La compañía saudí STC culmina su desembarco en Telefónica. La operadora ha informado este jueves que ha llevado a cabo al fin el incremento de su participación en la teleco del 4,97% al 9,97%, al ejecutar la compra del 5% pendiente, que tenía mediante derivados. Este aumento de la participación le da derecho a pedir un consejero, como se ha encargado de recordar la empresa saudí.

"La recepción de la autorización de inversión extranjera por parte del Consejo de Ministros de España", producida a finales de noviembre de 2024, "permite a STC aumentar sus derechos de voto del 4,97% al 9,97% y el derecho a nombrar un miembro del consejo de administración de Telefónica", dice el comunicado colgado por la empresa en su página web. "Tras el cumplimiento de todos los requisitos pertinentes, STC ha aumentado sus derechos de voto", añade la breve nota de la operadora.

Con esta operación, prevista desde el inicio, pero que estaba sujeta a la ley antiopas, STC se sitúa prácticamente con el mismo porcentaje que la SEPI, la empresa de inversiones del Estado español, que posee un 10%, un año y medio después de anunciar su entrada en Telefónica. Por debajo queda La Caixa, a través de Criteria, que tiene un 5%, y Blackrock y el BBVA, con algo menos de este porcentaje.

STC tenía seis meses para ejecutar la compra de estos derivados después de la aprobación por parte del Consejo de Ministros, pero lo ha hecho una semana después del viaje del nuevo presidente de Telefónica, Marc Murtra, a Riad para reunirse con la cúpula de la empresa saudí.

La teleco española ha cambiado bastante respecto a aquella que abordó STC. El movimiento de esta empresa generó la reacción del Gobierno de Pedro Sánchez, que decidió comprar el 10% para controlar los movimientos alrededor de una compañía que considera estratégica. El Estado, a través de la SEPI, se ha convertido en el accionista principal, hasta el punto que, este enero, promovió la salida de José María Álvarez-Pallete y el nombramiento de Marc Murtra como nuevo presidente ejecutivo.