El Banco Santander y Mapfre han realizado una nueva ampliación de capital en la sociedad que crearon para lanzar la hipoteca inversa en España. El banco y la aseguradora han llevado a cabo tres ampliaciones desde que constituyeron la joint venture en enero de 2022, hace ahora casi tres años. La primera fue en marzo de ese ejercicio, cuando inyectaron unos 5 millones. La segunda fue en el verano de 2023, momento en el que la filial recibió otros 8 millones, y la tercera se produce ahora, cuando las compañías han incrementado el capital en otro millón de euros adicional.
En suma, el capital social de Santander Mapfre Hipoteca Inversa asciende ya a 14 millones de euros, según el registro mercantil. Desde esta sociedad (participada al 50% por cada entidad) las empresas están impulsando la venta de este producto, que va dirigido a un público muy específico (mayores de 65 años que quieran completar sus ingresos durante la jubilación) y estas ampliaciones le permiten seguir desarrollando el producto.
La hipoteca inversa de Santander y Mapfre empezó a venderse en Madrid en noviembre de 2023, se extendió a la Comunidad Valenciana, Murcia y Albacete en febrero de 2024, llegó a Catalunya en marzo y al resto de provincias de España en julio. El banco y la aseguradora, que venden este producto en sus oficinas, esperan acabar el año con unas 200 hipotecas vendidas, el doble de las que habían vendido en verano. Cada vez se venden más rápido, aunque el objetivo de estas compañías no es su venta masiva, explican a ON Economía.
Para poder contratar una hipoteca inversa en las oficinas de estas entidades, se deben cumplir determinados requisitos y esto hace que algunas poblaciones queden excluidas. Entre estos requisitos está el valor de la vivienda, no podrán hacer hipoteca inversa con Santander-Mapfre los propietarios de una casa cuyo valor sea inferior a 200.000 euros. Se pide también que la vivienda sea en propiedad y que no tenga cargas hipotecarias, tiene que ser la primera residencia y los beneficiarios deben ser los únicos residentes en la casa.
Otra característica importante es que la ubicación de la vivienda tenga un elevado dinamismo comercial. Es decir, que se pueda vender rápido cuando fallezca la persona o personas que han contratado la hipoteca inversa, ya que este producto funciona como una hipoteca, pero al revés. El banco concede un préstamo al cliente estimado a esperanza de vida y le va ingresando una cantidad fija en forma de abonos mensuales.
El contratante (hipotecado) no devuelve nada en vida y tras su fallecimiento, son los herederos los que se encargan de devolver el préstamo consumido y sus intereses. El banco y la aseguradora dan un plazo a los herederos de 9 meses sin intereses para cancelar el préstamo, que se puede conseguir con la venta de la vivienda. O abonando lo que se debe.
Cambios en el consejo de Santander Mapfre Hipoteca Inversa
Recientemente, Mapfre ha hecho algunos cambios en el consejo de administración de ‘Santander Mapfre Hipoteca Inversa’, la sociedad que comparten y desde la que se decide el recorrido de este producto. La aseguradora ha nombrado consejero a José Manuel Corral (que es CEO de Mapfre Vida desde agosto) en sustitución de Raúl Costilla.
Asimismo, la aseguradora ha nombrado consejero a Julián Trinchet en sustitución de Olga Abad (Santander) y a José Luis Sánchez Bascones. Por su parte, el Santander ha incorporado a este consejo a Judit Ambrona. Pero la joint venture cuenta con otros siete consejeros más y son Juan Fernández Palacios (Mapfre) que también es presidente y Francisco Giménez Bosch (CEO de Santander Seguros) que a su vez es vicepresidente.
Además de Yolanda García Manzano (CFO de Mapfre España), Francisco del Cura Ayuso (presidente de Santander Insurance Holding), Almudena de Arteche Villa (directiva de Mapfre Vida), Catalina Mejías (directora financiera de Santander) y Abel González (control de gestión del banco).