La farmacéutica familiar Uriach, especializada en productos naturales para la salud y el bienestar (natural consumer healthcare), está sondeando el mercado francés para cerrar la compra de una empresa gala que complemente su gama de productos y fortalecer su peso en el mercado vecino. Hoy por hoy, la firma catalana está testeando con dos o tres compañías de una cierta dimensión y con marca, con un negocio que bordea entre los 70 y los 100 millones de euros, según ha anunciado su consejero delegado, Oriol Segarra. Para financiar esta operación, Uriach busca a un inversor financiero al cual, la familia propietaria, estaría dispuesta a ceder entre un 20% y un 30% del capital.
El mercado francés es una pieza clave "que le falta a Uriach para completar su plataforma de expansión en Europa" donde, después de comprar siete compañías en los últimos ocho años, ya tiene una posición relevante en Italia y Alemania. En el caso de Francia, "queremos cerrar la operación a finales de este año o inicios de 2024, porque estamos haciendo una búsqueda intensa que acompañaremos, probablemente, con un fondo de inversión de grande o mediana dimensión o con un family office institucional tal vez francés o alemán, ha explicado Segarra, durante la presentación de los resultados anuales de 2022. En España, su mercado más maduro, Uriach tiene marcas muy consolidadas como Aquilea, Fisiocrem, EnRelax, Biodramina, Aerored, Fave de Fuca, Halibut, Ems o Depuralina.
Uriach cerró la última adquisición en 2022 asumiendo la totalidad de la empresa rumana Medimow, dedicada al desarrollo de complementos alimentarios para el dolor, ginecología y pediatría, con la cual Uriach tenía una joint venture desde 2018. Al mismo tiempo se completó la adquisición de la marca HuPaVir, un complemento para combatir infecciones y lesiones provocadas por el virus del papiloma humano (VPH). La marca HuPaVir refuerza una de las líneas estratégicas de negocio dentro del área Consumer Healthcare, llamada Uriach Medical, que se encarga de promover, distribuir y comercializar complementos alimentarios a mediante una red comercial propia especializada en visita médica. De esta manera, Uriach tiene como objetivo replicar la estrategia comercial de Laborest en España, después de su adquisición en 2015, convirtiéndose así en un referente de la visita médica con complementos alimentarios.
En menos de 10 años, Uriach ha conseguido tener presencia directa en 7 países europeos: España; Italia (comprando Laborest en 2015, y el año 2019 A.R. Fitofarma y Progine); Portugal (adquisición de Theralab en 2018); Alemania, Austria y Suiza (a través de la compra de Sidroga el año 2021); y Rumania (compra Medimow). Además, mantiene un acuerdo de joint venture para la comercialización de sus marcas (Aquilea, Fisiocrem, Laborest...) en Grecia. Por lo cual, Francia sigue siendo su asignatura pendiente.
La farmacéutica catalana centenaria -este año cumple 185 años- reconoce que "necesitamos demasiado crítica para conseguir una cifra de negocio de entre 450 y 500 millones que nos posicionaría respecto de nuestros competidores franceses, alemanes e italianos", ha dicho Segarra y ha mencionado las marcas Havea (Francia), Aboca (Alemania) y Arkopharma (Italia). Uriach quiere estar en el 'top' cinco de este segmento de productos sin receta médica con una demanda creciente en Europa.
Con la expansión que ha hecho los dos últimos años, Uriach ha facturado 272 millones de euros en 2022, con un aumento del 15,7%, en línea "con el crecimiento sostenido del 15% que hemos registrado en los últimos 10 años". En este camino, sin embargo, la familia Uriach decidió dar un giro de 180 grados a la compañía y se desprendió de sus activos fabriles cuando, en septiembre de 2021, vendió a Noucor la división de ingredientes para medicamentos -nuevas moléculas, genéricos y fabricación en terceros, el conocido como B2B- que fabricaba en la planta química (Urquima) de Sant Fost de Campsentelles, y en la planta farmacéutica de Palau-Solità i Plegamans, destinada al negocio para terceros. Segarra ha explicado que "en solo dos años desde aquellas desinversiones, la nueva Uriach ha conseguido llenar el hueco de aquellos negocios cifrados en unos 300 millones de euros, igualando el volumen de facturación, ya que cerraremos 2023 con 310 millones de euros y un resultado operativo (ebitda) de 45 millones".
Segarra se ha referido a 2022 como "un año complicado", en el que la coyuntura geopolítica y tabla pandémica afectó a la evolución de las ventas. Algunos mercados europeos todavía sufrían los efectos de la Covid-19, el incremento de costes por la presión inflacionista se dejó notar y la guerra en Ucrania afectó a la cadena de suministros de materias primas "que solo se pueden obtener en unos países muy concretos", ha manifestado. Tanto es así que ha asegurado que se perdieron entre 4 y 5 millones de euros en ventas aseguradas.
Con respecto a la innovación, Uriach tiene centros de I+D en España, Italia y Alemania, donde también a raíz de la compra de Sidroga tiene dos fábricas de producción de algunos productos; el resto se subcontrata en industrias de España, Alemania e Italia. "El crecimiento orgánico con nuevos productos también es esencial para Uriach", porque cada vez más personas entienden que la salud no es solo tomar algún medicamento recetado por el médico cuando enfermas, sino que se basa en un esfuerzo holístico en el cual influyen la alimentación, la actividad física, el descanso y muchos otros hábitos", ha dicho Segarra.