La constructora ACS, a través de su filial Turner, y en alianza con las firmas DPR Construction y M. A. Mortenson, construirá un campus de centros de datos de Meta en Luisiana (EE.UU), que representará una inversión de más de 9.514 millones de euros en el estado (10.000 millones de dólares). La región de Richland Parish será la elegida para albergarlo por su acceso a las infraestructuras, tener una red fiable así como por contar con un clima favorable a las empresas, y contará con cuatro millones de pies cuadrados que será el mayor centro de datos de Meta hasta la fecha, según ha señalado Turner en un comunicado.
Por ello, se espera que este campus desempeñe un papel vital en la aceleración del progreso de la Inteligencia Artificial (IA) del grupo Meta, matriz de Facebook, Instagram, WhatsApp, Messenger Live y Threads. Una vez completado, el data center de Richland Parish representará una inversión de más de 10.000 millones de dólares en Luisiana y mantendrá más de 500 puestos de trabajo operativos. Meta también está invirtiendo más de 200 millones de dólares en mejoras de las infraestructuras locales.
Como parte de este contrato, Turner, DPR Construction y M. A. Mortenson construirán el campus y prevén que más de 5.000 trabajadores estén trabajando en el momento de máxima actividad. Al respecto, han indicado que harán un esfuerzo conjunto para obtener mano de obra y materiales locales. Junto con su socio energético, Entergy, Meta está añadiendo a la red suficiente energía limpia y renovable para cubrir el 100% del consumo eléctrico del campus, por ello ha trabajado con Entergy para planificar sus necesidades energéticas y aportará al menos 1.500 megavatios de nueva energía renovable a la red.
Meta y Entergy pretenden invertir en múltiples fuentes de energía limpia, incluida la nuclear. También se dará prioridad a la gestión del agua y trabajará para garantizar que sus centros de datos funcionen de forma eficiente. En consecuencia, se prevé que este campus consuma menos agua que el actual, con el objetivo global de ser agua positiva en 2030, lo que significa que regenerará más agua de la que consuma.
Este contrato refuerza la apuesta del grupo ACS por los centros de datos, para el que planea la creación de una filial y ya tiene identificados suelos para lo que considera una de las áreas de más rápido crecimiento es el mercado gracias a la computación en la nube y la inteligencia artificial.