Decenas de personas han recorrido este sábado las calles de Vilanova i la Geltrú (Garraf) en protesta por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por el portal en línea de moda Venca para despedir a la totalidad de la plantilla, compuesta por 155 trabajadores, mayoritariamente mujeres. La empresa catalana se encuentra actualmente en concurso de acreedores voluntario con una deuda de unos 7 millones de euros y su caso lo administra el despacho barcelonés RCD, que ha sido designado por el juez Alfonso Merino, titular del juzgado mercantil número 4 de Barcelona.
Con sede en Vilanova i la Geltrú (Garraf), Venca permanece en subasta y con su unidad productiva en venta. En caso de llevarse alguna operación sobre este tema, el ERE podría limitarse o incluso quedar sin efecto. El sindicato CCOO, que ha convocado la manifestación, alerta que la plantilla está compuesta mayoritariamente por mujeres con una media de edad "elevada", es decir, "con una difícil reinserción laboral".
La indemnización de las trabajadoras la tendrá que afrontar el Fondo de Garantías Salariales (Fogasa), después de que la empresa se haya presentado a concurso de acreedores y esté en liquidación. La compañía nació el año 1979 como en empresa de catálogos y con los años abandonó esta actividad y se convirtió en una plataforma de venta de ropa, principalmente para mujeres y de productos para el hogar.
Impagos a proveedores
La empresa pasó de facturar 19 millones y ganar 2,4 millones en 2022 a los 7 millones en ventas y 5 millones de pérdidas de 2023. El último año el negocio funcionó "como un pez que se muerde la cola", y desde el comité de Venca afirman que "no tenían dinero, compraban menos género y vendían menos". Fuentes sindicales reconocen que existe una gran "incertidumbre" con respecto a su futuro y aseguran que la "mala gestión" de la empresa ha sido un desencadenante para llegar a esta situación, que desde la dirección atribuyen a la incapacidad de "competir con Temu y Shein".
"Según la dirección, no podíamos competir con Temu y Shein, pero lo cierto es que la decadencia viene de antes. Hemos vivido ERE y ERTE y no hemos estado a la altura. Después de ser pioneros en la venta por catálogo, no nos hemos adaptado al mercado", narran desde Comisiones Obreres y UGT, que detallan que entre abril y mayo del año pasado empezaron a dejar de pagar a proveedores.
Cambio de manos del negocio
En el 2013, la multinacional alemana Otto Group compró la empresa, entonces en manos de la francesa 3 Suisses, de la cual la alemana era también accionista. Solo cuatro años duró la aventura alemana de Venca, que en el 2017 fue comprada por sus propios directivos, con el director general Jordi González al frente. Aun así, su apuesta por la digitalización total para competir con otras plataformas ha acabado fracasando.