2025: Tres cambios que transformarán el mundo
- Esteve Almirall
- Barcelona. Jueves, 2 de enero de 2025. 05:30
- Tiempo de lectura: 3 minutos
A veces, las disrupciones aceleran el curso de la historia. Lo que parecía distante o improbable se convierte de repente en algo inminente. Un buen ejemplo fue la llegada de ChatGPT en noviembre de 2022. Aunque GPT-3 y GPT-3.5 ya existían, el formato de chat les otorgó una accesibilidad inesperada, transformándolos en una revolución que sacudió el mundo.
Este 2025 nos traerá tres fenómenos de impacto similar que podrían cambiar radicalmente nuestra sociedad.
1) Los modelos de lenguaje superarán a los humanos.
No es ninguna exageración afirmar que los modelos de IA ya destacan en campos como redacción, traducción, programación, matemáticas, física, medicina o economía. Sin embargo, hasta ahora, las capacidades humanas más avanzadas mantenían cierta ventaja. Pero eso está a punto de cambiar.
Las últimas generaciones de modelos, como el o3 de OpenAI, Gemini 2 de Google, o DeepSeek chino, están rompiendo barreras que parecían insuperables. Por ejemplo, el modelo o3 ha alcanzado un ELO de 2727 en programación, superando al propio director científico de OpenAI. En matemáticas de frontera, estos modelos multiplican por diez la capacidad de sus predecesores en problemas de extrema dificultad que los mejores matemáticos humanos tardan días o semanas en resolver. En nuevos benchmarks como el ARC-AGI de François Chollet, diseñado para medir la inteligencia general, estos modelos ya obtienen puntuaciones superiores a las medias humanas. En diagnóstico médico, los mejores modelos ya superan a los médicos humanos en muchas especialidades, a veces con una gran diferencia (20% frente a 80% de acierto).
Este 2025 podría ser el año en el que la IA supere las capacidades humanas en disciplinas clave como la medicina, la economía o la investigación científica. Las implicaciones serán profundas: desde la aceleración del descubrimiento científico hasta los retos psicológicos y sociales de aceptar este cambio.
La feroz competencia entre China y EE.UU. actuará como catalizador, impulsando aún más estos avances. ¡En Europa tendremos que ponernos las pilas!
2) Los agentes tomarán las riendas de la innovación.
Si los modelos de lenguaje han ampliado nuestras capacidades, los agentes serán los que transformarán nuestro día a día. Los agentes son aplicaciones que, mediante la combinación de modelos de IA, realizarán tareas complejas de manera autónoma: desde buscar billetes al mejor precio hasta gestionar reuniones, corregir exámenes, redactar artículos o hacer diagnósticos médicos.
Los agentes no solo trabajarán con datos, sino que interactuarán con el mundo físico: gestionarán robots, comprarán, venderán, ofrecerán servicio al cliente y tomarán decisiones en tiempo real.
Estas capacidades revolucionarán sectores enteros. En el ámbito jurídico, podrán analizar casos y redactar argumentos legales con precisión. En la enseñanza, corregirán exámenes y gestionarán enseñanzas personalizadas, como ya ocurre en China. En medicina, realizarán diagnósticos y tratamientos. Y en la gestión empresarial, veremos cómo la atención al cliente, las ventas... en general, todo lo que pueda hacerse con IA de manera más eficiente y económica, se hará con IA.
Los agentes también redefinirán la economía de la innovación. Para los proveedores de modelos de lenguaje, cada uso de sus modelos representará un ingreso, mientras que los desarrolladores de agentes encontrarán formas de monetizar directamente sus servicios y las empresas finales cambiarán sus tareas y estructuras, redefiniendo sus modelos de negocio y operativos.
3) El mundo físico: piernas y ruedas para la IA.
La IA también tiene piernas y ruedas: son los coches autónomos y los robots humanoides. Hasta ahora, tres problemas han impedido su generalización. Primero, la madurez tecnológica, que parece estar al alcance. Segundo, la regulación: en EE.UU., cada estado regula los coches autónomos, un caos que Elon Musk, con claros intereses en el tema, quiere resolver de inmediato. Tercero, el modelo de negocio: todo era muy caro para un despliegue masivo, pero, como en todo el mundo tech, estos costos están disminuyendo rápidamente.
China ya tiene más robots que el resto del mundo junto. Aún no tantos coches autónomos, pero va camino de ello. Como en todo lo que sucederá en 2025, la batalla por el dominio industrial y tecnológico del planeta entre China y EE.UU. dará alas a este cambio. Primero serán China y EE.UU., pero los taxis-microbuses bajo demanda a un precio muy bajo cambiarán la movilidad, las ciudades y el propio concepto de distancia. Los robots humanoides trabajarán en fábricas, centros logísticos, supermercados, restaurantes... y quizá también en casa. Nada de esto sucederá de golpe, de forma rápida y uniforme, pero no se equivoquen: será inevitable.
¿Qué nos espera en 2025?
¡Nos espera un 2025 de vértigo! Uno podría preguntarse: ¿qué es lo peor que nos puede pasar? Quizá lo peor sea perder el tren, entrar en negación y ser los últimos, perdiendo todas las ventajas competitivas y quedando relegados a luchar por sobrevivir.
Tras una disrupción tecnológica general, como los smartphones o Internet, solo quedan dos tipos de empresas: las que han adoptado el cambio y las que están muertas. No puedes sobrevivir sin Internet o sin smartphones; simplemente no puedes, y no podrás sin la IA generativa.
La pregunta no es si hay que adoptar el cambio, sino cuándo. Si adoptas cuando ya sea generalizado, solo podrás comprar lo que todos tienen, sin ninguna ventaja competitiva.
En febrero de 2011, el CEO de Nokia escribió un memo interno a toda la empresa, llamado “burning platform”, donde explicaba que se estaban hundiendo. Una disrupción general, la del iPhone, los hundió. Cuando lo escribió, prácticamente no podían hacer nada. Pero, de hecho, Nokia había desarrollado algunos de los primeros prototipos de smartphones.
La pregunta no es si hay que subirse al tren de la IA generativa, sino cuándo. Aquellos que la incorporen antes se posicionarán para liderar; los que esperen, quedarán rezagados. El 2025 está aquí. ¿Estás preparado? Asegúrate de que no te pase como a Nokia...