Nissan va a entrar en la filial de vehículos eléctricos de su socio Renault, Ampere, con una inversión de 600 millones de euros. La inversión le dará al fabricante de automóviles nipón una participación minoritaria dentro de la firma, como también es minoritaria la del tercer accionista, el grupo tecnológico estadounidense Qlalcomm. En un comunicado, la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi presentó también este miércoles la formalización de los acuerdos definitivos entre los tres, que se habían anticipado el pasado y que suponen, en primer lugar, un reequilibrio de sus participaciones cruzadas.

Renault, que tenía hasta ahora un 43% en Nissan, reducirá ese porcentaje al 15%, de forma que se equipará al que tiene el fabricante japonés en el grupo francés. "Nissan ha confirmado su intención de convertirse en un inversor estratégico de Ampere" y se ha asegurado "un puesto en el consejo de administración", anunciaron los fabricantes automotores en un comunicado conjunto.

La reestructuración de la asociación de Nissan y Renault se basa en tres pilares: la creación de proyectos conjuntos en la India, Latinoamérica y Europa; la búsqueda de iniciativas de interés común y el mencionado revisión de sus participaciones cruzadas. En virtud del nuevo acuerdo, que entró hoy con este anuncio en su última fase, el 28,4 % de la diferencia entre la participación pasada y futura de Renault en Nissan se transferirá a un fideicomiso francés, sobre el que la compañía francesa no ejercerá derechos de voto, que estarán "neutralizados".

En definitiva, los tendrá limitados al 15%, como los de Nissan en Renault, que los podrá ejercer plenamente, a diferencia de lo que ocurría hasta ahora. Renault sí que seguirá beneficiándose plenamente de los derechos económicos (dividendos y productos de cesión de acciones) de ese 28,4%.

Renault mantendrá una participación mayoritaria en Ampere

El grupo francés dará instrucciones a ese instrumento fiduciario para vender las acciones allí alojadas si eso es "comercialmente razonable", pero no hay ninguna obligación de que esa cesión se lleve a cabo en un plazo específico determinado. Respecto a Ampere, la entrada de Nissan con 600 millones no ha sido cifrada en un porcentaje de participación porque por ahora no se ha hecho una valoración de esta filial de Renault, aunque de entrada se sabe que es minoritaria porque así estaba recogido desde el principio, ya que se había establecido un límite de hasta el 15 % de la empresa nipona.

Renault, que tiene intención de sacar a bolsa Ampere de aquí al primer semestre de 2024, mantendrá en cualquier caso una participación mayoritaria, puesto que espera que sea el motor de la actividad del grupo, con un crecimiento anual previsto en el próximo decenio del 30% y un margen operativo de, al menos, el 10 % en el horizonte de 2030.

Los acuerdos definitivos entre los tres socios de la alianza incluyen una serie de "proyectos operativos con fuerte creación de valor" en India, Latinoamérica y Europa. Estos, "nos permiten entrar en un nuevo capítulo de la alianza", dijo en el comunicado el presidente de la asociación y presidente del consejo de administración de Renault, Jean-Dominique Senard, que considera que saldrá "reforzada" y sentará las bases de "una nueva gobernanza equilibrada, justa y eficaz".

El presidente y consejero delegado de Nissan, Makoto Uchida, dijo, por su parte, que esta nueva fase de su colaboración será "mutuamente beneficiosa" en áreas de innovación de interés común.

"La oportunidad de inversión en Ampere complementa y fortalece el impulso continuo de electrificación de Nissan en Europa y generará numerosas sinergias", como reducción de costes, el cumplimiento de normativas y productos y sistemas eléctricos, señaló el ejecutivo nipón. El responsable ejecutivo de Renault, Luca de Meo, por su parte, se mostró convencido de que ofrecen "un potencial de generación de valor que se cifra en cientos de millones de euros" para las tres empresas y para sus socios.

Duplica beneficios en el primer trimestre

La compañía también ha presentado los resultados trimestrales este miércoles, que reflejan un beneficio neto de 105.500 millones de yenes (unos 677,6 millones de euros) entre abril y junio, primer trimestre de su ejercicio fiscal, unas 2,2 veces más que en el mismo período de 2022.

El beneficio operativo del fabricante aumentó un 98 % interanual, hasta 128.600 millones de yenes (826,2 millones de euros), mientras que su facturación por ventas creció un 37 %, hasta 2,92 billones de yenes (18.750 millones de euros), según el informe financiero trimestral de Nissan, publicado este miércoles.

El presidente de Nissan, Makoto Uchida, calificó durante una rueda de prensa estos resultados como "sólidos" y dijo que la empresa se muestra confiada de cara al resto del ejercicio, con una recuperación de la producción y las ventas en Japón y Norteamérica. Se trata del mayor aumento de la facturación de la empresa en un primer trimestre, un incremento que estuvo principalmente motivado por un cambio favorable del yen a la hora de repatriar las remesas.

El mercado chino lastra las ventas del grupo

"Este progreso continuo nos acerca hacia las metas del plan de transformación de Nissan", dijo Uchida, que alertó no obstante de que esto no significa que el crecimiento esté exento de obstáculos. Las operaciones de Nissan en China "atraviesan serios retos y han experimentado caídas de ventas significativas durante el primer trimestre", señaló el máximo representante del fabricante nipón.

La venta de vehículos de Nissan cayó un 3,7% entre abril y junio, período en el que comercializó 789.000 millones de vehículos. Las ventas se vieron arrastradas por la caída de las comercializaciones en China, del 45,8 % con respecto al año anterior, frente al aumento de las ventas en el resto del mundo.

En Norteamérica, su principal mercado, Nissan vendió en dicho trimestre 328.000 vehículos, un 33,1 %, mientras que las matriculaciones en Japón aumentaron un 19,1 %, con 106.000 unidades. Las ventas europeas del grupo japonés crecieron un 7,2%.

El director financiero de Nissan, Stephen Ma, atribuyó estos resultados al "rápidamente cambiante mercado automotor chino". Nissan espera que la caída de su presencia en el mercado chino lastre sus ventas para todo el año, por lo que recortó en un 7,5 % su previsión de matriculaciones entre abril y finales de marzo de 2024 (su ejercicio fiscal), hasta 3,7 millones de unidades.

Pese a la revisión a la baja de su estimación de ventas, Nissan mejoró sus previsiones de facturación, en el actual momento del recorte de gastos por la normalización de los precios de la energía y las materias primas, y ante los tipos de cambio favorables. El fabricante japonés espera que su beneficio neto para todo el ejercicio ascienda a 340.000 millones de yenes (2.180 millones de euros), lo que supondría un 53,2 % más interanual.

La firma automotriz espera asimismo que su beneficio operativo crezca un 45,8 % con respecto al año previo, hasta 550.000 millones de yenes (3.530 millones de euros), y que su facturación aumente un 18,9 % interanual, hasta 12,6 billones de yenes (80.910 millones de euros).