Este miércoles se cumple un año de la dimisión de Manuel Conthe como consejero de Unicaja. No fue un hecho aislado, desde entonces la entidad malagueña ha perdido otros seis consejeros más, el último este mismo martes. Pero las salidas continúan y tras las renuncias llegan los ceses, de hecho, el banco llevará a la junta de accionistas – que se celebrará previsiblemente en marzo- el nombramiento de cuatro nuevos consejeros propuestos por la Fundación, su primer accionista con más del 30% del capital.

El baile de ceses y dimisiones iniciado en febrero de 2022 hará que en marzo, de los 15 miembros que Unicaja y Liberbank designaron en verano del 2021 para crear su primer consejo de administración cuando se fusionaron, solo queden seis. Y que además se cuestione incluso el futuro del presidente y del consejero delegado.

Las discrepancias entre el primer espada, Manuel Azuaga -que ya era presiente de Unicaja antes de la fusión- y el segundo, Manuel Menéndez, que asumió el cargo de consejero delegado cuando el andaluz absorbió Liberbank, han estado detrás de esta purga, aunque la entidad siempre ha echado balones fuera cuando se le ha preguntado.

Menéndez se alió con Braulio Medel (que fue hasta el año pasado presidente de la Fundación Unicaja) quen poco a poco fue apoyándole en todas sus decisiones para que tuviera más poder dentro del banco. Pero Medel se vio obligado a dimitir al ser cuestionado por el Gobierno español sobre su idoneidad para ejercer de presidente de la Fundación.

Antes de eso se produjo una oleada de renuncias en el consejo. Al expresidente de la CNMV, Manuel Conthe, le siguieron Ana Bolado y Manuel González Cid. Estos tres consejeros independientes de Unicaja Banco anunciaron su dimisión en apenas un mes. González Cid dejó claro en el comunicado que remitió a la CNMV que estaba “disconforme con el desarrollo de la gobernanza del banco", poniendo de relieve lo que ya era evidente, las peleas internas por el poder y que habría más salidas.

Entre tanto, la junta de accionistas de Unicaja Banco celebrada en marzo del año pasado aprobó el nombramiento de dos nuevos consejeros, el de Rafael Domínguez de la Maza como consejero dominical en representación de Mayoral, que se alzó con el 7% del accionariado del banco. Y el de Carolina Martínez como consejera independiente. Más tarde, Unicaja nombraba por cooptación a Isidoro Unda consejero independiente.

Fue en junio cuando el presidente de la Fundación Unicaja, Braulio Medel, dimitió tras meses de polémicas por presuntas irregularidades. Su sustituto, José Manuel Domínguez, inició la búsqueda de cuatro nuevos consejeros dominicales para Unicaja con el objetivo de iniciar una nueva etapa y borrar cualquier relación con la antigua, la de Medel.

La Fundación había perdido la confianza en los cuatro consejeros que le representaban en Unicaja Banco (Juan Fraile, Petra Mateos-Aparicio, Teresa Sáez y Manuel Muela) por apoyar el tándem formado por Braulio Medel y Manuel Menéndez. Y por tanto, estar en contra del presidente, Manuel Azuaga.

A finales de 2022, la Fundación ya tenía elegidos a los consejeros que los iban a sustituir, sin embargo, tres de ellos no han querido esperar a su cese y también han dimitido. Juan Fraile Cantón lo hizo en diciembre, Manuel Muela hace apenas cinco días, dejando claro en su comunicación a la CNMV “su discrepancia” con el proceso que está llevando a cabo la Fundación para su sustitución. Y Petra Mateos-Aparicio anunciaba su dimisión a última hora de este mismo martes.

Pero entre medias de estos también renunció como consejera María Garaña, procedente de la antigua Liberbank y por tanto, otra alineada del consejero delegado, Manuel Menéndez. Garaña -que anunció su salida en enero- es además presidenta de la comisión de nombramientos y retribuciones el consejo de administración.

Unicaja debe nombrar cinco nuevos consejeros

En la junta de Unicaja, que se celebrará previsiblemente en marzo, los accionistas tendrán que respaldar el nombramiento de los cuatro consejeros que la Fundación ha elegido para representarlos. Se trata de Miguel González, Juan Antonio Izaguirre, Natalia Sánchez y José Ramón Sánchez; Se desconoce si María Garaña, que comunicó su renuncia el 19 de enero, tendrá sustituta antes de la junta de accionistas y su elección podría llevarse a votación también en ese encuentro, o se producirá más adelante.

Sea como sea, el consejo de Unicaja tiene otra labor importante este 2023, traspasar las funciones ejecutivas del presidente al consejero delegado, como ya ha ocurrido en otras entidades, por ejemplo, en Banc Sabadell. En la entidad catalana el presidente sigue siendo Josep Oliu, pero ya no tiene funciones ejecutivas porque las asumió el consejero delegado, César González-Bueno.

Unicaja y Liberbank también lo acordaron así en el proyecto común de fusión cerrado el 30 de julio de 2021. En este se indica que “en un plazo máximo de dos años” -que vence ya este verano- el consejo de administración modificará el modelo de gobernanza de Unicaja Banco, de modo que la presidencia pase a ser no ejecutiva y se adapten las funciones del consejero delegado.

Asimismo, el consejo debe revaluar al consejero delegado y decidir si sigue manteniendo este cargo. Y esto es lo que ha generado ruido en las últimas semanas. Tanto es así, que el diario Expansión adelanta que Manuel Azuaga no solo perderá las funciones ejecutivas, sino que además dejará de ser presidente antes del verano e incluso se cuestionan si Manuel Menéndez seguirá como CEO.

Desde el banco, que no han querido pronunciarse sobre esta polémica, explican a ON ECONOMIA que si Unicaja estuviera llevando a cabo cualquiera de estos cambios se debería confirmar al mercado. Y aseguran que únicamente están trabajando en pasarle la batuta de determinadas funciones ejecutivas al CEO.