Los hombres ganan un 35% más que las mujeres en el sector alimentario. Es la actividad económica más afectada por una brecha salarial que atraviesa prácticamente a todos los sectores analizados por un informe de Adecco Learning & Consulting, que ha estudiado los planes de Igualdad de más de 300 empresas españolas con un alcance de 95.000 puestos de trabajo. La mitad de las empresas, además, no cuentan con un protocolo de actuación frente al acoso sexual o por razón de género, a pesar de que es obligatorio tenerlo.
La diferencia media de lo que cobran los hombres por encima de las mujeres es de un 11,8%, con un salario medio de 31.259 euros anuales las mujeres y 36.832 los hombres de promedio en las empresas analizadas. Esta diferencia se dispara en la alimentación, que engloba la comercialización y la distribución, donde los hombres cobran un 34,91% más que las mujeres y un 60% de las empresas consultadas reflejan brechas superiores al 35%.
Cuatro sectores más muestran brechas salariales por encima del 20% en contra de las mujeres: las industrias químicas (23,25%), las actividades científicas y técnicas (22,28%), las tecnologías de la información (22,13%), la administración y finanzas (21,24%). El resto de sectores muestran desigualdad salarial favorable a los hombres entre el 4 y el 16,50%, con dos excepciones. En la agricultura y las administraciones públicas son las mujeres quienes ganan un mejor sueldo, según el muestrario analizado por Adecco. En el sector agrícola, las mujeres ganan un 24% más y en las administraciones públicas, un 14,50%.
Los motivos apuntados por el informe para esta brecha son la menor ocupación por parte de las mujeres en puestos directivos, el mayor porcentaje de mujeres en sectores peor remunerados, su alta representación en puestos a tiempo parcial o la maternidad. Reforzando el primero de los motivos, solo un 7,2% de las mujeres entrevistadas por Adecco ocupan puestos de alta dirección, en contraste con el 15,6% de los hombres encuestados. Los hombres, además, se promocionan un 48% más que las mujeres.
De cara a 2026, las empresas que coticen en Bolsa y cuenten con más de 250 trabajadores estarán obligadas a tener, por normativa europea, un 40% de cargos directivos ocupados por mujeres, según una ley aprobada el año pasado por el Parlamento Europeo. Un estudio del European Institute for Gender Equality publicado en abril del año pasado detallaba que solo tres de cada 10 directivos eran mujeres en toda Europa. España, con un 32,6% de mujeres, ocupa el décimo lugar del ránking del estudio con respecto a igualdad.
Entre las empresas analizadas por Adecco, tan solo un 50% cuentan con un protocolo de actuación contra el acoso sexual o por razón de sexo, aunque es obligatorio tenerlo. No se trata de una ley reciente, sino de la ley de Igualdad 3/2007.
Desde el pasado mes de marzo, además, las empresas están obligadas a implementar un plan de igualdad, pero la mayoría, las últimas cifras hablan del 70%, no la cumplen. El Gobierno español, para que se cumpla, decidió recientemente que no aplicará las nuevas bonificaciones de contratación recientemente aprobadas para jóvenes, mayores y parados de larga duración a las empresas que no cuenten con un plan de igualdad.
Tareas no remuneradas
Las cifras de la brecha salarial mostradas por los datos oficiales de la Agencia Tributaria a finales del año pasado rebajan la brecha a un 8,4%, tres puntos menos de lo mostrado por el estudio de Adecco, entre los 26.913 de media que ganan las mujeres y los 29.367 de los hombres. La desigualdad se dispara además a partir de los 36 años y en cualquier caso está por debajo de la brecha de género de la Unión Europea, que es del 13%, lo que supone que por cada euro que gana un hombre una mujer gana 0,87 euros.
El estudio de Adecco muestra también que las mujeres se hacen cargo de 2,6 veces más tareas no remuneradas de cuidados que los hombres. Un estudio publicado por PIMEC y elaborado por la Universidad de Compostela a finales del año pasado cuantificaba esta diferencia con una estimativa de que las mujeres dedican el 63% de su tiempo de trabajo a tareas no remuneradas y los hombres tan solo un 38%.
Esto implica, según cifras mundiales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, que las mujeres dedicarían 289,1 minutos al día a trabajos no remunerados y 145,9 a remunerados, tendencia opuesta a los hombres que dedican de media 236,3 minutos a tareas remuneradas y 166,8 a no remuneradas. La suma total de minutos no remunerados y remunerados trabajados da como resultado que las mujeres trabajan 455 minutos al día y los hombres, 382.