Adigital, la asociación de la economía digital, y la plataforma EsTech, que reúne a las principales tecnológicas españolas con altas perspectivas de crecimiento, han suscrito un manifiesto en el que plantean una serie de medidas dirigidas a mejorar las condiciones de inversión de las scale-ups del país para, entre otras cuestiones, mejorar la competitividad de la economía nacional y caminar hacia un "Ibex 35 más tecnológico". El documento, que cuenta con el respaldo de compañías como Cabify, Civitatis o Wallapop, entre otras, destaca que España cuenta con áreas diferenciales en sectores como la digitalización, la transición energética, el desarrollo de centros tecnológicos y en políticas públicas.

Sin embargo, creen que el contexto actual está marcado por "desafíos complejos", como la creciente polarización internacional, la baja competitividad y productividad del tejido empresarial europeo y la necesidad de reforzar la seguridad económica y el impacto socioeconómico. "Ante esta situación, España debe actuar con ambición, liderazgo y una gobernanza público-privada efectiva que, con visión de largo plazo, incida en la transformación económica a través de la digitalización y sus tecnologías asociadas", apunta el manifiesto.

Reclamaciones de las entidades firmantes

En este contexto, las entidades reclaman situar a las scale-ups como un "eje prioritario" de la política económica de España y también como una "parte activa en el diálogo social" y en los espacios público-privados de colaboración institucional. Además, urgen a potenciar la participación de las scale-ups en los procesos de contratación pública y de compra pública innovadora, así como en mecanismos de innovación regulatoria. Otro de los aspectos que reclaman es la necesidad de involucrar a nivel público a las empresas de este tipo cuyo impacto social y ambiental contribuya a la transición climática y a la integración de los colectivos vulnerables.

Las asociaciones también proponen que se impulse un centro de profesionales tecnológicos que esté conectado con modelos de formación dinámica, "como la formación profesional", subrayan. En esa línea, piden que se promueva la adaptación del mercado laboral a las "necesidades de generación y atracción de talento", así como a los nuevos modelos de emprendimiento y gobernanza empresarial. A ello se suma la reclamación de potenciar nuevas fuentes de inversión pública y privada con "capacidad real" de acelerar el crecimiento de las scale-ups y que se las acompañe "en todas sus etapas".

Inversión público-privada

Además, apuestan por conectar los recursos de los inversores públicos con las necesidades de financiación de las compañías digitales y el capital privado del país. "La comunidad emprendedora e inversora ha sido uno de los ejes de modernización e impacto económico-social de nuestro país en los últimos años. Su rol desacomplejado, su capacidad para asumir riesgos y su visión innovadora y global le sitúan como una comunidad clave para contribuir al liderazgo económico de España, donde han surgido algunas de las empresas tecnológicas de alto crecimiento más relevantes de Europa", declaran los firmantes del documento.