La inversión en ciudades europeas consolida Madrid y Barcelona entre las diez más atractivas para llevar a cabo negocios este 2023. En concreto, según el último estudio del European Investor Intentions Survey elaborado por la consultora CBRE, Madrid escala hasta la quinta posición y Barcelona a la sexta, que empata con la capital portuguesa de Lisboa. Lo que se analiza en este informe son las ganas o la aptitud de los inversores con sede en Europa y sus preferencias de inversión en los principales mercados europeos.
Liderazgo de Londres y París
Hay que tener en cuenta que la evolución de la capital catalana es meteórica. El último 2022, Barcelona entró por primera vez en el ranking de las diez ciudades europeas más atractivas para los inversores, y se situó en la novena posición. Este año, Barcelona ha alcanzado la sexta posición, por delante de Copenhague, Varsovia y Frankfurt. Londres y París han consolidado su liderazgo como las urbes más atractivas para invertir, con una diferencia sustancial con respecto al tercer lugar, Amsterdam. Berlín se ha mantenido también en la cuarta posición, seguido de Madrid, que también escala posiciones con respecto al año pasado.
"Barcelona ha experimentado una evolución extraordinaria en los niveles de inversión, especialmente a partir del año 2019, donde por primera vez alcanzó la cifra de los 3.000 millones de euros. A partir de entonces, las cifras han incrementado hasta conseguir la consolidación de los 3.600 millones de euros anuales en el 2022. Uno de los principales motivos que han llevado a Barcelona a estas cifras es el gran interés por parte de los inversores internacionales por coger posiciones a la ciudad. En este sentido, los resultados del European Investor Intentions Survey para el 2023 avalan esta realidad, ya que Barcelona se sitúa por primera vez como uno de los seis destinos de inversión europeos prioritarios para los fórums internacionales", ha asegurado el Head of CBRE Barcelona, Xavier Güell.
España y Alemania duplican su presencia
En términos generales, España se ha situado como el cuarto país más atractivo para los inversores europeos en el 2023, tres posiciones por encima del año anterior. El Reino Unido ha alcanzado el primer lugar, seguimiento de Alemania y Francia. España, junto con Alemania, son los únicos países que cuentan con más de una ciudad en este ranking, demostrando la sólida presencia del sector inmobiliario. En un contexto de incertidumbre macroeconómica, los inversores mantienen perspectivas relativamente buenas para el 2023. La mitad de ellos espera que la actividad inversora se mantenga estable o aumente a lo largo del año. Entre los principales desafíos que plantean se encuentran el endurecimiento de las condiciones crediticias, el temor a una recesión y el desajuste de las expectativas entre comprador y vendedor. La elevada inflación también es uno de los grandes retos para los inversores.
¿Atrás queda la pandemia?
Por sectores, oficinas se mantiene como el segmento que más interés despierta en Europa en un contexto de vuelta en la oficina cada vez más consolidado, si bien el multifamily sigue acortando distancias. Este se basa en las propiedades de renta residencial, es decir, a aquellos activos inmobiliarios que se arriendan a personas que viven allí. Aun así, en sentido estricto se refiere a edificaciones dónde viven muchas familias, por ejemplo un edificio con múltiples departamentos donde se alojan varias unidades familiares. En concreto, un 29% de los inversores europeos se decantan por oficinas, un 25% por residencial y un 23% por Industrial & Logístico. En menor medida, se encuentran retail y hoteles, con un 8% en los dos casos, y "otros", con un 7%, de los cuales un tercio se decanta por activos residenciales alternativos. Con respecto al tipo de activo, de los que prefieren oficinas, más de la mitad se decantan por oficinas de Grado A en una ubicación prime, mientras que un tercio opta por oficinas de Grado B en una zona prime. Con respecto a logística, los inversores se dividen entre activos antiguos y modernos en las principales ciudades.
En el segmento de alquiler retail, los parques comerciales siguen generando uno grande atractivo, series de supermercados, high street y centros comerciales. Por otra parte, más de la mitad de los encuestados escogieron hoteles full-service. Según el estudio, se prevén descuentos en todas las clases de activos, especialmente en oficinas 'value-add', retail y logística. Del estudio se desprende también el interés por los sectores alternativos. De hecho, aproximadamente el 70% de los encuestados busca exposición en al menos un segmento, destacando student living. Life sciences, planteado en la encuesta por primera vez este año, ha sido la segunda opción más escogida, seguida de la vivienda para las personas mayores.
El actual contexto macroeconómico y geopolítico no ha paralizado la creciente adopción de criterios ESG y su cumplimiento sigue encabezando la lista de prioridades de los inversores europeos. En este nuevo escenario, los criterios ESG, en inglés 'Environmental, Social and Governance', (ambiental, social y de gobernanza) han adquirido una gran relevancia en los últimos años y han dado lugar a la figura del Inversor Socialmente Responsable. Es decir, los factores ambientales, sociales y de buen gobierno son los más valorados por los inversores actuales, más allá de los resultados financieros. No es una moda, sino la nueva conducta y preocupaciones del accionariado, que apuesta por empresas comprometidas con el medio ambiente, con la sociedad y con las buenas prácticas de gobierno corporativo. El 81% de los inversores seguirá incorporándolos en todas sus decisiones de inversión y un tercio de los inversores está dispuesto a pagar rentas más altas para los activos sostenibles. En concreto, estas pueden alcanzar hasta un 20% por encima del precio del mercado. En contra, solo un 4% de los inversores europeos no planea adoptar criterios ESG.