El pasado 15 de abril, el banco Renta 4 lanzaba el Fondo de Inversión Libre, Renta 4 Cripto FIL, que permitirá a los inversores españoles acceder a las criptomonedas con la seguridad y diversificación de los fondos de inversión. Este fondo está disponible para profesionales con un mínimo de entrada de 30.000 euros. Se trata del primer fondo español con el 100% de exposición en criptomonedas, tras el éxito de los fondos directos lanzados este mismo año en Estados Unidos. La exposición en criptomonedas se materializa a través de instrumentos financieros cotizados (ETPs y ETFs). La cartera está formada, mayoritariamente, por bitcoin y ethereum (las dos criptomonedas que concentran la mayor capitalización) y en menor medida por otras criptomonedas, excluyendo las denominadas memecoins y las stablecoins. En ON ECONOMIA hemos hablado con Miguel Jaureguízar, director de Desarrollo Digital de Renta 4 Banco y responsable de Renta 4 Digital Assets, para abundar en las características de esta nueva oferta de inversión.
Miguel Jaureguízar, señala que el Fondo de Inversión Libre, Renta 4 Cripto FIL, recién lanzado por el banco, ofrece a los inversores españoles acceso a las criptomonedas con la seguridad y diversificación de los fondos de inversión. Con un mínimo de entrada de 30.000 euros, este fondo es el primero en España con el 100% de exposición en criptomonedas, siguiendo el éxito de fondos similares en Estados Unidos. La cartera del fondo se compone principalmente de Bitcoin y Ethereum, junto con otras criptomonedas, excluyendo memecoins y stablecoins.
Según Jaureguízar, el fondo invierte en ETPs, principalmente ETNs cotizados en bolsas europeas, replicando la composición exacta de la cartera deseada. Estima que el fondo capturará la evolución de las criptomonedas en su práctica totalidad, reflejando resultados muy similares al mercado cripto en general. Solo inversores profesionales pueden acceder al fondo, cumpliendo con la definición de profesional establecida en MiFID2 y con un mínimo de inversión de 30.000 euros.
El director explica que han excluido memecoins de la cartera del fondo, ya que estas no aportan valor económico y son principalmente objeto de especulación. Respecto a las stablecoins, su naturaleza es similar a un derivado sobre el dinero fiat, generando dudas regulatorias. El fondo ofrece diversificación y regulación, lo que lo hace más atractivo que invertir directamente en criptodivisas.
Jaureguízar comenta que la comisión de éxito del 15% es acorde con la práctica habitual en fondos de activos alternativos donde ronda el 20%. Esta comisión busca alinear los intereses de la gestión con los de los inversores. Sobre las expectativas para los próximos 3-5 años, espera una acumulación progresiva de valor en el contexto de la Web3 o Internet del Valor, impulsada por la tokenización y la emergencia de activos digitales, aunque reconoce la volatilidad inherente a las criptomonedas.
Cuánto invertir en criptomonedas
Preguntado por el porcentaje de la cartera que debe invertirse en criptomonedas, Jaureguízar apunta a que “depende de los objetivos de cada inversor. Siendo los subyacentes de naturaleza muy volátil, y con un valor que estimamos se manifiesta sobre todo en el largo plazo, en una mayoría de casos debería formar parte de un porcentaje moderado de la cartera inversora, atendiendo al perfil tanto de rentabilidad esperada como de volatilidad y correlación con el resto de activos de cartera”, comenta.
Con una capitalización total del mercado de activos líquidos aproximada de 191 billones de dólares y las criptomonedas representando cerca de 2 billones de dólares, estas constituyen alrededor del 1% del total. “Este mercado ahora es comparable en tamaño a los bonos de alto rendimiento, los bonos vinculados a la inflación o las pequeñas capitalizaciones de mercados emergentes”, explica Pierre Debru, jefe de análisis cuantitativo de la gestora WisdomTree.
Y este 1% debería ser lo que ocupase la criptomonedas en una cartera. En otras palabras, en la actualidad, la posición neutral para un gestor de multiactivos es invertir el 1% de sus activos en Bitcoin y criptomonedas. El 1% es la opción racional para los inversores en ausencia de una tesis de inversión sólida y respaldada que apoye la desaparición del criptoespacio. Se trata de una posición segura que permite beneficiarse del crecimiento continuo del ámbito en escenarios positivos y que permite limitar las pérdidas (al 1%) en escenarios más negativos.
Con activos altamente volátiles como las criptomonedas, es aún más importante tener esto en cuenta. En términos de rendimiento, bitcoin ha sido el activo más rentable en 9 de los últimos 12 años, registrando incrementos por encima del 100% en seis de esos años. Esos rendimientos desmesurados tampoco son cosa del pasado, ya que el año pasado solamente, bitcoin obtuvo una rentabilidad del 157%. Esto resalta la ventaja de considerar la posibilidad de asignar un porcentaje de la cartera a criptoactivos, en vez de omitirlos.