La nueva Orange-MásMóvil echará a andar a finales de marzo cuando se constituya una sociedad valorada en unos 18.600 millones de euros, que se postula como número uno en el mercado español de las telecomunicaciones en cuanto a clientes, no así en facturación que seguirá siendo superada por Telefónica. Orange España y MásMóvil, segundo y cuarto operador del mercado del país, han recibido este martes autorización por parte de la Comisión Europea (CE) para combinar sus operaciones en España.

Esta nueva sociedad, todavía sin nombre, está pendiente de recibir el visto bueno por parte del Consejo de Ministros, se prevé crear un operador, que combinando sus activos, capacidades y equipos, dará servicio a 7,3 millones de clientes de banda ancha, más de 30 millones de servicios móviles y más de 2,2 millones de televisión. La sociedad resultante tendrá unos ingresos estimados de 7.400 millones de euros, un ebitda después de arrendamientos de más de 2.300 millones de euros y unas sinergias esperadas a partir de 2028 de más de 450 millones al año.

Como parte de las condiciones impuestas por Bruselas para dar el visto bueno a la fusión, Orange-MásMóvil tendrán que ceder a Digi 60 MHz (megahercios) de espectro (pendiente de aprobación por parte del gobierno español) y un acuerdo opcional de roaming nacional.

Acuerdo de julio de 2022

El grupo francés Orange y Lorca JVCO, propietario de MásMóvil, cerraron en julio de 2022 su acuerdo de fusión en España. Por entonces, valoraron en 7.800 millones de euros a Orange y en 10.900 millones a MásMóvil, que había adquirido Euskaltel, según explicaron entonces ambas empresas en un comunicado conjunto. Sus previsiones pasaron por cerrar el acuerdo en el segundo semestre de 2023, aunque finalmente no se prevé que esté completado el proceso hasta finales del próximo marzo. 

La empresa resultante tendría forma de joint venture al 50%, administrada conjuntamente por ambas con igualdad de derechos de gobernanza.

El acuerdo incluye un derecho a activar una oferta pública de venta (OPV) bajo ciertas condiciones acordadas para ambas partes después de un periodo de hasta 42 meses y, en dicho escenario, Orange tiene la opción de toma de control de la entidad.

El análisis mostró que la sociedad tenía un paquete de deuda de 6.600 millones de euros sin recurso al accionista. Dicha deuda será financiada en parte con un pago de unos 5.900 millones de euros a los accionistas del Grupo Orange y MásMóvil, reparto que refleja los diferentes niveles de endeudamiento de las dos compañías por separado.

De acuerdo con ello, los accionistas de Orange recibirán 4.300 millones de euros por esta operación y los de MásMóvil 1.600 millones. El operador francés se reservará estos 4.300 millones de euros para poder sufragar la compra del capital de la nueva Orange-MásMóvil para adquirir esa mayoría.

Se espera que el presidente de la sociedad resultante sea Jean François Fallacher, el consejero delegado Meinrad Spencer y el director financiero, Ludovic Pech. De momento, no ha trascendido donde se ubicará la sede.