Hasta siete entidades han anunciado formalmente que quieren personarse ante la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC) por la opa del BBVA sobre Sabadell. Principalmente, accionistas, patronales y sindicatos. El organismo que preside Cani Fernández permite hacerlo a las personas físicas o jurídicas que puedan resultar afectadas por la operación de concentración, siempre que lo hagan de acuerdo con los criterios establecidos en la ley.

Si la CNMC lo admite, los interesados pasan a formar parte del expediente y pueden realizar alegaciones, examinar documentos o recibir notificaciones del organismo. El primero en pronunciarse fue el banco que preside Josep Oliu. El propio Sabadell lo hizo, de hecho, al día siguiente de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia decidiera pasar a fase dos el análisis de la opa para estudiarla con más detalle. 

Y solo unos días después, lo hicieron quienes apoyan al Sabadell en su decisión de seguir en solitario. Es el caso de los accionistas minoritarios, de las patronales catalanas Pimec y Foment, también de la Cambra de Comerç de Barcelona, así como de los empresarios de Pontevedra. Los últimos en pronunciarse han sido los sindicatos. Primero, Comisiones Obreras. Y luego UGT. Todos ellos han confirmado públicamente que han solicitado la condición de interesado en el expediente.

El Sabadell ha estado atado de pies y manos durante la primera fase y tan solo ha podido enviar a la CMNC la información que le iba requiriendo. Pero en esta segunda fase podrá exponer con detalle los motivos por los que cree que la operación no debería salir adelante. Sobre todo, en lo que respecta a la competencia bancaria, que es lo que estudia este organismo. 

Patronales, asociaciones y sindicatos

Por su parte, la Asociación de Accionistas Minoritarios del Banco Sabadell fue la primera entidad en personarse en la CNMC contra la opa del BBVA después de hacerlo el propio banco. La organización defiende que la entidad catalana siga su camino en solitario y asegura que la operación que quiere hacer el BBVA comporta "mucha complejidad" y afectará especialmente a las pequeñas y medianas empresas.

La patronal catalana Pimec también se personó como parte interesada ante la Comisión en contra de la opa del BBVA ante el Banc Sabadell alertando de que esta operación podría alterar “significativamente” la competencia en el sector bancario, con repercusiones directas sobre las condiciones de financiación para las empresas.

Solo un día después seguía sus pasos la principal patronal catalana, Foment del Treball, que además de mostrar preocupación, apuntó a los efectos negativos que creen que tendría la opa. Catalunya y la Comunidad Valenciana serán las más afectadas si la opa sale adelante y posteriormente hay una fusión. De hecho, la propia CNMC ya ha advertido que el banco resultante tendría una cuota de mercado superior al 30% en banca minorista (de particulares) en ambas regiones. Por eso, el organismo va a solicitar un informe preceptivo a las comunidades autónomas en las que la concentración incida de forma significativa. El mismo día se sumó la Cambra de Comerç de Barcelona.

Por otra parte, la Confederación Empresarial de Pontevedra también ha querido formar parte del expediente y se ha personado. La organización busca expresar su "rechazo" y "preocupación". Explica que el Sabadell tiene una alta presencia en la provincia de Pontevedra y se caracteriza por ser una entidad financiera especializada en la pyme, que presta regularmente a precios accesibles y condiciones viables. Así que su fusión supondría una clara pérdida de competitividad para todo el territorio.

Con el objetivo de defender el empleo se han personado los sindicatos. Desde Comisiones Obreras explican que comunicaron la decisión a la CNMC el viernes y que su objetivo no es oponerse a la opa, sino asegurarse que no se destruye empleo y en la parte social, defender la fluidez del crédito, para que no vaya en perjuicio de las pymes. “No nos mostramos a favor ni en contra, nuestro sentido es el mantenimiento del empleo y el crédito. Esa es nuestra motivación”.

También UGT ha solicitado la condición de interesado en el expediente con el objeto de participar de primera mano en el mismo. Según explica en la misiva enviada a la CNMC, la operación podría tener un impacto relevante en la competencia bancaria porque los dos principales bancos, CaixaBank y la nueva entidad resultante BBVA-Banco Sabadell, controlarían el 73,7% de las oficinas bancarias. Aunque sobre todo alerta del empleo, una fusión podría implicar una pérdida de empleo para hasta 10.500 trabajadores.

Las organizaciones y asociaciones de consumidores consultadas por On Economía explican que no se han personado en esta segunda fase, porque la CNMC ya les tuvo en cuenta en la primera para poder estudiar el impacto de la opa en las oficinas, en los productos bancarios o en la exclusión financiera. El organismo pidió información a la OCU y Asufin. En cualquier caso, la nota sucinta que la CNMC publicó el pasado día 20 de noviembre, explica que los interesados tienen un plazo de diez días para solicitar de forma motivada la condición de interesado en este procedimiento.