China y las restricciones tecnológicas: un camino cada vez más estrecho
- Mookie Tenembaum
- Buenos Aires (Argentina). Viernes, 13 de diciembre de 2024. 05:30
- Tiempo de lectura: 4 minutos
La situación tecnológica y económica de China se encuentra en una espiral de agravamiento acelerado, marcada por las restricciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados en la industria de semiconductores. Estas medidas plantean barreras mucho más estrictas que las implementadas anteriormente, especialmente bajo la administración de Trump. Además, el panorama sugiere un endurecimiento continuo de estas políticas, con restricciones adicionales que podrían ser devastadoras para las aspiraciones tecnológicas chinas.
Los semiconductores, o chips, son el núcleo de la revolución tecnológica moderna, utilizados en todo, desde smartphones hasta supercomputadoras y sistemas de inteligencia artificial. La fabricación de chips de última generación requiere equipos especializados y conocimientos técnicos avanzados. Y solo un puñado de empresas en el mundo los domina. China, a pesar de ser un gigante tecnológico, depende de estas empresas para producir chips de alta tecnología.
Sin capacidad para fabricar chips de alta tecnología, China depende de sus reservas y del mercado negro, lo cual es insostenible a largo plazo
Entre las compañías más relevantes se encuentran ASML Holding, con sede en los Países Bajos, que es la única en el mundo que produce máquinas de litografía ultravioleta extrema (EUV), necesarias para fabricar chips de última generación. Estas máquinas son la base de los procesadores más avanzados y sistemas de inteligencia artificial. Aunque ASML nunca vendió máquinas EUV a China, las restricciones actuales prohíben incluso la exportación de equipos con menores capacidades. A partir de 2025, tampoco se permitirá el mantenimiento de las máquinas ya vendidas, lo que inutilizará equipos críticos en China. Lam Research, especializada en equipos para procesos de deposición y grabado, es crucial para la fabricación de chips avanzados. Las nuevas medidas limitan tanto la venta de sus herramientas como el soporte técnico, dejando a los fabricantes chinos con equipos obsoletos y sin capacidad para actualizarlos.
KLA Corporation, una compañía estadounidense líder en inspección y metrología, garantiza la calidad en la fabricación de chips. Sin acceso a sus herramientas, las empresas chinas enfrentarán mayores tasas de error en sus procesos de producción, afectando la competitividad de sus productos en el mercado global. Applied Materials, proveedora de equipos para diversas etapas de fabricación, enfrenta restricciones similares. La imposibilidad de recibir mantenimiento y actualizaciones paralizará la producción china en este segmento.
Por qué estas restricciones son peores
Bajo la administración Trump, las restricciones se centraban en limitar las exportaciones de ciertas tecnologías específicas, como los chips avanzados. Sin embargo, las medidas recientes van mucho más allá. Incluyen la prohibición de mantenimiento y actualizaciones: sin acceso al soporte técnico, los equipos existentes en China perderán su funcionalidad. También hay una expansión de las restricciones: ahora incluyen tecnologías más “básicas” como la litografía ultravioleta profunda DUV, anteriormente permitidas. Además, la colaboración multilateral es clave: países como los Países Bajos y Japón, que controlan gran parte de la cadena de suministro, se alinearon con Estados Unidos, cerrando cualquier posible vía de escape para China. Estas nuevas barreras atacan la capacidad de China para mantener operativa su infraestructura tecnológica existente.
La imposibilidad de acceder a tecnologías críticas como la inteligencia artificial avanzada tiene efectos en cascada. China queda rezagada en áreas clave como la computación cuántica, el diseño de chips de 3 nm o menores y la inteligencia artificial generativa. Esto no solo afecta su competitividad global, sino también su capacidad para desarrollar tecnología militar avanzada. Además, sin capacidad para fabricar chips de alta tecnología, China depende de sus reservas actuales y del mercado negro, lo cual es insostenible a largo plazo. A nivel global, estas restricciones también afectan la cadena de suministro. Aunque a corto plazo podrían provocar escasez y aumento de precios, a largo plazo incentivan la diversificación geográfica de la producción, beneficiando a países como India, Vietnam y Malasia.
¿Qué restricciones vendrán?
Proyectar los próximos pasos es esencial para entender el alcance potencial de esta confrontación. Entre las posibles medidas futuras se encuentran la prohibición total de equipos de fabricación, extendiendo las restricciones para cubrir todas las herramientas, incluso las de generaciones anteriores. También podrían incluirse el bloqueo de materiales clave, limitando el acceso de China a materias primas esenciales como el cuarzo ultra-refinado, utilizado en chips de alta precisión. Asimismo, las restricciones en talento podrían prohibir a ingenieros y científicos con ciudadanía estadounidense trabajar en empresas chinas o en proyectos relacionados con inteligencia artificial. Finalmente, el embargo de software y patentes podría bloquear el acceso a programas y licencias necesarios para el diseño de chips. Estas medidas obligarían al país a depender de soluciones domésticas menos eficientes, reduciendo aún más su capacidad de competir.
Qué hace la investigación y por qué es importante
Para un público que no esté familiarizado con el mundo de los semiconductores, es esencial entender que la research (investigación y desarrollo) en este campo define el futuro de la tecnología. Empresas como ASML, KLA o Lam Research invierten miles de millones de dólares en perfeccionar sus equipos. Por ejemplo, ASML produce cada máquina EUV a un costo de más de 300 millones de dólares, representando décadas de avances en física, óptica y ciencia de materiales. Lam Research, por su parte, ofrece herramientas responsables de depositar capas atómicas en chips, un proceso esencial para reducir su tamaño y aumentar su eficiencia. KLA, sin sus sistemas de inspección, haría imposible garantizar que los chips cumplen con los estándares de calidad necesarios para su uso en inteligencia artificial o telecomunicaciones.
Las restricciones actuales no son el final, sino el comienzo de una nueva era en la lucha por el control del futuro tecnológico
Las restricciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados marcan un punto de inflexión en la competencia tecnológica global. China enfrenta un camino cada vez más estrecho para mantenerse en la carrera por la supremacía tecnológica. Sin embargo, estas medidas también generan preguntas fundamentales: ¿Hasta dónde puede llegar el aislamiento tecnológico sin provocar disrupciones globales? Y, sobre todo, ¿qué papel jugarán otros actores en este nuevo orden tecnológico? Lo que está claro es que las restricciones actuales no son el final, sino el comienzo de una nueva era en la lucha por el control del futuro tecnológico.
Las cosas como son.