La compañía finlandesa de telecomunicaciones Nokia ha anunciado este miércoles que ha sido elegida para liderar el proyecto europeo "Sustain-6G", una iniciativa financiada por la Comisión Europea (CE) cuyo objetivo es explorar el uso sostenible de la tecnología móvil de sexta generación (6G). Este proyecto, que arrancará en enero del año que viene y está previsto que concluya sus trabajos en 2027, será desarrollado por el consorcio europeo público-privado Smart Networks and Services Joint Undertaking (SNS JU), fundado en 2021 para impulsar el liderazgo industrial de Europa en redes y servicios 5G y 6G.
Este consorcio está formado por proveedores europeos de equipos y servicios de telecomunicaciones, fabricantes de equipos industriales, instituciones de investigación y universidades europeas y numerosas pequeñas y medianas empresas del continente. "El proyecto 'Sustain-6G' mostrará cómo la industria de las comunicaciones aplicará la próxima generación de redes para crear un futuro sostenible, superando no solo los desafíos ambientales sino también los desafíos sociales y económicos”, señaló en un comunicado Peter Merz, vicepresidente de Nokia Standards.
Iniciativas relacionadas con la energía, la salud y la agricultura
Según Nokia, la iniciativa se centrará en tres ámbitos específicos, extraídos de los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas relacionados con la energía asequible, la salud y la agricultura. Respecto al primero de ellos, el consorcio estudiará cómo utilizar el 6G para crear redes eléctricas inteligentes que gestionen la demanda de electricidad y aplicar tecnologías de inteligencia artificial (IA) para el control en tiempo real de las redes de distribución.
En segundo lugar, explorará cómo el 6G puede hacer más inclusiva la sanidad digital y la medicina a distancia, mediante la creación de redes que mejoren el diagnóstico y posterior tratamiento en comunidades desatendidas y el uso de la inteligencia artificial para detectar brotes de enfermedades en fases tempranas.
Asimismo, investigará cómo se podría asignar la conectividad 6G de forma temporal para permitir aplicaciones agrícolas inteligentes que requieren gran ancho de banda, telemetría, análisis de datos y automatización, por ejemplo, en época de cosecha. Este es el tercer gran proyecto europeo de investigación relacionada con el 6G que lidera Nokia, después del Hexa-X y el Hexa-X-II, cuyo principal objetivo era crear una plataforma preestandarizada que sirva de base para la futura normalización de la tecnología móvil de sexta generación.