Banco Santander ha sido uno de los enigmas del IBEX 35 en el presente ejercicio. Pese a que la entidad bancaria liderada por Ana Botín ha firmado un año excepcional en el plano comercial, Santander no ha logrado entablar la tendencia alcista en el transcurso del ejercicio. La que es la entidad bancaria más grande de España, es la única que, salvo sorpresas, cerrará el año con el piloto en rojo encendido en el IBEX 35.

Hoy por hoy, y a falta de una sesión bursátil, Santander mantiene un decrecimiento anual superior al 5%, el cual ha llegado a ser de un 17% en algunos tramos del ejercicio. Banco Santander, pese a contar con buenas estimaciones por parte de los analistas y ser una de las compañías más solventes del panorama financiero nacional, cierra el curso siendo el único valor de la gran banca española que no crece en el IBEX 35. Todo esto inmersos en el que seguramente haya sido el mejor año para el sector en términos bursátiles, y uno de los más alcistas a nivel comercial.

Las subidas de tipos no han aupado a la acción

Las subidas de tipos de interés llevadas a cabo por los bancos centrales han catalizado los ascensos en la mayoría de las entidades bancarias. De hecho, CaixaBank y Banco Sabadell se anotan un crecimiento superior al 50% en lo que va de año, siendo los dos valores más potentes del IBEX 35 en 2022. Aun con las variaciones monetarias del Banco Central Europeo, Banco Santander no ha logrado crecer en Bolsa. Sí que lo han hecho sus ingresos, ya que la restrictiva política monetaria ha dilatado los márgenes de crecimiento de todos los bancos del país.

Antonio Castelo, analista de iBroker.es, cree que “a diferencia de lo que ocurre con la banca doméstica, que recibe cualquier subida de tipos del BCE prácticamente de forma directa en sus cuentas de resultados, en Santander hay que tener en cuenta que su negocio está mucho más diversificado, tanto geográficamente como en las áreas comerciales”. Lo cierto es que la presencia de Banco Santander ha sido uno de los ‘peros’ que el mercado le ha puesto a la entidad bancaria.

Con presencia en mercados de ‘riesgo’

Y es que, el banco santanderino tiene presencia en varios mercados que, de cara a los inversores, no suscitan confianza, como por ejemplo México o Brasil. Pese a que ambos países han sido dos minas de oro para Santander, los inversores no han terminado de confiar en la presencia del banco en estos mercados de ‘riesgo’. “Siempre que contemplamos un negocio diversificado, hay una parte negativa, y es que la rentabilidad se ve disminuida, ya que lo que es un bueno en un país, puede no serlo en otro”, opina Antonio Castelo, analista de iBroker.es

Brasil y México siguen siendo dos filones comerciales para Banco Santander. Pese a ello, y ante el previsible deterioro económico, no solo en ambos países, sino en todo el mundo, el mercado prestará más atención a los mercados que son potencialmente más arriesgados.

Santander prosigue en su programa de recompra de acciones

Aunque la tendencia anual ha sido bajista, el banco viene creciendo en los últimos seis meses. Desde finales de julio, Banco Santander muestra un crecimiento ligeramente superior al 2% en el IBEX 35. Esta apreciación no ha sido suficiente para voltear la dinámica negativa que el banco mantiene en lo que va de año. Aún ello, sí ha ayudado a minimizar el descenso acumulado. Cabe destacar que, desde inicios de año hasta finales de julio, Banco Santander marcaba un deterioro superior al 17% en el IBEX 35.

Darío García, analista de XTB, explica que “parte de las recientes alzas han venido motivadas por la aceleración de su programa de recompra de acciones que por la estructura operativa”. De hecho, hasta ahora, la entidad santanderina ha realizado la recompra de cerca de 221 millones de acciones, lo que supone que el programa de recompra está completo al 62%.

Pese al ligero crecimiento que la entidad viene reflejando, Darío García explica que “Banco Santander mantiene más oficinas abiertas a nivel global que el resto de sus comparables, y los costes fijos siguen lastrando el beneficio operativo de la entidad”. Además de esto, “la agresiva política de dividendos mediante split, ha diluido el peso de los accionistas, y muchos de ellos han perdido interés en la entidad en beneficio de otros bancos”, comenta García, analista de XTB.

El mercado presta atención a la morosidad

Por otro lado, los inversores ya se hacen cuentas de lo que está por venir. Y es que, pese a que la banca ha vivido un año extraordinario en el mercado de valores, los analistas prevén un cierto retroceso. Los bancos centrales han asegurado que mantendrán las subidas de tipos el tiempo que haga falta. Pese a ello, “2023 arranca con las expectativas de continuación en las alzas de tipos, pero con menor intensidad, y eso puede frenar el interés sobre el sector que deberá hacer control de riesgos sobre la morosidad”, explica Darío García, analista de XTB.

La mora es una de las cuestiones en las que tanto analistas como inversores se fijan. Aunque la tasa de morosidad bancaria sigue estando en niveles bajos, un 3,8% según datos del Banco de España, la continuación de las subidas de tipos podría apretar el bolsillo de los consumidores. De ahí que el mercado pueda hacerse a la idea de que la morosidad puede subir. La mora “es un parámetro que probablemente se incremente durante el próximo año”, añade Darío García, analista de XTB.

Salvo sorpresa, el banco cerrará el ejercicio por debajo de los niveles con los que comenzó. Banco Santander sigue sin dar respuesta en el IBEX 35 aun siendo uno de los valores más sólidos del mercado de valores español. La compañía cuenta con buenas perspectivas, y el consenso de mercado fija sobre los 4 euros el precio objetivo de la acción. Aún ello, y al contrario que sus homólogos, Banco Santander no crece en el mejor año bursátil de la banca.