El fabricante de proteína alternativa Zyrcular, perteneciente a la familia Vall Esquerda propietaria del grupo Vall Companys, acumula un crecimiento sostenido del 20% en el negocio que inició en el 2020, con una planta de producción en Seva (Barcelona), que lo ha llevado a elaborar 200.000 kilogramos de producto, básicamente para terceras marcas estatales e internacionales del sector. El grupo dispone también de la marca propia Amara que está posicionando en cadenas de alimentación como El Corte Inglés o La Sirena. En conjunto, sirve al canal retail y al food service y trabaja para la industria, con todo el proceso, desde el diseño del producto, a la fabricación y la distribución.
La compañía va cogiendo volumen porque el mercado la ve "como una propuesta industrial seria por la proteína alternativa a Catalunya y como un socio que aporta soluciones con innovación y tecnología a sus necesidades dentro de este ecosistema", comenta al consejero delegado de Zyrcular, Santi Aliaga. Por eso, el principal negocio de Zyrcular es producir para terceras marcas, con el foco muy dirigido al food service (restauración, hostelería, cadenas de alimentación), "porque es lo que más tira del mercado", aseguran a la compañía.
En este segmento también está posicionando como distribuidor de marcas de proteína alternativa como la norteamericana Beyond Meat, la inglesa Quorn, la norteamericana Current Foods con pescado y atún, Next con proteína de soja, Pink Albatros (helados) y Violife (quesos). En el canal food service está donde el consumidor encuentra la mejor manera de probar los productos y de tener una muy buena experiencia gastronómica y, por lo tanto, "el objetivo son poder servir todos los platos que compondrían un menú de proteína alternativa y con una gama mucho más amplia". Lo que las marcas detectan es que "el consumidor se decanta más por el street food; una comida más informal, más consumida por los jóvenes," y por aquí van las innovaciones de Zyrcular (gyozas, baos, buñuelos). El chef de Zyrcular, Jordi Moré, que esta semana está a Alimentaría, es el encargado de todos los aspectos nutricionales y dirige un equipo de prescripción para los clientes que lo requieren y para las escuelas de restauración "porque los futuros cocineros tienen que conocer la alimentación pland-based".
Con el volumen conseguido en solo tres años, Zyrcular cerró en el 2023 con una facturación de 2,5 millones de euros, que prevé aumentar en otro 20% este año, para alcanzar los 3 millones en ventas. "La facturación nos importa, pero no nos preocupa. Lo que queremos es arraigar a nuestros clientes y, entre todos, dar a conocer la proteína alternativa y que el consumidor valore que tiene sentido", manifiesta Aliaga y recalca que "el mismo mercado está descartando y relegando aquellas marcas oportunistas que no tienen calidad ni proyecto de futuro dentro del sector". Por eso, para la marca del grupo Vall Companys es muy importante "cocrear con las marcas para innovar en productos".
Este es uno de los ejes de crecimiento, pero no lo único. Poco a poco, la marca quiere completar la producción de análogos cárnicos, hasta ahora principal, para identificar y producir más análogos y proteínas vegetales. Un aspecto que también se mejorará acompañado de las marcas del sector con que ya trabaja y con la incorporación de nuevas "de calidad", de las que también quiere ser distribuidor, para "completar la oferta de productos".
Otras verticales de proteína
Desde Zyrcular, su consejero delegado insiste en la predisposición de la compañía para ser un eslabón fundamental para crear un ecosistema de proteína alternativa a Catalunya, que pueda abarcar toda la cadena de valor de las proteínas vegetales. Un proyecto que tiene entre manos a la Generalitat que quiere convertir Lleida en un hub de la alimentación y que impulsa una planta de escalado preindustrial para avanzar en el desarrollo de la proteína alternativa que se construirá, previsiblemente, en los terrenos de la planta Alcarrás Bioproductors SAT. También se impulsa desde el IRTA el Centro de Innovación en Proteínas Alternativas (CiPA), centrado en la investigación y la innovación sobre ingredientes y productos alimenticios en el ámbito específico de las proteínas alternativas, que combine investigación de laboratorio -que se hará en espacios de investigación ya existentes como el de Monell (Girona)- y plantas pilote y que se quiere convertir en un centro de referencia del sur de Europa. El IRTA colabora también en el proyecto europeo Giant Leaps se encargará de desarrollar alimentos prototipo innovadores sustitutos de lácticos y cárnicos. No obstante, Zyrcular no se quiere quedar en los sustitutivos de carne con vegetales como soja, legumbres o setas, sino también para iniciarnos con algas, insectos, fermentación o carne celular.
La marca propia Amara
Zyrcular no deja de innovar también en alternativas cárnicas plant-based bajo su marca propia Amara. "Es un importante vehículo para testear el mercado y el consumidor tanto en el canal de la distribución como en Horeca", comenta el consejero delegado, Santi Aliaga. Admite que "no es una marca para entrar en competencia con las grandes marcas -cómo pueden ser Garden Gourmet (Nestlé), The Vegetarian Butcher (Unilever), Better Balance (Sigma) o Heura Foods-, porque no es el esencial que dio pie a la creación de Zyrcular; una decisión que se tomó en el seno de la empresa familiar Vall Companys entre 2018 y 2019.