Los recortes de plantilla del sector financiero han dejado desprotegidos a los trabajadores de las sucursales. Los de Unicaja alertan de un repunte de atracos en las oficinas y los de BBVA ponen de relieve un aumento de agresividad provocado por la falta de personal. Se trata de dos entidades, que además son candidatas a seguir reduciendo aún más su plantilla. La andaluza abrió la puerta un nuevo ERE para reducir costes hace solo unos meses y el banco con sede en Bilbao está probando un nuevo modelo de oficinas que consiste en abrir en días alternos. Si funciona, podría bajar la persiana a más sucursales, lo que le llevaría a reducir el número de trabajadores.
"La feroz reducción de recursos que viene practicando BBVA en la red comercial tiene graves consecuencias y las sufrimos día a día la plantilla que damos la cara en cada una de las oficinas del banco", indican desde CCOO. El sindicato mayoritario del banco revela que, para ellos, "es habitual, desgraciadamente", recibir las quejas de los clientes respecto al cobro de comisiones, las subidas de tipos de interés y alguna pérdida en inversiones. Unas quejas a las que se suman las de los horarios reducidos de caja, la brecha digital o las largas colas por falta de plantilla.
Y todo ello, unido a la degradación de imagen que ha sufrido el sector financiero en la sociedad. Lo que suele terminar, "como ha sido el caso reciente, en agresiones físicas, verbales y situaciones de acoso a compañeros y compañeras por parte de la clientela". Desde CCOO creen que esta situación tienen fácil solución, ampliar plantilla.
Precisamente en los últimos días BBVA ha anunciado que va a ampliar el número de trabajadores que tiene en España, pero no en la red comercial, contratará este año a 1.000 personas con perfil STEM para los servicios centrales. "El banco se pasó de frenada con el ERE, falta personal y en las oficinas ha aumentado la agresividad. Hay clientes que pegan a los trabajadores", denuncia la secretaria general de CC. OO. en BBVA, Isabel Gil Delgado.
BBVA cerró el primer trimestre (último periodo del que hay datos disponibles) con 26.380 trabajadores. Pese a que la cifra se ha elevado en los últimos meses por la contratación de personas con perfil tecnológico, la cifra sigue por debajo de la que tenía el banco en el inicio de 2020. Cuando estalló la pandemia superaba los 30.000 empleados en el país. Fue ese ejercicio cuando la banca empezó a cerrar oficinas y reducir personal ante el avance de la digitalización, de hecho, la entidad cuenta con una red de 1.883 oficinas en España frente a las 2.600 de entonces.
Delgado recuerda que BBVA contrató también el año pasado a unas 250 personas "con la excusa de que había que hacer un acompañamiento a las personas mayores". Pero esta cifra "no es suficiente" porque en las oficinas no se ha notado un alivio. "Llevábamos años pidiendo un refuerzo en las oficinas para ayudar a las personas mayores, pero no fue hasta el movimiento protagonizado por Carlos San Juan cuando el banco contrató".
En este sentido, advierte que los meses de verano serán complicados, pues como ocurre cada año, muchas oficinas del banco bajarán el telón, sobre todo en las grandes ciudades. Por lo que habrá menos abiertas, mucho personal de vacaciones y más saturación.
Desde Unicaja denuncian que, de manera muy seguida, se han producido 2 atracos en oficinas del banco en las que solo había una persona y en el último, una persona sufrió varias heridas de arma blanca. Desde el sindicato mayoritario, que aquí también es CCOO, aseguran que desde que el banco empezó a reducir plantilla a consecuencia del ERE estos sucesos se han disparado.
Unicaja sigue ejecutando su ERE. En menos de dos años, la entidad andaluza ha reducido el número de trabajadores en casi 2.000 empleados, según se desprende del informe financiero publicado a cierre de marzo. La entidad cerró el trimestre con un 20% menos de trabajadores que en el mismo periodo de 2021, en concreto con 7.781 personas frente a las 9.765 de entonces. También ha metido la tijera en oficinas, más incluso de lo pactado en el ERE, que se llevó a cabo tras la fusión con Liberbank. Cerró el primer trimestre con 967 sucursales, un 37% menos.
CC. OO. cree que las vacaciones de verano solo agravarían la situación, ya que este verano 214 sucursales quedarán con 1 persona, 206 con 2 personas y 227 oficinas con 3 personas, por lo que aumentaría esta oleada de atracos "con el correspondiente riesgo físico y psicológico que ello conlleva para la plantilla".
Por este motivo, exigían al banco que contratara personal "de manera urgente". Pues entendían que si Unicaja no tomaba cartas en el asunto, la oleada de atracos se iba a recrudecer "con consecuencias físicas y/o psicológicas irreparables para el personal afectado". Tras insistir, el banco ha aceptado y se ha comprometido a atender con contrataciones en las oficinas que están en situación crítica, según explican desde el sindicato a ON ECONOMÍA.
"Se trata de sustituciones de verano. El hecho de que estén dispuestos supone que son conscientes de la realidad y abre una ventana de oportunidad para la negociación de aumentar algo más la plantilla más adelante", concluyen.