La proporción de ciudadanos en España que posee criptoactivos se ha más que duplicado en apenas dos años, según un estudio del Banco Central Europeo (BCE), que eleva al 9% la relación de españoles que tenían este tipo de monedas opacas en 2024, frente al 4% de 2022, un crecimiento en línea con la media de la eurozona. Según el “Estudio sobre las actitudes de pago de los consumidores en la zona euro”, en el conjunto de la eurozona, la proporción de encuestados que dijeron poseer criptoactivos ha pasado del 4% en 2022 al 9% en 2024, un nivel que el BCE considera "bastante bajo"

Entre los veinte países del euro, solo 13 informaron de porcentajes de tenencia de criptos superiores al 10%, correspondiendo los más significativos a Eslovenia (15%) y Grecia (14%), mientras que Irlanda, Croacia, Chipre, Letonia y Austria informaron de una proporción del 13%. Los criptoactivos, en especial bitcoin, ha cobrado un interés especial entre los inversores con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca por segunda vez.

En el extremo opuesto, los países de la zona euro con un menor porcentaje de personas que declararon poseer criptoactivos en 2024 fueron Alemania y Países Bajos, con un 6% en ambos casos, por delante de Estonia, con un 7%, y de Lituania, con un 8%, informa EP.

En línea con el 9% de España y de la media de la zona euro también se situaron los franceses e italianos, aunque en 2022 en el país galo la proporción era de alrededor del 3% y en el país transalpino ligeramente superior al 2%. En términos de edad, el BCE destaca que las personas de entre 25 y 39 años tenían más probabilidades de poseer criptoactivos, seguidas por las de 18 a 24 años.

En cualquier caso, a pesar del creciente interés en los criptoactivos, "la tasa de adopción entre el público sigue siendo comparativamente baja".

Inversión

Asimismo, la consulta del BCE entre las personas que informaron de la tenencia de criptoactivos constata que de manera mayoritaria (54%) su finalidad es únicamente como medio de inversión, mientras que el 16% los usa como medio de pago y un 19% para ambos. No obstante, el BCE señala que el análisis por países revela disparidades significativas en el uso de criptoactivos para inversión en comparación con el pago, ya que, en Países Bajos, el 90% de los encuestados informó que utilizaba criptoactivos únicamente para inversiones, mientras que el 2% los utilizaba solo para pagos.

Asimismo, un total del 82% de los encuestados en Alemania declararon que utilizan criptoactivos únicamente con fines de inversión, pero solo el 6% los utiliza únicamente como método de pago. De su lado, Francia registró la diferencia más pequeña entre los dos usos, con un 57% utilizándolos exclusivamente para inversión y un 25% únicamente para pago. En el caso de España, un 57% declaró su uso exclusivo como inversión, frente al 19% que los usa únicamente para pagos.

Asimismo, entre aquellos que usan criptoactivos tanto con fines de pago como de inversión, el mayor porcentaje se observó en Lituania, con un 30%, por delante del 29% de Chipre y Bélgica, mientras que solo el 4% en los Países Bajos dijo lo mismo. En España, un 20% de los encuestados que tienen criptoactivos indicó su uso para inversión y pagos.