La inteligencia artificial, a diferencia del metaverso u otras grandes disrupciones de las últimas décadas, ya es una realidad aplicable y exigible para muchas empresas. Ahora bien, el cómo es muy importante y su implementación en los procesos productivos resulta el gran obstáculo en España. Así lo especifica un informe un reciente estudio de Qlik®, líder mundial en integración de datos, analítica e Inteligencia Artificial. Esta investigación profundiza en las dificultades a que se enfrentan las compañías de diferentes sectores a la hora de implementar esta tecnología en procesos empresariales.

Mucho presupuesto, pocos resultados

Los resultados del informe destacan la urgencia de priorizar el uso responsable y garantizar la transparencia, no solo para cumplir las regulaciones emergentes sino también para fomentar la confianza en estas herramientas. Entre los retos y las iniciativas estratégicas que rodean esta tecnología resaltan que la adopción masiva de la IA coge desprevenidos a muchos. Casi la totalidad de las organizaciones encuestadas (un 97%) utilizan de alguna manera la Inteligencia Artificial, con un 74% ya implementando tecnología de este tipo en fase de producción. Eso supone una tendencia clara hacia las operaciones AI-driven en diferentes sectores. Otro obstáculo es la brecha entre Inversión y Estrategia: Si bien todos los encuestados reconocen estar invirtiendo en IA , un 61% está dedicando un presupuesto significativo a estas tecnologías. Sin embargo, un 74% de las organizaciones admiten que todavía no tienen una estrategia unificado a nivel organizativo cuando se trata de implementar la IA de manera responsable.

Más allá de estos dos grandes aspectos, quedan los que afectan de forma particular al conjunto de la Unión Europea y hacen referencia a los desafíos éticos de la IA. El informe destaca varios desafíos clave a que se enfrentan las organizaciones, incluyendo: un 86% tienen dificultades por garantizar la comprensión y la transparencia de sistemas basados en IA. Casi la totalidad de las organizaciones (99%) tienen dificultades a la hora de cumplir las regulaciones y los estándares normativos, subrayando la complejidad legislativa que todavía rodea esta tecnología.

¿Qué escollos tienen las empresas?

Por otra parte, también hay que tener en cuenta el impacto de la IA responsable a las operaciones: A pesar de los retos, un 74% de las organizaciones sitúan como máxima prioridad el uso de una IA responsable. Más de una cuarta parte de las organizaciones afirman que se han encontrado con un incremento de costes operativos, un escrutinio normativo y retrasos a la salida al mercado, a causa de una falta de responsabilidad aplicada a la IA. Los stakeholders también tienen que tomar decisiones sobre la IA: Esta investigación resalta la participación de los stakeholders en este ámbito, poniendo el foco en los departamentos de TI, que estarían ejerciendo el papel más proactivo. Todo eso enfatiza la necesidad de plantear enfoques inclusivos y colaborativos a nivel de stakeholders en el despliegue y la gobernanza ética de la IA.

En base a estos hallazgos, Qlik quiere poner el foco a la necesidad de alinear las tecnologías basadas en IA con los principios éticos y responsables. El objetivo de Qlik es proporcionar herramientas sólidas de gestión de datos y analítica, además de crear herramientas intuitivas que mejoren la alfabetización de datos y la gobernanza. Además, la investigación subraya la importancia de contar con una base de datos sólida, que es fundamental para garantizar la transparencia, la responsabilidad y la equidad en las aplicaciones de IA. En palabras de Brendan Grady, Director General del departamento de Analítica en Qlik: "Esta encuesta refleja nuestra postura con respecto a la adopción de la IA, porque va más allá de la tecnología. Se trata de garantizar una base de datos sólida para la toma de decisiones y la innovación. En Qlik, capacitamos las empresas no solo para que puedan implementarla, sino para integrarla de manera significativa, alineándola con sus objetivos estratégicos".