El Estado ya controla el 10% del capital de Telefónica. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) ha anunciado este lunes haber llegado hasta el umbral marcado como objetivo en la operadora azul tras la irrupción de la saudí STC en septiembre del año pasado y culmina así la operación de compra ordenada por el Gobierno de España.
De este modo, la entidad a través de la cual el Estado invierte en empresas cotizadas ha adquirido un total de 567.016.155 acciones, con un precio medio de 4,0295 euros por acción, lo que supone un desembolso de casi 2.285 millones de euros. A esta cantidad hay que sumar 541 acciones que SEPI ya tenía en cartera y que elevan el número total a 567.016.696.
"La operación se ha llevado a cabo minimizando el impacto en la cotización y cumpliendo con las comunicaciones de participaciones significativas establecidas en la normativa de los mercados donde opera", ha destacado la entidad que preside Francisco Javier Fernández Mañanes.
La SEPI ha destacado que Telefónica es una de las principales compañías del país, líder en el sector de las telecomunicaciones y clave en otros ámbitos estratégicos. De igual modo, ha puesto en valor que la empresa es determinante por sus capacidades industriales y áreas de conocimiento, ya que desarrolla actividades relevantes para la economía y el tejido productivo, incluyendo las relacionadas con la seguridad y la defensa.
Telefónica podría pedir otro consejero
"Con vocación de permanencia, la participación de SEPI aporta una mayor estabilidad accionarial a la compañía para la consecución de sus objetivos y contribuye a la protección de sus capacidades estratégicas", ha concluido la entidad pública.
Con esta nueva adquisición, el Gobierno cumple con el objetivo de controlar el 10% de la teleco que dirige José María Álvarez-Pallete. Recientemente, la compañía oficializó la entrada en el consejo de administración del Estado con el nombramiento de Carlos Ocaña como consejero dominical, aunque el ministro para la Transformación Digital y la Función Pública, José Luis Escrivá, no descartó el pasado viernes solicitar otro consejero.
Se adelanta así a STC, la operadora saudí perteneciente a la familia real del país. Meses atrás, la firma adquirió un 9,9% del capital social de Telefónica, siendo un 4,9% acciones directas y un 5% derivados financieros. La operación, valorada en 2.100 millones de euros, está pendiente de aprobación final por parte del Ejecutivo. Por su parte, STC aún no se ha pronunciado al respecto de su intención de tener presencia en el máximo órgano de decisión de la compañía.
La compra se ha financiado a través de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y no de la SEPI para acelerar el proceso. Actualmente, la entidad pública es el primer accionista de Telefónica, por delante de La Caixa (7,5%), agrupando las participaciones de CaixaBank y CriteriaCaixa. BlackRock (4,983%) y BBVA (4,839%) completan la lista de accionistas de la teleco.