Los sindicatos del sector financiero piden a las patronales bancarias la apertura anticipada del convenio colectivo – que vence a final de año- para poder negociar una nueva subida de sueldo que beneficie a más de 140.000 trabajadores. En concreto, los 81.000 que representa la Asociación Española de Banca, donde se encuentran Santander o BBVA entre otros; los otros 51.000 de CECA, que incluye a CaixaBank o Unicaja, y los más de 12.000 de las cajas rurales, representados por UNACC y Asemecc, donde están Cajamar, Cajalmendralejo o Globalcaja, entre otras.

Estas cuatro asociaciones ya aprobaron una subida salarial del 4,5% para este año con el objetivo de compensar a sus empleados por la pérdida de poder adquisitivo a consecuencia de la inflación. Pero los representantes de los trabajadores ya advirtieron que cuando se conocieran los datos definitivos del IPC de 2022 y todas las entidades hubieran presentado resultados anuales, como ha ocurrido este mes de febrero, estudiarían si debían hacer una nueva petición.

Ahora que han confirmado que los seis bancos del IBEX 35 han obtenido “unos beneficios récord” de casi 21.000 millones de euros el año pasado, CCOO y UGT afirman que exigirán una segunda fase de subidas salariales. Al respecto, recuerdan que el Banco Santander, con 9.605 millones, ha ganado un 18% más, seguido por BBVA que ha tenido un beneficio de 6.420 millones euros, un 38% superior y CaixaBank de 3.145 millones, lo que supone un incremento del 33%.

Asimismo, Banco Sabadell ha mejorado su resultado en un 62%, hasta los 859 millones de euros, Bankinter casi un 30%, hasta los 560 millones euros y Unicaja Banco un 88% al obtener un beneficio de 260 millones de euros el año pasado. Desde CCOO, el sindicato mayoritario del sector, apuntan a que esta mejora de los resultados de la gran banca española ha estado marcada por dos factores, la reducción de costes de personal y la subida de los tipos de interés.

Los procesos de reestructuración de plantilla, vía EREs, han dejado al sector con 5.000 empleados y 1.300 oficinas menos en el último año, lo que ha beneficiado al margen bruto de estas entidades. Pero en paralelo, las subidas de tipos de interés aprobadas por el Banco Central Europeo como medida de política monetaria restrictiva para controlar la inflación ha impulsado el margen financiero en dos vías, trasladando las subidas de tipos a las hipotecas y préstamos, y resistiéndose a remunerar el ahorro.

Y en este contexto, CCOO entiende que está justificado pedir la apertura de los tres convenios colectivos vigentes (el de banca, el de las excajas de ahorro y las cajas rurales) para negociar incrementos salariales adicionales a los pactados. Desde UGT recuerdan que en las negociaciones que han llevado a cabo durante los últimos meses con las patronales ya se pactó que a partir de febrero se retomarían las conversaciones sobre un nuevo incremento salarial y la apertura anticipada del convenio colectivo. Desde ambos sindicatos esperarán a finales de febrero o principios de marzo para abrir un nuevo observatorio sectorial y proponerlo.