El avance de la digitalización y la reducción de costes emprendida por el sector financiero en los últimos años ha llevado a la banca y las aseguradoras a contar, cada vez, con menos oficinas físicas para atender a los clientes. Pero, Mapfre, a contracorriente de esta tendencia, encara 2024 con el objetivo de llevar a cabo nuevas aperturas, sobre todo en las zonas rurales y más despobladas. La compañía que preside Antonio Huertas tiene ya la segunda red de oficinas más grande de España solo por detrás de CaixaBank, pero plantará cara a la entidad, aumentando el tamaño de su red en el nuevo año.
En concreto, la aseguradora quiere expandirse a través de su división Mapfre Gestión Patrimonial (que ofrece soluciones de inversión financiera a sus clientes) como ya ha hecho en 2023, año en el que ha desembarcado en Barcelona, Bilbao, Palma de Mallorca, Málaga o Alicante. Para 2024 se ha fijado como objetivo llegar a plazas menos financieras, ubicadas en zonas menos pobladas.
“Mapfre, en su conjunto, dispone de la segunda red comercial más grande tras CaixaBank. Y lo aprovechamos para estar cerca del cliente en el ámbito financiero. La red especializada de gestión patrimonial ha cerrado el año con 10 oficinas más y 30 nuevos agentes. Y arrancamos 2024 con el planteamiento de seguir creciendo en red comercial, posiblemente en plazas menos financieras como Badajoz, Cáceres o Valladolid. Aunque queremos llegar a más sitios porque en el ADN de Mapfre está la cercanía con el cliente y abriremos en zonas más rurales".
Así lo puso de relieve Miguel Ángel Segura, director general de Mapfre Inversión, en un encuentro con periodistas recientemente. También deslizaba que en su próximo plan estratégico trienal, que arrancará en el nuevo año, prevén seguir aumentando su red de agentes financieros. Y en este sentido, se plantean incluso formar a agentes desde las universidades.
La red de distribución de Mapfre en España, desde la que venden seguros o asesoran a los clientes donde invertir sus ahorros o patrimonio, estaba constituida a finales de 2022 por unas 6.500 oficinas, entre propias y de colaboradores, frente a las casi 9.000 de 2021 y unas 10.000 de 2020.
La aseguradora ha perdido en los últimos dos ejercicios casi el 35% de su red tras liquidar los acuerdos en bancaseguros con Bankia y Liberbank, con motivo de sus respectivas fusiones. Pese a ello, sigue siendo socios de otras entidades en España como Bankinter o Santander, lo que le permite alcanzar esas 6.500 oficinas para vender sus productos.
En propiedad, es decir, sin estas alianzas, Mapfre tiene una red de casi 3.200 oficinas, lo que la convierte en la más grande de España tras la de CaixaBank. Si bien, el banco catalán cuenta con 3.622 oficinas retail (con datos a cierre de septiembre). Y otros grandes bancos, como Santander (1.881 sucursales), BBVA (1.883) o Sabadell (1.203) disponen de una red de sucursales más pequeña debido a los ajustes de costes de los últimos años.
En lo que se refiere solo al sector asegurador, su red es la más grande y además con diferencia. Pues otros competidores españoles, como Santalucía, cuenta con 1.000 oficinas. Y Mutua Madrileña tiene 7 oficinas propias, ya que también vende seguros a través de la red de CaixaBank (desde donde distribuyen los productos de Segur Caixa Adeslas) y de El Corte Inglés, con quien también tiene una alianza.
Según los últimos informes financieros de Mapfre, su red propia de oficinas ha ido creciendo en los últimos años. Entre 2020 y 2022, en casi una veintena. Y en 2023, a falta de disponer de los datos de cierre de año, se habrían sumado otras 10, a las que podrían sumarse otra decena más en 2024.
“No nos conformamos con ser la segunda red comercial tras CaixaBank, queremos complementar. Siempre estamos estudiando y viendo”, añadía Segura en el encuentro.
Riesgo de exclusión financiera
El proceso de consolidación y los ajustes de costes emprendidos por los bancos españoles desde la crisis financiera de 2008 y hasta 2022, han terminado con el cierre de 28.000 oficinas en España, lo que ha dejado a determinadas poblaciones en riesgo de exclusión financiera, es decir, sin acceso a los servicios bancarios.
Por ello, el Gobierno español, lleva desde 2022 impulsando soluciones alternativas a las oficinas tradicionales para acercar los servicios financieros a las zonas más despobladas. Tras un acuerdo con el sector el año pasado, se han cerrado alianzas con Correos para llevar el efectivo a zonas rurales, pero también se está apostando por elevar el número de agentes financieros o de extender la red de ofibuses.
En paralelo, la banca ha seguido cerrando oficinas 2023 y solo algunas entidades, como Renta 4, han apostado por seguir extendiéndose a través de su red. En el sector asegurador, Mapfre también ha destacado por lo mismo, la compañía prevé seguir creciendo con nuevas oficinas u oficinas móviles, principalmente en zonas rurales.
Y en este contexto, puso en marcha hace unos meses un proyecto piloto de oficina móvil en Navarra que dará servicio a varios pueblos de la zona durante seis meses para testar si se trata de una iniciativa realmente efectiva y poder extenderla.