La patronal Pimec ha decidido personarse ante la Comisión Nacional de los Mercados en contra de la opa hostil del BBVA ante el Banc Sabadell, tal y como avanzó que haría ON ECONOMIA. La entidad se persona como parte interesada, según ha publicado la patronal en un comunicado.
"Pimec alerta que esta operación podría alterar significativamente la competencia en el sector bancario, con repercusiones directas sobre las condiciones de financiación para las empresas. Eso tendría un impacto negativo tanto para la economía como para la sociedad en su conjunto", alega la patronal.
El Observatori de la Pime, elaborado por la misma patronal, estimó que la fusión podría recortar un 8% la disponibilidad de crédito, caída de 54.000 millones de euros en préstamos.
El organismo, tras iniciar la fase 2 del estudio, tiene que escuchar a las partes implicadas y afectadas, empezando por el propio Sabadell. Las patronales, como representantes de los empresarios, se consideran afectadas, motivo por el cual Foment y la Cambra también ultiman alegaciones en contra de la opa. Tienen diez días hábiles desde el dictamen de la CNMC del martes pasado, por lo tanto, hasta el 26 de noviembre. La Asociación de Accionistas Minoritarios ya lo hizo el pasado viernes.
Las patronales hace tiempo que expresaron su punto de vista. Foment le hizo llegar una carta a principios de verano a la CNMC, en la que mostraba su preocupación por como la fusión del BBVA y el Sabadell podía afectar a las pequeñas y medianas empresas, posición que comparte con Pimec y la Cambra de Comerç, como ha manifestado Josep Santacreu en alguna ocasión. El banco catalán es uno de los preferidos por las empresas, especialmente pymes, y más en Catalunya.
Lo que denuncian los empresarios es que, con la pérdida de uno de estos dos bancos –son dos de las tres principales entidades para los catalanes, después de CaixaBank–, la oferta para las empresas y pymes, que suelen trabajar con más de un banco, queda ya muy reducida. Hay el Santander, y otras entidades, pero son menos proactivas a la hora de atender el tejido empresarial catalán o demasiado pequeñas o con poca presencia para sustituir al Sabadell.