Telefónica superó los 30.000 millones de euros de ingresos en los nueve primeros meses del año, un hito que, sin embargo, no fue acompañado de una mejora del beneficio a causa del deterioro del negocio en Reino Unido. La teleco que preside José María Álvarez Pallete presentó este miércoles sus resultados de enero a septiembre coincidiendo también con su plan estratégico, que prevé una generación de caja de 5.000 millones y un dividendo de 0,30 euros por acción.

La multinacional española cerró el tercer trimestre con un incremento de los ingresos del 2,4%, hasta los 30.499 millones de euros, mientras que el OIBDA (resultado operativo) fue de 9.595 millones, en línea con los nueve primeros meses de 2022. El beneficio fue de 1.262 millones, un 13% menos a causa de una aportación negativa de Virgin Media O2, su filial en Reino Unido fruto de la fusión con Virgin, que restó 233 millones al resultado de Telefónica mientras el año pasado sumó 481 millones.

Específicamente en el tercer trimestre, los resultados de Telefónica muestran la evolución contraria: entre julio y septiembre, la compañía estancó sus ingresos (10.321 millones, un 0,2% menos) pero mejoró los beneficios un 9,3%,  hasta los 502 millones de euros. La teleco destacó que el crecimiento orgánico tanto de ingresos como de OIBDA está siendo “rentable y sostenible”.

España es la primera fuente de ingresos de Telefónica y sube un 0,5%, mientras que en Alemania sube un 4,8%, crecimiento que explica el movimiento de la compañía, anunciado este martes, para controlar el 100% de la filial en el país. En Brasil, el segundo mercado de la multinacional, el crecimiento fue del 9,3%. En Hispanoamérica el negocio retrocedió un 4,4%.