El precio del petróleo sigue creciendo y el mercado no quita ojo a la posición de China. La reapertura del país asiático es una de las noticias más relevantes del mercado financiero. Tras varios meses con la vigencia de la política ‘cero Covid’, la nación china ha decidido reabrir sus puertas, lo que ha supuesto la reactivación económica de todo el país. En estas, el petróleo ha sido una de las materias primas que más ha notado el efecto de la reapertura de China.
Y es que, que el segundo mayor consumidor global de ‘oro negro’ vuelva a poner a toda máquina su economía es una noticia alentadora. Los precios a futuro de Brent, esquisto de referencia en el mercado europeo, y del WTI, petróleo de referencia en Estados Unidos, se han embarcado en la tendencia alcista desde el pasado 4 de enero, fecha en la que surgieron los indicios de la reapertura de China. Pese a un inicio no tan próspero, el ‘oro negro’ no se sale del carril y se apunta alzas en varias sesiones del nuevo año.
Los expertos del mercado ubican a China como uno de los principales motivos de las alzas del petróleo. Los analistas de materias primas de ING creen que el impulso, además de por el posible aumento de la demanda de China, se debe a “al dato de la rebaja del IPC de Estados Unidos”, que se conoció el pasado 12 de enero. Aun esto, Warren Patterson y Ewa Manthey, analistas de la entidad bancaria holandesa, explican que “el optimismo en torno a la demanda china también parece haber proporcionado cierta ventaja al mercado”.
La demanda china está de vuelta
Los expertos agregan que “una serie de señales, incluido un aumento en las cuotas de importación de petróleo crudo, sugieren la recuperación de la demanda de petróleo de China este año”. El país asiático es el segundo mayor demandante de la materia prima, solo superado por Estados Unidos. Según Enerdata, en 2021, el consumo de China representó el 16% del total de petróleo consumido en todo el mundo. En dicho año, la nación asiática consumió más de 15 millones de barriles de esquisto diario.
Es por ello por lo que, con la paralización de varios sectores industriales debido a la Covid, la demanda china cayó, mermando también el precio del ‘oro negro’. Pese a que el valor emergió con la guerra de Ucrania, la realidad es que la tendencia que venía indicando a finales del pasado ejercicio era bajista. Todo ha cambiado cuando China ha reactivado su economía, y han surgido los augurios de un posible repunte de la demanda han llegado al mercado.
Brent y WTI, al alza
Hoy por hoy, el Brent se sitúa por encima de los 87,64 dólares por barril, y muestra un alza del 12,20% desde principios de año. En la misma línea, el WTI pelea por superar los 82 dólares por barril, y, hasta ahora, muestra un crecimiento anual superior al 12%. Antonio Castelo, analista de iBroker.es, expresa que las nuevas alzas que se puedan dar en el precio del crudo pueden venir por “un aumento de la demanda, por ejemplo, si China se incorpora al crecimiento, que es en parte lo que se baraja en las últimas sesiones”.
Otro de los puntos a los que se refiere el analista para ver nuevas alzas en el precio del esquisto es “una caída de la oferta, probablemente de los países productores, que terminarán bajando el ritmo de producción para mantener los precios”. Esto lo vimos el pasado noviembre, cuando la OPEP determinó el recorte de producción en dos millones de barriles diarios. El objetivo de la organización: elevar el precio del esquisto.
Cuidado con el endurecimiento monetario
Pese al optimismo que, hoy por hoy, invade en entorno del petróleo, la realidad es que la coyuntura económica sigue siendo compleja. El entorno actual sigue marcado por la inflación y las subidas de tipos de los bancos centrales. Con la situación actual, en la que la política económica seguirá siendo restrictiva, la demanda podría ceder. Antonio Castelo, analista de iBroker.es, explica que “un entorno de tipos elevados supone que las inversiones necesarias para reactivar la producción del sector tendrán mayores costes de financiación”. Además de ello, el analista comenta que “una situación con tipos elevados iría en contra de la actividad económica, disminuiría la demanda y los precios caerían”.
Esta es uno de los posibles factores podrían frenar la escalada del petróleo hacia los 100 dólares. Varias firmas de inversión ven el precio del Brent escalando hasta dicha barrera. A mediados del pasado diciembre, Bank of America lanzó una estimación que apuntaba a que el esquisto europeo subiría hasta los 100 dólares gracias a la moderación de la política económica de la Fed y a la reactivación económica de China.
Pese a ello, y contando con que la dinámica del ‘oro negro’ es alcista, con un escenario como el actual, pueden surgir nuevos problemas. Otro factor que puede ralentizar la marcha de la materia prima es una posible desaceleración económica global. El peligro de que varias naciones caigan en recesión sigue siendo una realidad, y en un entorno de endurecimiento económico, la demanda podría verse mermada.
Aun esto, parece que el mercado sigue valorando la reapertura de China y el más que probable crecimiento de la demanda del país asiático. Está por ver si el Brent escala hasta los 100 dólares. Por ahora, el esquisto de referencia se anota una subida del 12% desde el pasado 4 de enero, y ya presiona por superar los 88 dólares por barril.