Kelly Rojas es la ingeniera responsable del NOC (Network Operation Centre) de Barcelona Cable Landing Station (Barcelona CLS). Su labor se centra en supervisar y gestionar las operaciones de la red de telecomunicaciones que la empresa AFR-IX Telecom, que gestiona la estación, tiene en África. Además, se encarga de supervisar los sistemas de cables submarinos hay operativos en el Barcelona CLS. En el desempeño de su labor topa diariamente con la brecha de género que hay en el sector tecnológico, en general, y las ingenierías, en particular. Los equipos femeninos escasean al otro lado del teléfono o el streaming y más aún si nos referimos a que los clientes de AFR-IX Telecom son mayoritariamente africanos, y en este mercado, solo el 35% de los empleados de nivel básico y medio son mujeres. De hecho, "solo uno de cada 10 líderes son mujeres", explica Rojas.

Su experiencia profesional es válida para transmitir que faltan vocaciones femeninas en el sector, justamente un 23 de junio, la fecha que hace dos años eligió la UNESCO para celebrar el Día Internacional de la Mujer en la Ingeniería. "Si faltan más mujeres para conseguir un equilibrio entre compañeros y compañeras en el área de ingeniería, es más bien por el reflejo de la realidad del sector", comenta a ON ECONOMIA. Recuerda que las ingenierías son todavía unos estudios con menos presencia femenina y es necesario trabajar para despertar vocaciones a edades tempranas, que las niñas y jóvenes piensen en las ingenierías como en una salida profesional apasionante. Porque, una vez la ingeniera se ha incorporado al mercado laboral, “creo que se nos valora por igual: somos igualmente resolutivas, analíticas y, en general, me atrevería a decir que vamos sobradas de inteligencia emocional, muy necesaria para coordinar equipos”. El problema quizá no es ese, según Rojas, sino más bien “cómo llegar a esos puestos de responsabilidad sin tener que escoger entre carrera profesional o vida familiar. Y esto, me temo, no es un lastre de las ingenierías, sino un añadido que todavía pesa más a las mujeres que a los hombres, en todos los sectores”.

En el caso de Kelly Rojas, graduada en Telecomunicaciones por la Universidad Rafael Belloso Chacín, su carrera empezó como especialista en redes informáticas en Venezuela, su país de origen, trabajando para grandes proyectos de Telefónica y Huawei. “Empecé a trabajar para AFR-IX Telecom en 2016, como ingeniera del NOC, y en solo un año pasé a ser la manager del mismo, de manera que llevo trabajando en la estación de Sant Adrià del Besòs desde su inauguración, el pasado mes de octubre”. A Rojas le interesó el proyecto de AFR-IX Telecom por su visión estratégica, las tecnologías involucradas y los desafíos que conlleva. “La visión del proyecto de esta empresa es realmente inspiradora. Desde el principio, quedó claro que estábamos trabajando en algo innovador y con un potencial transformador. La empresa ha estado a la vanguardia de la industria, adoptando tecnologías de última generación y buscando constantemente nuevas formas de mejorar y adaptarse a un mercado en constante evolución”, comenta.

Pese a admitir que “en el equipo que dirijo en el NOC (Network Operation Centre), hay solo una mujer”, Rojas valora la presencia femenina que hay en otros departamentos de la empresa. De hecho, el 25% de la plantilla ubicada en Barcelona CLS la integran mujeres, algunas de ellas liderando áreas como finanzas, procesos, marketing y recursos Humanos.

Su experiencia como ingeniera es importante para la empresa que necesita detectar incidencias y problemas en la red para poder solucionarlos de manera rápida y eficiente. Esto implica recibir y gestionar las alarmas y alertas que llegan al NOC, así como coordinar con los equipos técnicos para llevar a cabo las acciones necesarias para resolver las incidencias. “El NOC es considerado el corazón de nuestra red, ya que es el centro de operaciones donde se reciben y monitorean todas las señales y alarmas relacionadas con el funcionamiento de la red. Es nuestro objetivo garantizar un funcionamiento eficiente y minimizar cualquier interrupción en los servicios de telecomunicaciones”, expone Rojas.

Conoce los desafíos a los que se enfrenta: en la transmisión de datos, uno de los problemas más comunes es el corte de fibras ópticas debido “a trabajos u obras de mantenimiento en el área, y aunque parezca de chiste, los provocados por roedores”, explica. Además, los cortes de cables submarinos son otra dificultad que puede ocurrir debido a la pesca de arrastre u otros movimientos tectónicos bajo el mar. Incluso situaciones inusuales, como la caída de árboles milenarios, pueden cortar el despliegue de la fibra. Desde la perspectiva de la gestión, uno de los desafíos es coordinar y colaborar con diferentes equipos distribuidos en diversas partes del mundo para solucionar problemas específicos, y ahí también está esta ingeniera con una intensa carrera profesional a sus 37 años.

Un consejo para aquellas jóvenes que quieran seguir sus pasos es que no se pongan barreras y confíen plenamente en su potencial. La clave para triunfar en este campo es la constancia y dedicación, defiende. “Cada obstáculo que encuentre en su camino es una oportunidad de crecimiento y aprendizaje. Nada es imposible, solo son desafíos esperando a ser superados”, manifiesta. Mantener viva su pasión por la ingeniería y que busque oportunidades para expandir sus conocimientos es otra de sus recetas: “Que siga explorando, investigando y creando. La solución a cualquier problema está ahí, solo debe tener la determinación y perseverancia para encontrarla”.

Insiste en la necesidad de un cambio de paradigma sobre la dedicación de las mujeres, y los jóvenes en general, a las STEM (acrónimo en inglés de Science, Technology, Engineering and Mathematics) y cree que sería oportuno incentivar a los padres a apuntar a sus hijos a actividades relacionadas con la tecnología desde una edad temprana. “La tecnología está en constante avance y es esencial que los niños desarrollen habilidades en este campo desde temprano. Esto les permitirá adquirir una base sólida y despertar su interés por la ingeniería”, alerta Rojas. “Confío en que verme a mí en un puesto de responsabilidad las empodere a ellas. Es importante tener referentes”, concluye.