La empresa automovilística india Tata Motors, propietaria de Jaguar Land Rover, ha cerrado el acuerdo con Reino Unido para construir en la localidad inglesa de Somerset la gigafactoría de baterías para coches eléctricos que España quería implementar en Zuera (Zaragoza), y que supondrá unos 9.000 empleos. Según han informado varios medios del país británico, entre ellos Telegrahp o la BBC, la inversión definitiva, de miles de millones de euros, se dará a conocer este mismo miércoles.

Además, según apuntan estos medios, el Gobierno de Rishi Sunak habría ofrecido ayudas de hasta 500 millones de libras a Tata Motors para asegurar la planta, aunque desde Jaguar Land Rover negaron dicho ofrecimiento de financiación. En su momento, el Gobierno español, por medio de la anterior ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, había mantenido varias reuniones con la compañía india para tratar la posible inversión en el territorio nacional de la firma propietaria de Jaguar Land Rover.

Interés por España

De hecho, fue a principios de año cuando Tata Motors habló públicamente de sus intenciones. El director financiero del grupo, Pathamadai Balaji, confirmó públicamente que el grupo quería levantar una gran fábrica de baterías en Europa para asegurarse el suministro a la cadena de valor. Durante la celebración del salón del automóvil India Auto Expo, celebrado en Delhi, Balaji también apuntó que las celdas de baterías fabricadas en Europa se venderán a otras marcas automovilísticas, más allá de Tata Motors y Jaguar Land Rover.

De hecho, el pasado 15 de julio la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, reiteró desde Zaragoza el apoyo del Gobierno para que Aragón se convirtiera en la sede de la nueva fábrica de baterías de vehículos eléctricos. La responsable de Economía relató que, en una reunión con el presidente del grupo Tata, apostó “porque Aragón sea la sede de su próxima fábrica de baterías”, pues a su juicio se trata de un territorio “que tiene todas las ventajas” para convertirse en la sede de esta factoría.

Segunda fase del PERTE

Paralelamente, Calviño recordó que en los próximos días llegará la convocatoria de la segunda fase del PERTE del vehículo eléctrico y conectado, cuyo importe asciende a 850 millones de euros y que estará destinada a la instalación y el despliegue de fábricas de baterías. El Ministerio de Industria publicó el pasado 7 de julio las bases para la concesión de ayudas a proyectos para el impulso a la cadena de valor del vehículo eléctrico y conectado y la convocatoria a la que se refirió Calviño, cuyas ayudas se pueden solicitar desde el 17 de julio hasta el 15 de septiembre. Sobre la nueva convocatoria del PERTE, la ministra explicó que “se tendrán que presentar los distintos proyectos para la instalación y construcción de fábricas de baterías” y, puesto que se trata de una convocatoria abierta, añadió que no se puede prejuzgar "cuáles serán los proyectos que consigan esa financiación”.

Además, Calviño señaló que el diálogo que mantiene el Ministerio de Industria con los grandes ensambladores en España es "constante” y que desde el Ejecutivo “siempre” apoyan “la instalación de inversiones”.