Coca-Cola Europacific Partners (CCEP), el primer grupo embotellador de esta marca en el mundo, ha incrementado el sueldo en los miembros de su consejo de administración, incluido el de la catalana Sol Daurella, que el año pasado cobró 631.000 libras (753.416,8 euros) como presidenta, un 1,9% más que en el ejercicio anterior, según el informe de retribuciones que han hecho público este viernes.
Los importes se calculan en libres esterlinas porque la sede de CCEP se encuentra en Londres. Evidentemente, el grueso de los ingresos de la presidenta del consejo de administración no proviene de la remuneración establecida para este cargo sino de los dividendos que le proporciona su paquete de acciones.
Las diversas ramas de la familia Daurella recibieron 161 millones de euros en dividendos de Olive Partners, al primer accionista de CCEP con un 36,18% del capital, con cargo en el ejercicio de 2023. Todavía no se han detallado los de 2024.
Respecto a los sueldos de los otros miembros del consejo, el consejero delegado, Damian Gammell, cobró el año pasado 13,9 millones de libras (16,5 millones de euros), un 6% más, que convierten al primer ejecutivo en el mejor pagado de la compañía. Además, recibirá un 2% adicional a partir del próximo mayo.
Y el español Manuel Arroyo cobró 121.000 libras (144,452 euros) como consejero, que suponen un 4,3% más respeto un año antes. Pero Manuel Arroyo también ejerce de vicepresidente ejecutivo y director general de marketing del grupo.
Se preparan cambios en este consejo de cara a la reunión convocada para el 22 de mayo. Ya se ha anunciado que Dagmar Kollmann (Viena, 1964) dejará de ser consejera. Es miembro del comité de auditoría y, hasta ahora, ha encabezado el comité de transacciones. Sol Daurella, en calidad de presidenta de CCEP, agradeció a Kollmann su contribución a la empresa y le deseó "lo mejor para el futuro". En su puesto entrará Robert Appleby como consejero independiente,
CCEP anunció en febrero pasado que en 2024 redujo el beneficio un 13,5%, hasta los 1.444 millones de euros, pero eso no preocupa a sus accionistas: recibirán un dividendo récord (1,97 euros por título) y se podrán acoger a un programa de recompra de acciones de hasta 1.000 millones.
Damian Gammell aseguró en febrero pasado que la compañía está bien "situada" para el ejercicio 2025 y que cuenta con la estrategia "adecuada" para alcanzar sus objetivos de crecimiento. "Nuestras previsiones para este año, junto con la reanudación de los programas de recompra de acciones, demuestran la fortaleza del negocio y nuestra capacidad para seguir aportando valor a los accionistas, según indicó.
La compañía consiguió en el último trimestre de 2024 unos ingresos de 777 millones de euros solo en su mercado de Iberia (España, Portugal y Andorra), lo que supone un crecimiento del 2,9%, mientras que en el conjunto del año pasado se elevaron a 3.398 millones de euros, un 2,2% más.