciones en 2016, funcionando a pleno rendimiento en 2019. La plataforma logística opera más de 500.000 unidades diarias, con 280.000 metros cuadrados de superficie, y actúa como plataforma central, con la recepción de todas las prendas que se fabrican básicamente en Asia y África.
La presencia de Mango en Estados Unidos se remonta a 2006. La compañía reforzó su apuesta por el mercado estadounidense a finales de 2017 con la remodelación de la tienda del Soho y a través de un acuerdo con Macy’s en 2019 para acelerar el crecimiento online de la marca en el país.