Ryanair transportó 15 millones de pasajeros en marzo, un 10% más que en el mismo mes del año anterior. Y en el conjunto del su año fiscal 2024/2025, que acaba precisamente en marzo, alcanza ya los 200,2 millones de pasajeros, un 9% más que en el anterior. Estos más de 200 millones suponen una cifra récord no solo para la aerolínea irlandesa, sino en todo el sector aéreo. Con estos datos, la compañía aérea se posiciona de nuevo como líder en Europa.
A propósito de este logro, Ryanair premió a una pasajera el pasado 26 de marzo por ser la número 200 millones. Y en el encuentro, celebrado en el aeropuerto de Madrid-Barajas, la portavoz en España, Portugal, Francia y Marruecos, Elena Cabrera, destacó que es "un hito en Europa que ninguna otra compañía ha alcanzado" a día de hoy.
También explicó que los aviones de Ryanair siempre "van completos". De hecho, en el último año fiscal su ocupación ha sido del 94%. Por este motivo, agregaba, "no es posible que todos los pasajeros entren con maleta" en el avión. Cabrera justificaba así la política de equipaje de la aerolínea, tan criticada e incluso sancionada por el ministerio de Consumo en España. La compañía permite un bulto de mano o una mochila gratis que tiene que caber debajo del asiento, el resto, maleta de cabina o grande, se debe pagar.
Por este motivo, el ministro de Consumo, Pablo Bustinduy, ha multado a cinco compañías low cost (por cobrar equipaje y por el asiento también). Aunque la irlandesa es la que tendrá que pagar una cantidad más alta (107 millones de euros de los 179 de multa total) dado su peso en el sector aéreo. El CEO de Ryanair, Michael O’Leary, que le tiene declarada la guerra al ministro Bustinduy destaca que estos 200 millones de pasajeros "no tuvieron ningún problema en elegir y aceptar las políticas de equipaje de Ryanair", que permiten llevar una maleta de mano de tamaño medio sin coste adicional.
"Cualquier pasajero que desee llevar equipaje adicional en cabina o facturar maletas debe pagar por ello, ya que este equipaje genera costes adicionales para la aerolínea", explica en un comunicado donde además asegura que el Ministro "no tiene idea" de lo que realmente quieren los consumidores porque así lo demuestran los más de 200 millones de pasajeros. "Los consumidores prefieren las tarifas bajas de Ryanair y aceptan nuestras políticas de equipaje, que son sensatas y opcionales", defiende.
"Lo que no quieren es la intervención de ministros que creen que puede ignorar la legislación de la UE para imponer multas de 180 millones de euros solo a aerolíneas de bajo coste, lo que encarecerá el precio de los vuelos para todos los pasajeros. Bustinduy y su gobierno deben cumplir con la normativa de la UE, y esto debería ser una prioridad en lugar de su desesperado intento en Bruselas de buscar apoyo entre algunas asociaciones de consumidores, cuando está claro que no cuenta con el respaldo de los consumidores europeos para sus multas ilegales de equipaje ni para las tarifas más altas que estas generarían", presume.
Ryanair asegura que sus políticas de equipaje son legales, que les respalda la normativa europea y entienden que la sanción no va a seguir adelante. Pero en el caso de que siguiera, advierten, los mayores perjudicados van a ser los consumidores porque se verían obligados a subir precios.