Telefónica investiga una posible filtración de datos de clientes. Aunque todavía no han confirmado la veracidad y el alcance de esta acción, podría afectar a unos 120.000 clientes de la compañía, de los que supuestamente se habrían obtenido nombres, apellidos y números telefónicos, pero no datos bancarios. Esta filtración se habría producido en marzo pasado.
Las grandes compañías no se libran de los ciberataques. Hace unos días, Banco Santander comunicó un “acceso no autorizado a un servidor externo que contenía datos de clientes, aunque tampoco eran sensibles.
Desde Telefónica se apunta que están investigando la veracidad de esta información, aparecida este martes en un foro de Internet. El portal HackManac, especializado en ciberseguridad, ha afirmado a través de X (anteriormente, Twitter) que se ha detectado una potencial filtración de datos en Telefónica en un foro de hacking (es decir, de acceso ilegal a sistemas informáticos) y que hay 120.000 usuarios presuntamente afectados.
Según la publicación, en marzo pasado, Telefónica habría sufrido una violación de datos que provocó el robo de una base de datos que contenía 2.676.108 registros. Entre estos, se encuentra información como direcciones físicas, nombres completos, direcciones de correo electrónico y números de teléfono de aproximadamente 120.000 clientes y empleados.
Recomendaciones
HackManc apunta que aún no se han confirmado ni desmentido estas informaciones aunque recomendó a los usuarios que tengan cuidado con posibles intentos de phishing, o sea, que tengan “cuidado ante posibles intentos de suplantación de identidad”. De momento, Telefónica todavía no ha confirmado si estas informaciones son veraces y está trabajando en su esclarecimiento.
Anteriormente, Telefónica había sufrido ataques de este tipo. En 2022, confirmó un ciberataque a un router que afectó a un número indeterminado de clientes de Movistar y O2. Y en 2017 sufrió otro ataque que impidió el acceso a determinadas partes de su sistema interno.
El Santander sufrió un ataque informático hace dos semanas que dejó expuestos los datos de millones de clientes y empleados en España, Chile y Uruguay. Tras monitorizar la situación, el banco informó "directamente" a todos los afectados, aunque también puso en conocimiento al mercado de esta situación mediante un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En ese momento, el Santander "lamentó" la situación y aseguró que había implementado inmediatamente “medidas para gestionar el incidente, como el bloqueo del acceso a la base de datos y un refuerzo de la prevención contra el fraude para proteger a los clientes". Asimismo, señaló que las operaciones y sistemas no estaban afectados y que los clientes podían seguir operando con seguridad.