El Banco Santander, BBVA y Sabadell refuerzan plantilla en España. Las tres entidades han contratado a más de 2.700 personas en los últimos doce meses, superando así los amargos años de despidos y reducción de costes. Pero el movimiento no es común en todo el sector financiero, de hecho, Unicaja acaba de reconocer que vuelve a estudiar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) pese a que el último (cerrado a finales de 2021) aún no se ha ejecutado por completo.
Santander, BBVA y Sabadell también han llevado a cabo EREs y prejubilaciones durante 2020 y 2021. Tras ellos, los sindicatos denunciaron que faltaba personal -principalmente, en oficinas- y los propios clientes -sobre todo, los mayores- se quejaron de la mala atención en sucursales, así que estas entidades han incrementado el número de trabajadores en el último año.
BBVA es el banco que más ha engordado su plantilla en España. El banco que preside Carlos Torres cerró marzo con 26.380 trabajadores, unos 1.600 más que el año anterior, según se desprende de su informe financiero. La entidad ya anunció en abril de 2022 que reforzaría el personal de oficina con una nueva figura (gestor comercial y de acompañamiento digital), que daría respuesta a la demanda de los clientes sénior y, además, acompañaría a todos los clientes más afectados por la brecha digital, en este contexto anunció que contrataría a 350 personas.
Por otra parte, BBVA puso en marcha una nueva división a nivel grupo (desarrollo de Software) para la que contrató a unos 2.000 ingenieros especialistas en data que trabajan en la aceleración de la transformación digital de los canales del banco y 400 de estas contrataciones fueron en España. Asimismo, la entidad abrió el año pasado dos centros tecnológicos en Bilbao y está creando cientos de empleos.
Santander también se ha centrado en contratar perfiles más tecnológicos, en concreto, personas con carreras STEM (ingenierías, ciencias, matemáticas). El banco que preside Ana Botín cerró el primer trimestre con 27.047 empleados en nuestro país, casi 1.000 más que un año atrás, después de abrir varios centros de desarrollo tecnológico. Uno en Valladolid de Santander Consumer Finance para impulsar la transformación de su negocio, con este anunció la contratación de 100 profesionales de diferentes perfiles tecnológicos. Y con Openbank, el banco 100% digital de grupo, también ha abierto distintos hubs en Madrid, Bilbao, Valencia y Málaga. La entidad también ha incorporado gestores comerciales en el último año para mejorar la atención en oficinas.
Sabadell cerró marzo superando los 13.000 empleados, unos 240 más que el año anterior. El banco activó durante 2022 el programa ‘Banking Sales Graduate Programme’ orientado a contratar personas recién graduadas para reforzar el área de banca de empresas y este 2023 lo ha reactivado para fichar a más de un centenar de personas que ejercerán de directores de negocios en crecimiento dentro del ámbito comercial y muchos de ellos, trabajarán en las oficinas. De esta manera, la entidad catalana atiende a una de las peticiones que los sindicatos llevaban meses pidiendo después de que algunas sucursales se vieran desbordadas tras los recortes de plantilla. Pues desde el inicio de la pandemia, en 2020, el número de trabajadores del Sabadell se había reducido en más de 3.600 personas.
CaixaBank, que llevó a cabo el ERE más grande del sistema financiero español tras la fusión con Bankia -una operación que le convirtió en el banco más grande por activos, empleados y clientes- aún no ha dado a conocer las cifras de empleados del primer trimestre. Las salidas del ERE, que afectaron a casi 6.500 personas, terminaron en diciembre de 2022. Pero el banco también anunció el pasado ejercicio que contrataría a 1.350 trabajadores de forma temporal para reforzar la atención de los clientes mayores en las oficinas.
Hay que recordar que el Gobierno español obligó a los bancos en febrero de 2022 a firmar un protocolo contra la exclusión financiera y a llevar a cabo algunas medidas para mejorar la atención de los mayores, por ejemplo, aumentando el horario de atención al público en oficina o reforzando la atención presencial en las sucursales, ya que este colectivo se había sentido discriminado ante el avance de la digitalización, como puso de relieve Carlos San Juan.
Unicaja, sin embargo, va a contracorriente del sector. El quinto banco más grande del país sigue ejecutando su ERE. Hasta marzo habían dejado del banco casi el 90% del total de afectados, por lo que aún hay más de 200 personas por salir, según desvelaron en la presentación de resultados del primer trimestre, pese a ello, la entidad se plantea ya volver a reducir plantilla. El andaluz cuenta ahora con casi 2.000 empleados menos que hace dos años, cuando cerró la fusión con Liberbank.
La entidad cerró marzo con un 20% menos de trabajadores que en el mismo mes de 2021, en concreto con 7.781 frente a los 9.765 de entonces. El ERE acordado entre Unicaja y los sindicatos a finales de 2021 para 1.513 salidas tenía como objetivo que el banco ahorrara unos 97 millones de euros en costes cada año. En las cuentas del primer trimestre se muestra que Unicaja ha conseguido reducir los costes de personal pese a la inflación y la subida salarial pactada entre los sindicatos y la patronal.
Entre enero y marzo, dichos gastos ascienden a 120 millones frente a los 129 millones del año pasado, sin embargo, el director financiero explicó que el nuevo ERE les ayudaría a reducir aún más los costes y ganar eficiencia. Unicaja ha sido el banco que más ha reducido su beneficio por el impuesto a la banca, exactamente un 40% frente al 4% que lo ha reducido Sabadell. BBVA, sin embargo, ha conseguido mejorarlo en casi un 40% (a nivel grupo) y Santander, un 1%.