El consejo delegado de Volkswagen (VW), Thomas Schäfer, en el salón del automóvil de Múnich, se ha referido al devenir de la marca de automóviles Seat y ha reiterado que el futuro de Seat es Cupra, reafirmando así los intereses del grupo alemán de reorientar la marca de Martorell. Schäfer ha mencionado que hay una oportunidad para Seat de ofrecer "nuevas formas de movilidad" que los jóvenes necesitan, como el sharing, las suscripciones y la micromovilidad, donde la marca ya está presente en el mercado con SEAT MÓ, pero no se ha referido a nuevos lanzamientos de modelos de automóvil. Las declaraciones del consejero delegado suscriben la estrategia que el CEO de Seat y Cupra, Wayne Griffiths, ha definido para ambas marcas y que lleva meses publicitando y reconociendo que, actualmente, es Cupra la marca que aporta las más altas rentabilidades al negocio de Martorell y que, probablemente, el futuro de Seat como marca está en otros segmentos por desarrollar.
Con el posicionamiento de Cupra, marca deportiva de Seat nacida en 2018, en el segmento más premium y arrojando para la compañía márgenes de negocio más sustanciales que la misma Seat, el grupo alemán tiene el foco puesto en el lanzamiento de los nuevos modelos Cupra, como el del concept car del Cupra DarkRebel, presentado en Múnich. Se trata de un modelo deportivo completamente eléctrico. La deportiva es una de las marcas de automóviles de más rápido crecimiento en Europa, según VW. En esta línea, Wayne Griffiths ha insistido en que Seat debe seguir incrementando el beneficio, después de que cerrara el primer semestre del año con un beneficio operativo de 371 millones de euros, frente a las pérdidas de 97 millones de un año antes, mientras que las ventas aumentaron un 34,5% hasta 317.000 unidades. Griffiths ha marcado además como condición un incremento de la rentabilidad de la compañía, que ahora es del 5%.
Mientras que para Seat la intención es actualizar el Seat Ibiza, Arona y León para seguir ofreciendo coches híbridos enchufables y de bajo consumo "hasta el final de la era de la combustión", según fuentes de la compañía, que no ponen fecha. Pero, más allá, lo cierto es que a día de hoy Seat no tiene modelos eléctricos y la Unión Europea insiste en la desaparición de los vehículos de combustión, ahora en 2030. Aun así, "Seat es más fuerte que nunca", aseguran desde Martorell. En paralelo, con el posicionamiento de la marca Seat en la movilidad eléctrica urbana, la compañía potenciará los modelos y servicios que ofrece con motocicletas y patinetes eléctricos. El responsable de ambas marcas ya advirtió durante la presentación de los resultados anuales de la compañía de Martorell que los procesos de electrificación no irían parejos, a pesar de que está invirtiendo en la transformación de la factoría.
En cualquier caso, el grupo valora la actual posición de la marca Seat, según el consejero delegado de Volkswagen y responsable del grupo de marcas de volumen (Volkswagen, Škoda, Seat, Cupra y Volkswagen Vehículos Comerciales), Thomas Schäfer. La compañía destaca que tiene una cartera de pedidos muy elevada y que cuenta actualmente con la mejor gama de producto de su historia, lo que se traduce en importantes ventas: en lo que va de año han crecido un 18%, alcanzando los 199.000 coches vendidos. Durante el primer semestre de este año, el modelo más vendido de la compañía ha continuado siendo el Cupra Formentor, con 60.900 unidades (+21,1%), seguido del Seat Arona, con 53.600 unidades (+23%) y del Seat Ibiza, con 43.800 entregas (+35,3%).
Cupra baraja entrar en los Estados Unidos
En el Salón Internacional del Automóvil de Munich, Griffiths también ha confirmado el interés del grupo por introducir Cupra en los Estados Unidos. Los planes iniciales serían empezar las operaciones después del 2025 y pasarían por ensamblar vehículos en alguna de las tres plantas que el Grupo Volkswagen, al que pertenece Seat, tiene en la región (en EEUU y México). Los modelos que se fabricarían serían eléctricos grandes, adaptados a los gustos del consumidor americano, y el objetivo es focalizarse en las grandes ciudades (como Nueva York y Washington) y en estados como California y Florida. "Todo va por el buen camino, pero la inversión es lo que más cuesta. Se trataría de una inversión muy alta y para poder hacerlo hay que ganar dinero y no sólo durante un semestre", ha dicho, en declaraciones recogidas por Efe.