Los trabajadores de Iryo irán a huelga en plena Navidad, una de las épocas con mayor movimiento en España. El sindicato CGT la ha convocado seis días, en concreto el 23, 24, 25, 30, 31 de diciembre y 1 de enero. La noticia no ha sido bien recibida por el operador de alta velocidad, que califica esta decisión como "desafortunada y desproporcionada" porque las reivindicaciones que defiende la plantilla y por las que han decidido ir a huelga "todavía están sobre la mesa de negociación".

Así lo pone de relieve Iryo en un comunicado emitido este martes, donde indica que "respeta el derecho de huelga y la decisión del sindicato" pero considera que la negociación, el diálogo y el acuerdo "son el mejor camino para resolver diferencias y construir sólidas bases". Por ello, la compañía reitera su disposición a seguir acercando posiciones en las mesas de negociación para evitar la huelga.

Por otra parte, la empresa que dirige Simone Gorini señala que esta convocatoria de huelga excluye al colectivo de maquinistas con los que el operador ha firmado ya un Convenio Franja. En cualquier caso, Iryo explica que "a la espera de conocer los servicios mínimos que adjudique el Ministerio de Transportes", ya ha puesto en marcha planes de contingencia "para minimizar cualquier impacto y poder seguir ofreciendo a sus clientes una experiencia de viaje segura, cómoda y eficiente".

En el comunicado, Iryo recuerda que solo llevan 24 meses operando en España y destaca que esta convocatoria de huelga "irrumpe en mitad de la negociación del Convenio Colectivo del resto de la plantilla, donde solo el 29% de los trabajadores tiene, como máximo, una antigüedad inferior a dos años". Asimismo, el operador señala que el pasado 28 de junio se constituyó la Comisión negociadora del Convenio General de iryo, que ha celebrado hasta ahora seis reuniones y ya cuenta con otras calendarizadas.

"A pesar de ello, uno de los sindicatos en solitario, CGT, ha decidido mantener dicha convocatoria". En las actas de las reuniones mantenidas hasta el momento constan la voluntad de diálogo continuo y de negociación por parte de la empresa, así como la disposición de escuchar las inquietudes de los empleados, buscando soluciones conjuntas y beneficiosas para todos, continua Iryo. 

Por esta razón, la compañía apela "a la responsabilidad del sindicato ante esta convocatoria de huelga que considera desafortunada y desproporcionada", ya que las reivindicaciones que defienden todavía están sobre la mesa de negociación y lamenta la incertidumbre que esta convocatoria pueda ocasionar a sus clientes.

La huelga iba a ser en el puente

En el comunicado, CGT explica que su intención era convocar huelga para los días 5 y 6 de diciembre, coincidiendo con el Puente de la Constitución. Pero se requiere un tiempo mínimo de preaviso en el SIMA, de diez días, que no cumplían. De manera que empezará a partir del día 23, cuando empiezan los desplazamientos en tren para las vacaciones de Navidad. 

En cualquier caso, el sindicato acudirá a las reuniones convocadas por Iryo para seguir negociando el convenio los días 13 y 20 de diciembre. Y en el mejor de los casos, podrían cancelarse estas huelgas, que de momento no se sabe a cuantas personas afectará.