Nestlé dispara las inversiones en sostenibilidad en la fábrica de Nescafé de Girona. En la actualidad construye una segunda caldera de biomasa, con una inversión de 22 millones de euros, que se suma a otra que funciona desde 2020, en la cual ya invirtieron 17 millones más. Con estas instalaciones se revalorizará (se utilizará energéticamente) la totalidad de los posos de café que se obtienen durante los procesos de fabricación del café soluble. También se utilizan restos de la limpieza de los bosques de Catalunya, especialmente del área de las comarcas de Girona donde está la fábrica.
En los últimos cinco años, la fábrica de Nescafé de Girona ha reducido en un 45% las emisiones de CO2 y en un 23%, el consumo total de energía, según ha destacado el CEO de Nestlé en España, Jordi Llach, este lunes durante un desayuno de prensa. Llach ha destacado que esta fábrica es "un claro ejemplo de economía circular". El objetivo es alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050.
La fábrica de Girona generó el año pasado más de 52.000 toneladas de posos de café. Cuando entre en funcionamiento la segunda caldera de biomasa, se revalorizará el 100% de estos posos. Cada una de las calderas de biomasa generan 116.000 toneladas de vapor anuales, de manera que, a finales de 2025, el 80% del vapor que necesitan los procesos productivos vendrá de estas fuentes renovables.
Con Jordi Llach, Nestlé ha recuperado la tradición de tener un ejecutivo catalán al frente de la filial española. Es el primero desde julio de 2022, cuando sustituyó a Jacques Reber, al cuarto ejecutivo extranjero que ocupó esta posición desde que Josep Arcas se jubiló en el 2007 después de 41 años en la empresa.
Presentación del primer ejecutivo
Jordi Llach, de 60 años, lleva más de media vida en Nestlé –exactamente, 35 años y medio– porque llegó en 1989. Ha ocupado varias responsabilidades en las áreas de marketing y de producto desde las oficinas de Barcelona, Vevey –la sede central, en Suiza-, Milan, Lisboa –dónde estuvo CEO para el mercado portugués. En el 2018 se instaló en Vevey para dirigir el área de productos culinarios. En esta etapa impulsó la marca de productos de base vegetal Garden Gourmet.
En este primer contacto ante la prensa, habló de su familia –barcelonés, hijo de padre catalán y madre gallega, y padre de dos hijos– e, incluso, de su calzado, unas zapatillas blancas con suelas fabricadas a partir del residuo de las cápsulas de Nespresso.
De entrada, Llach expuso el compromiso de liderar la transición hacia la alimentación sostenible. "Una alimentación no es sostenible si no es más saludable y no contribuye a la comunidad". Por eso, indicó que, el año pasado, Nestlé invirtió más de 70 millones de euros en sus fábricas en España, que, en su mayor parte, estaban encaminados a conseguir estos objetivos.
Pero apuntó que el 70% de las emisiones están en los ingredientes que se utilizan para la obtención del productos finales. Por eso, subrayó que están apostando por la agricultura regenerativa. La materia prima proviene de cultivos que aplican estos criterios de siete países: Brasil, México, Colombia, Honduras, Vietman, indonesia y Costa de Marfil.
Miguel Antúnez, director de sostenibilidad, detalló los procesos que siguen desde que el grano de café llega al puerto de Barcelona y se traslada hasta la fábrica de Girona, uno transporte que han empezado a realizar con camiones eléctricos. También se utilizan biocombuisbles para la logística del grupo. El último paso es vender el café dentro de bolsas reciclables que, si el cliente desea, puede poner su contenido dentro de los tarros de cristal de toda la vida, que son reutilizables.
A preguntas de los informadores, Llach defendió que era necesario denunciar las acciones de Greenwashing (falsifica sostenibilidad) porque perjudican a las empresas que cumplen con los reglamentos y hacen las cosas como es debido.
Sobre previsiones económicas, avanzó que han empezado bien el año. Si en el 2023 la facturación aumentó por la inflación, este año lo están haciendo por volumen. Las ventas de Nestlé en España ascendieron en 2023 a 1.526 millones de euros, un 5,3% más respecto el ejercicio anterior. Pero si se tienen en cuenta las exportaciones de las fábricas de Nestlé en España, que se incrementaron en un 8,3% el año pasado, hasta los 970 millones de euros, las ventas totales se sitúan en 2.496 millones de euros, un 6,3% más que en 2022. Precisamente, las exportaciones supusieron el año pasado el 39% de las ventas totales de Nestlé España y el 60% de la producción de sus fábricas.
En España, Nestlé cuenta con diez plantas de producción, de las cuales cuatro se encuentran en Catalunya: Girona, Viladrau, Reus y Castellbisbal. El resto están en Pontecesures (Pontevedra), Sebares y Gijón (Asturias), La Penilla (Cantabria), Miajadas (Cáceres) y Herrera del Duque (Badajoz).