La igualdad de género en el ámbito laboral está lejos de ser una realidad. Se han dado pasos, por ejemplo, en materia salarial, pero a nivel de presencia en cargos directivos, no se ha avanzado en los últimos años. Así lo muestran los datos del Observatorio Mujer, Empresa y Economía (ODEE) de la Cambra de Comerç de Barcelona, según el cual la presencia femenina en las cúpulas empresariales sigue muy por debajo de la paridad e incluso del 25%.
El estudio La igualdad en las empresas: presencia femenina, políticas y percepciones, recoge que solo un 24,3% de los cargos de responsabilidad en las empresas de Catalunya está ocupado por mujeres, porcentaje que solo ha avanzado seis décimas en los últimos seis años, ya que en 2018 era del 23,7%. La encuesta se ha realizado con una muestra de 1.500 empresas e incluye solo el sector privado, no el público.
La presencia de mujeres en las empresas, no solo en las cúpulas, sino en toda la organización, se ha reducido ligeramente en los últimos años, pasando del 41,4% al 41,1%. La hostelería es el sector más feminizado, con una presencia de mujeres del 57%, 3,5 puntos más que en 2018, mientras que la construcción es donde hay menos, con un 18,2%, 3,1 puntos menos. Por lo tanto, se incrementan las diferencias entre los sectores más feminizados y los más masculinizados. En el comercio, las mujeres representan el 42,2%, 1,4 puntos más, y en la industria, el 30,9%, tres décimas más.
La hostelería también es el sector con más mujeres directivas, si bien la brecha entre presencia femenina total y en las cúpulas es aún mayor que en otros sectores. En este sector, las mujeres ocupan el 35,6% de los puestos de responsabilidad, 3,2 puntos más que en 2018, pero 20 puntos menos que la presencia femenina total en el sector. La imagen de la hostelería es la de un ámbito con mujeres trabajando, pero hombres mandando.
En el comercio, las mujeres son solo el 26% de las directivas, 2,4 puntos más que hace seis años, mientras que en la industria son el 19,7%, 1,2 puntos más. En la construcción, como ocurre con el número total de mujeres, no solo las directivas son menos, sino que van a la baja: suponen el 14%, 2,9 puntos menos.
Un cambio de mentalidad
Sílvia Bach, empresaria y presidenta del Observatorio Mujer, Empresa y Economía de la Cambra de Comerç, ha explicado que falta formación en la sociedad y las empresas para educar en que “la igualdad es un tema de todos, no solo de las mujeres”. “Las mujeres hemos entrado en el mundo económico y empresarial, pero parece que ya está todo hecho. Y los hombres no han entrado en el mundo del cuidado de las personas”, ha lamentado, lo que dificulta la conciliación. “Tenemos que cambiar de mentalidad. No es una cuestión de justicia social, es como debe ser”, ha concluido.
Josep Santacreu, presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona, ha subrayado que “si queremos una sociedad más justa”, tiene que haber más mujeres en puestos de responsabilidad. “Hay mujeres con un gran talento que no llegan donde deberían llegar. En un momento en el que el talento es escaso, es una pérdida para la sociedad. No debemos quedarnos solo en la reflexión, tenemos que destinar recursos a la igualdad”, ha añadido.
El estudio incluye una parte de opinión de los empresarios y directivos, tanto sobre cómo ven la presencia femenina y el sesgo de género como sobre el resultado de las políticas de género. El 62% aseguran que las empresas están mejor gestionadas cuando hay mujeres y hombres en cargos directivos, frente a un 4,4% que está en desacuerdo. El 33,9% creen que las mujeres tienen un estilo de liderazgo más colaborativo.
A su vez, el 37,4% admite que las mujeres con la misma preparación tienen más dificultades para promocionar, frente a un 26,6% en desacuerdo. En consecuencia, el 35,7% piensan que las mujeres están infrarrepresentadas en los departamentos estratégicos de las empresas. A pesar de todo, solo un 20,4% ve discriminación hacia las mujeres en el ámbito laboral de la empresa, como en la selección, la promoción, el salario, etc., frente a un 42% en desacuerdo.