Toni Solà diplomado en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Vic – Universidad Central de Catalunya (UVic-UCC) explica que identificó carencias en la calidad de los productos nutricionales disponibles en el mercado cuando tenía que hacer recomendaciones a las personas que acudían a su consulta y a los deportistas profesionales de varias disciplinas, a los cuales hacía de asesor. Entonces le surgió la necesidad de enredarse en "la creación de alternativas proteicas que realmente ayudaran a las personas".

Así, en 2020 surgió Protein Gastronomy, una empresa emergente en que lleva invertidos 350.000 euros para producir y comercializar complementos que tienen la proteína como base, y siempre utiliza materia de origen natural y ecológicos. "No pongamos aditivos ni aromas artificiales, ni edulcorantes, sino cacao o fresa liofilizada y leche ecológica," recalca Solà y explica que tienen tres líneas: la proteína en base de leche, la línea vegana y la producida con proteína de algas. "Nuestro valor añadido es la calidad y origen natural de nuestros productos", defiende para explicar que los productos Protein "no quieren responder a ninguna moda".

Según su impulsor, los productos de Protein Gastronomy, una vez en el mercado, "han despertado no solo el interés de los consumidores que queríamos contentar, es decir, deportistas y personas con patologías concretas, sino que hemos visto cómo tenían un número significativo de personas mayores que estaban consumiendo el producto". De hecho, el 70% de las ventas se hacen por el canal online y "hay clientes que están fidelizados desde el primer momento".

De aquí la nueva iniciativa que ha tirado Solà. También en Torelló (Barcelona), donde tiene el centro de investigación y producción -en una nave de 700 metros cuadrados-, ha creado una nueva línea de productos, bajo la sociedad Protein Sénior. "Es una nueva gama de productos que van dirigidos directamente a las personas mayores y que se distribuirán por el canal de la red de farmacias", de momento en toda España. Su previsión es llegar a 400 puntos de venta de la red existente en España, a finales de 2025.

Inicialmente, en un par de meses, sacará en el mercado 4 productos -cada uno en formato de 180 gramos y de 400 gramos- que contribuirán a prevenir la sarcopenia -la pérdida de demasiado y potencia muscular por envejecimiento o sedentarismo- y a combatir los dolores crónicos que sufren muchas personas cuando llegan a una cierta edad. Por eso, Solà considera que, además de la venta en farmacias, sus productos son adecuados para tratamiento prescrito en centros de asistencia sanitaria.

"Son nutrientes, pero tenemos que entender que son alimentos, y que, por lo tanto, tendrían que entrar en las cocinas de muchos hogares, especialmente donde hay personas mayores porque a determinadas edades la ingesta de proteína comiendo pescado, carne o huevos, por ejemplo, disminuye y, además, el cuerpo las absorbe menos". Por lo cual, hay que tomar suplementos nutrientes, asegura Solà.

Este nuevo proyecto, en el cual ha invertido unos 110.000 euros, prevé que tenga un crecimiento exponencial, generando unos ingresos de 800.000 euros a finales de 2025. Se trata de productos que llegarán a la farmacia a partir de 20 euros el envase de 180 gramos, que con una dosis media puede durar entre 10 y 12 días. Solà destaca que la presentación de la proteína en polvo, sin aditivos, permite mezclar el producto con los alimentos y facilitar su ingesta, todo y que -destaca- son fáciles de digerir por sí solos. En una segunda fase, Protein Sénior incorporará otros formatos como la proteína sólida y la presentación en bolsas (doypack).

Para afrontar el crecimiento en las dos líneas de negocio, Solà tiene al ninguno dar entrada a inversores "que nos aporten conocimiento en producción y distribución". "No queremos que se pervierta la marca, por lo tanto, buscamos inversores que compartan nuestros valores y la esencia de Protein Gastronomy i Sènior". En el caso de Protein Gastronomy, el futuro a medio termina pasa por su introducción en el canal de la gran distribución, en "cadenas bien posicionadas con productos de calidad", advierte Solà.

Para la línea Sénior, el emprendedor quiere iniciar conversaciones con distribuidoras farmacéuticas que conozcan el sector, el tipo de producto, y el canal de las farmacias.

De hecho, la comercialización de Protein Sènior irá acompañada del lanzamiento de una plataforma online que dará información y ayudará al farmacéutico a la prescripción de los complementos y también servirá para hacer el seguimiento del tratamiento que aconsejen a sus clientes. "En general, la prescripción de complementos nutricionales es acertada, pero los consumidores tienen poca adherencia; son poco persistentes y abandonan pronto", argumenta. Por eso, la empresa ha desarrollado un display como herramienta para medir la fuerza de los usuarios; "así el consumidor apreciarà la mejora que tendrá".