Targobank se prepara para ponerse en manos de Abanca. La filial de Credit Mutuel en España, que ya ha anunciado que está negociando en exclusiva su venta a la entidad gallega, ha engordado su balance en más de un 20% en apenas nueve meses y también ha reducido sus pérdidas en un 75% en el mismo periodo. El volumen de préstamos concedidos este ejercicio, que ha crecido en unos 500 millones, ha empujado las cuentas del banco.

Así se pone de relieve en los resultados del tercer trimestre que Targobank ha presentado al Banco de España, donde refleja unas pérdidas de 4,2 millones hasta septiembre frente a los 16,8 millones de números rojos que afloró en el conjunto de 2021, lo que supone una reducción del 75% desde diciembre. Este dato es significativo, pues la entidad lleva acumulando pérdidas desde hace varios años (42,5 millones en 2020; 37,6 millones en 2019; 19,6 millones en 2018…) y ahora asegura acercarse al break even.

El propio Targobank anunció a sus empleados en septiembre que pretender alcanzar el punto de equilibrio en 2023, lo hizo en una misiva que envió a sus empleados cuando trascendió en prensa que el propio Banco de España podría estar impulsando su venta por sus resultados. La filial de Credit Mutuel negó expresamente a sus trabajadores que el supervisor hubiera incitado esta operación porque tuviera dudas sobre su gestión. En la carta, la entidad declinaba que el director general, François Martín, o la presidenta de la filial hispana, Laurent Didier Metral, hubieran llevado a cabo una mala gestión y por ello, llevaran años cosechando pérdidas

Al respecto, destacaban que Targobank presenta un balance “limpio y equilibrado”, que cada vez está más cercano al resultado positivo. Y aquí adelantaron que sus previsiones para este año eran perder otros 7,9 millones de euros, pero que finalmente el nivel de pérdidas acumuladas era inferior y el resultado mejoraría en más de 10 millones respecto al año pasado, como ya se ha visto en las cuentas del tercer trimestre.

También en estas cuentas se refleja una mejora significativa de su balance. Los activos totales de Targobank, que eran de 3.516 millones de euros a finales del año pasado, crecen un 21% y alcanzan los 4.247 millones en septiembre, siendo la partida que más aumenta en la cuenta de resultados la de los préstamos, que se han disparado. El banco tiene concedidos préstamos (principalmente a clientes, más que a entidades) por valor de 3.369 millones, lo que representa el 80% del total de sus activos. En diciembre eran 2.846 millones, por lo que han subido en un 18% desde entonces. Así, Abanca señalaba hace unos días en un comunicado que con la integración de Targobank elevará el volumen su negocio en unos 5.500 millones, cifra en la que cerrará el ejercicio.

La entidad gallega, dirigida por Juan Carlos Escotet, pretende así alcanzar un volumen de negocio de 112.544 millones de euros cuando integre a Targobank, que será su séptima adquisición en ocho años. Abanca hizo una oferta a la filial española de Credit Mutuel en septiembre, pero no ha sido hasta diciembre cuando las entidades han confirmado que la compraventa está a punto de materializarse. “La compra consolidaría la presencia de Abanca en toda la Península Ibérica, al reforzar de forma significativa nuestra actividad en el arco mediterráneo, siguiendo nuestro Plan Estratégico”, destacaba el presidente de la entidad en un comunicado hace unos días. Targobank, que presta servicio a cerca de 150.000 clientes, está presente principalmente en Cataluña, Madrid, Andalucía y Baleares. Y es aquí donde ahora crecerá la entidad gallega.

Abanca se quedará el negocio puramente bancario de Targobank, centrado en la financiación a familias y empresas, excluyendo así de la compra del negocio asegurador que Credit Mutuel también tiene en España. Dicho negocio, Groupe Assurances du Crédit Mutuel España (GACM), cuyas principales marcas son Agrupació AMCI, GACM Seguros Generales y Atlantis Vida, también se venderá, pero en este caso, a la aseguradora francesa AXA por un precio de 310 millones de euros.

Tras cerrarse estas dos operaciones, previsiblemente en el primer trimestre de 2023, Credit Mutuel abandonará por completo el mercado español, donde lleva doce años. Targobank nació en 2010 fruto de una joint venture entre el Banco Popular y la entidad gala para especializarse en el negocio minorista y la banca corporativa; El Popular acabó traspasando su 48,98% del capital a Credit Mutuel en junio de 2017 por 65 millones, cuando su cotización en Bolsa seguía en caída libre, antes de su resolución por parte de las Autoridades Bancarias Europeas (EBA, por sus siglas en inglés) y su posterior venta al Banco Santander por un euro.

Desde entonces y hasta ahora, la entidad francesa ha operado en solitario en nuestro país, una aventura a la que pondrá fin cuando se integre dentro de la gallega a lo largo de 2023, y con ella, sus más de 500 empleados y 51 oficinas.