No sería de extrañar que las tiendas especializadas en animales vendieran dentro de poco tiempo toallitas higiénicas para caballos. Todo dependerá del acierto del departamento de innovación de la compañía Artero, la marca de productos de cuidado e higiene para mascotas que ha decidido adentrarse en el lujoso mundo de los caballos. Con el lanzamiento de la línea Equine Care, esta empresa familiar de Vilassar de Mar (Barcelona) se propone revolucionar el sector equino, combinando tradición, experiencia e innovación en sus productos. Sea en el ámbito profesional o amateur para ocio y disfrute de esta actividad, abundan los artículos y complementos para la práctica de la equitación, pero “hay escasez de productos para el cuidado y la higiene del caballo”, expone Alex Artero que, junto a su hermano Edu, dirige la empresa familiar.
Manifiesta con seguridad que “el sector se preciará de la existencia de una nueva gama de productos destinada a los equinos porque nos centraremos en la búsqueda de artículos que beneficien la salud de los animales”. La nueva división ofrece productos de limpieza, cosméticos y protección 100% respetuosos con el PH de los caballos, ya que están hechos con ingredientes naturales, que no les provoquen alergias, que respetan el medio ambiente y la salud de los equinos. Bajo la marca Artero se pueden adquirir champús, acondicionadores, guantes limpiadores (bops) y dedales para los ojos (dips) que asegurarán una limpieza profunda e hidratación de la crin, cola y cuerpo, así como el aseo general de los caballos. Otros productos, como el bálsamo para cascos y la fragancia Essence aportan una sensación de bienestar a los equinos.
Los hermanos Artero se han rodeado de expertos en equitación para crear un equipo específico “que trabaja a tiempo parcial” para investigar en nuevas lociones elaboradas con aceites esenciales naturales que alejen a moscas y tábanos de la faz y contorno de ojos de los animales “porque ello les impide una adecuada doma o ejecución de saltos”, que combatan a los parásitos que se asientan en el manto o cremas para protegerlos de las radiaciones solares, porque “los caballos suelen pasar la mayor parte del día al aire libre”.
La cosmética para caballos es muy distinta a la de las mascotas -perros y gastos- “que llevamos años comercializando”, dice Alex Artero, pero "no tiene por qué ser más cara", advierte para desmitificar el lujo que suele acompañar al mundo de la equitación. A pesar de ello, las cifras que proporciona la empresa van en el sentido contrario. El gasto en cuidado del caballo durante todo su ciclo vital, supone más de 5 millones y medio de euros en España, con Andalucía a la cabeza, seguida por Madrid y la Comunidad Valenciana. Cada caballo supone un gasto en cuidados de 7.800 euros de media. En España hay más de 800 clubes hípicos y un total de 722.158 caballos censados. Un caballo recibe una media de 2 lavados del manto a la semana con jabón, mínimo un cepillado por día y un arreglo de la crin cada 15 días y un esquilado cada dos meses, aproximadamente.
Artero, de vuelta a los orígenes
“No hacemos más que volver a nuestros orígenes”, explica al recordar que la empresa la creó en 1909, su bisabuelo Pascual Artero; “nada más y nada menos que hace 114 años”, presume. Por aquel entonces, abrió la cuchillería y perfumería Artero, en Manresa (Barcelona), para vender herramientas para el esquilado de Caballos.
En la actualidad, Artero es una compañía con una facturación prevista de 23 millones de euros para este 2023, con un crecimiento esperado del 12% sobre los 20 millones de negocio generado el pasado año, y una plantilla de 90 personas. Sus artículos se dividen en tres líneas: productos de cosmética y utillaje -tijeras, máquinas profesionales y cuchillas- para el cuidado del pelo de los animales de compañía (Pet Care) y del manto del caballo (Equine Care) y la línea para el cabello humano (Hair Tools), que se comercializan en más de 90 países, con una red internacional de más de 40 distribuidores, y filiales propias en Francia, Reino Unido y Estados Unidos. Este último es su segundo mercado en importancia por volumen de ventas (20%), después de España.
La decisión de ampliar el negocio ha ido aparejada a la construcción de la nueva sede corporativa en Vilassar de Dalt, con 7.000 m² y “con espacio para crecer”. La central aglutina el servicio técnico, innovación y desarrollo de productos, la fabricación de los cuales es responsabilidad de Salerm, la empresa familiar -de la saga Martinez Ribes-, de Lliçà de Vall (Barcelona). Artero también cuenta con cuatro tiendas físicas (Vilassar de Dalt, Barcelona, Madrid y Valencia) y la escuela de formación Artero Academy, para peluqueros caninos, en colaboración con un centenar de centros repartidos entre España, Portugal, Italia y Rumanía.
Artero analiza asentarse en China
El consejero delegado del grupo, Alex Artero, relata que en el sector de los productos para mascotas hay una “gran competencia entre marcas” que buscan la calidad y ganar tamaño y que “la necesidad de ganar tamaño suscita el interés por comprar empresas de mediana dimensión, como la nuestra”. Pero lejos de pensar en vender, “también nosotros queremos crecer”.
La opción que tienen en estudio los hermanos Artero en su consejo de administración es la creación de una joint-venture con la empresa asiática que actualmente fabrica una gran parte de los complementos y accesorios. Se trata de un productor chino, del que no quiere desvelar el nombre, de capital familiar y con una larga trayectoria en el segmento del que estarían dispuestos a adquirir un 50% del capital para “crecer en la vertiente industrial y ser capaces de fabricar parte de nuestros productos, porque consideramos que tiene un gran potencial de crecimiento”.