Ciments Molins vuelve a Catalunya, de donde salió hace siete años, después de la fuga de empresas provocada por el referéndum del 1 de octubre del 2017, "pensando en el mejor interés de la compañía". Es la primera gran empresa que ha decidido revertir la situación que tomó para considerar que había inestabilidad jurídica y política a Catalunya, durante el procés político en Catalunya. La histórica cementera catalana, propiedad de la familia Molins, ha asegurado que había adoptado esta decisión "con el objetivo de salvaguardar los intereses del grupo, de marcado carácter internacional, y garantizar la normal operativa".

Este martes, la cementera ha enviado un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) donde informa de que vuelve a ubicar la sede social en Barcelona después de recibir el visto bueno por unanimidad del consejo de administración de esta empresa propiedad de la familia Molins. "El consejo de administración de la Sociedad, en sesión celebrada el día de la fecha, ha acordado por unanimidad de sus integrantes el traslado del domicilio social en Sant Vicenç dels Horts (Barcelona)", explica en una breve carta que firma el presidente, Juan Molins Amat.

Después del 1-O, la histórica cementera catalana, que cotiza en la bolsa española, instaló su sede social en el Paseo de la Castellana (Madrid) a causa de "la situación política y social" que se vivía en Catalunya. Ahora decide volver aunque no ha especificado los motivos, pero el actual presidente del grupo siempre defendió que la situación se podría revertir "si volvía el juicio a Catalunya".

A pesar del traslado de su sede social, Ciments Molins ha mantenido estos años su actividad habitual en las fábricas de Catalunya, que son Ciments Molins Industrial, Promsa y Propamsa.

La compañía, que alcanzó un beneficio de 151 millones de euros el ejercicio 2023, se ha convertido en la primera empresa que devuelve la sede a Catalunya. Se calcula que más de 2.000 compañías se marcharon en el 2017, entre ellas grandes cotizadas como CaixaBank, Sabadell o Naturgy. Además de Cellnex, Colonial, SegurCaixa, VidaCaixa, Applus+, Catalana Occidente o Codorniu.

La empresa, fundada en 1928 por Juan Molins Parera y por su hijo Joaquín Molins Figueras, ha conseguido llegar a los 90 años sin perder la condición de empresa familiar, pero con tres ramas familiares en el accionariado: Molins Amat, Molins López Rodó y Molins Gil. Ostentan el 92% del capital y el resto cotiza en el Mercado Continúo. El actual presidente Joan Molins Amat pertenece a la tercera generación de la saga.

En el consejo de administración están representadas las tres ramas familiares, con su presidente, y dos vicepresidencias ocupadas por Joaquín Maria Molins Gil y Joaquín Maria Molins López-Rodó. Como vocales constan: Sebastià Alegre, Jean-Carlos Angulo, Andrea Kathrin, Socorro Fernández, Beatriz Molins Domingo, Juan Molins Monteys, Carles Rivera Molins y Rafael Villaseca. También es vicesecretaria no consejera una representante de los Molins: Ana Mª Molins López-Rodó.

En el 2019, ya con el traslado ejecutado, cosa que suponía celebrar los consejos de administración y la junta de accionistas en Madrid, el consejo de administración ya sometió de nuevo la decisión a votación, a petición de la familia Molins Amat, pero no obtuvo el apoyo suficiente. Los miembros del consejo defensores del retorno de la sede argumentaban que ya no estaban los motivos alegados inicialmente sobre la falta de seguridad jurídica o económica, e incluso para considerar que sería mejor para la operatividad de la compañía. Por lo tanto, se puede considerar que el retorno de la sede a Barcelona cierra una crisis familiar dentro del sí del consejo de administración, ya que la decisión se ha revertido por unanimidad de todos sus miembros.

Instalaciones de Ciments Molins.

Otros acuerdos del consejo

En la reunión de este martes del consejo de administración de Ciments Molins también se ha acordado el pago de un dividendo de 0,55 euros brutos por acción a cuenta de los beneficios del ejercicio de 2024. La fecha de pago será el 19 de diciembre del 2024, detalla en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La percepción del dividendo se hará a través de las Entidades Participantes en la Sociedad de Gestión de los Sistemas de Registro, Compensación y Liquidación de Valores S. A. (Iberclear), y el agente de pagos será el Banco de Sabadell.

Fomento espera más retornos

El presidente de Fomento, Josep Sánchez Llibre, ha calificado de “gran noticia por Catalunya” esta decisión de la empresa cementera y ha querido “felicitar a los directivos y al consejo de administración por esta decisión de devolver el centro de decisión de Ciments Molinos en Catalunya, bienvenidos”.

El presidente Sánchez Llibre, en segundo lugar, ha destacado: “Desde que llegué a la presidencia de Foment del Treball siempre dije que irían volviendo empresas antes de terminar nuestro segundo mandato; y así es”. El líder patronal ha añadido: "Dije que muchas empresas relevantes volverían a Cataluña y eso se está cumpliendo, éste es un primer paso, que esperamos que no sea el último".