Banco Santander sigue en cifras de récord gracias a las subidas de los tipos de interés, que han dado un soplo de aire fresco a toda la banca. La entidad que preside Ana Botín ganó 8.143 millones de euros entre enero y septiembre, un 13% más, gracias a las subidas de los márgenes provocadas por el encarecimiento del dinero en la zona euro y el resto de mercados donde opera, como Reino Unido.
El banco publicó este miércoles sus resultados del tercer trimestre, periodo en el que ganó 2.902 millones, un 26% más. En el cómputo de lo que llevamos de año, la mejora fue menor, de ese 13%, en parte por el pago del impuesto a la banca, que se llevó a cabo en el primer trimestre. Santander es una de las entidades más afectadas y lo seguirá siendo en 2024 y, si PSOE y Sumar llevan hacia adelante su pacto de investidura anunciado este martes, quizá también de forma indefinida.
Volviendo a la cuenta de resultados, el margen bruto, lo que para el sector bancario sería equiparable a los ingresos, se elevó un 13%, hasta los 43.095 millones. Los costes de explotación subieron, pero no tanto (10%), por lo que el margen neto subió un 16%, hasta los 24.134 millones de euros. Gracias a estas mejoras, mantiene los objetivos de calidad de sus activos, con un ROTE por encima del 15%, y cumple con los objetivos que se había marcado para 2023.
Donde el banco está empezando a poner atención, algo que se puede hacer extensible al resto del sector, es en la morosidad. Si bien la tasa de créditos dudosos sigue siendo baja, del 3,13%, está subiendo, pues a 30 de junio estaba en el 3,07%. Por ello, el banco que dirige Héctor Grisi elevó un 21% las dotaciones para insolvencias respecto al mismo periodo del año pasado. La subida de los tipos de interés encarece las hipotecas variables y otros productos, lo que aumenta los ingresos de los bancos, pero a su vez, dificulta su pago e incrementa el número de clientes que no puede hacer frente a las cuotas.