Cosas del calendario. Por fin llega el 6 de junio y la esperada bajada de los tipos de interés en el Banco Central Europeo (BCE), después del rally de subidas iniciado en julio de 2022 y que ha llevado el precio del dinero al 4,5%. El organismo presidido por Christine Lagarde no le queda otra que aplicar un descenso de 0,25 puntos, tras comprometerse con esta medida, aunque la decisión llega en un momento en el que la inflación de mayo repuntó en dos décimas en la eurozona hasta el 2,6%. Después de tanta insistencia y obsesión con este día de giro en la política monetaria, ¿qué vendrá luego? Los expertos hablan de un largo periodo de calma para ver cómo transcurren las tensiones en los precios, fruto de las subidas salariales, mientras Estados Unidos seguirá sin mover el precio del dinero hasta final de año. Y eso que el dato del índice PCE Core, conocido el viernes, tranquilizó a la comunidad financiera en la medida en que salió en línea con las expectativas, es decir, +0,2% en tasa mensual y +2,8% en tasa anual. 

Orla Garvey, gestora senior de renta fija de Federated Hermes Limited, resume bien este sentimiento que ronda ahora en el mercado: “si bien se han logrado avances significativos en el retorno de la inflación al objetivo, desde los máximos del 10% en 2023 hasta el 2,6% de mayo, es probable que la trayectoria de la inflación en el futuro sea más turbulenta. Si esto se combina con una mejora de las perspectivas de crecimiento en la zona euro, los mercados podrían tener menos confianza en la trayectoria futura de los tipos de interés básicos del BCE e inclinarse por algunos recortes en 2025, como ha ocurrido en las últimas semanas”, explica.

El motor de los tipos, pues, estará parado durante un tiempo y el dinero deberá tomar otras referencias en las que apoyarse a la vez que entra en una fase de menor empuje con las bolsas acumulando una ganancia anual en torno al 11%. Noticias empresariales muy concretas, movimientos accionariales irán moviendo las cotizaciones ya sin el revulsivo de los tipos. Esta semana en España se conocerán los resultados de la multinacional textil Inditex, el valor de más peso en el Ibex 35 y sus cuentas serán exhaustivamente analizadas.

Respecto a la pasada semana, el indicador español ha cerrado con una ganancia del 0,68% hasta los 11.322 puntos, mientras el grueso de grandes mercados ha tenido un ligero comportamiento negativo con caídas de medio punto en el EuroStoxx 600 y también en el S&P 500. Los expertos no esperan sustos porque las cotizaciones están bien asentadas en los resultados empresariales y en la mejora de la economía, pero no ven alicientes claros en los próximos meses. Esperar, aguantar y ver.

El precio del petróleo cayó el 1% hasta 81,37 dólares el barril, mientras que en las criptodivisas el precio del bitcoin se ha estabilizado desde el lunes en torno a los 68.500 dólares, un 0,4% más. Por tanto, bitcoin se mantiene a poca distancia de su máximo histórico de 73.800 alcanzado el pasado mes de marzo. Lo mismo ocurre con el ethereum, que sube un 0,12% en el mismo periodo, tras una ganancia del 24% la semana pasada a raíz de la luz verde dada por la SEC a la comercialización de ETF Ethereum Spot.

Subastas de letras y bonos

La semana comenzará con la lectura final del Índice de Gestores de Compra (PMI) del sector manufacturero de mayo en la Eurozona, según datos de la agenda de Self Bank. A pesar de mostrar la primera lectura de los PMIs una aceleración respecto al mes anterior, el indicador de actividad adelantado del sector industrial continuará previsiblemente por debajo del nivel de expansión (50 puntos), evidenciando el complejo escenario en el que se encuentra la eurozona.

El martes conoceremos el paro registrado en España. Tras contabilizarse en abril una bajada de 60.000 personas, situándose el número de personas desempleadas en 2,6 millones, la cifra más baja desde septiembre de 2008, el inicio de la temporada alta podría favorecer la contratación. Paralelamente, también conoceremos la tasa de desempleo de Alemania, que se espera que se mantenga en un 5,9% de la población activa. Al día siguiente, el miércoles 5, se publicará la lectura final de los PMIs del sector servicios de la Eurozona y de Reino Unido, así como los PMIs compuestos. Adicionalmente, conoceremos el IPP de la Eurozona en el mes de abril.

El jueves 6, la atención de los inversores se centrará en el dato de ventas minoristas de la Eurozona de abril y en la reunión del BCE. A pesar de que los últimos datos de inflación de la Eurozona han mostrado una inesperada aceleración de los precios, los inversores descuentan una bajada de 25 puntos básicos de los tipos de interés. España celebrará subastas de Letras del Tesoro el martes y el jueves de Bonos y Obligaciones que recogerán esa tendencia —al menos momentánea— de rentabilidades menores para la renta fija.

La semana terminará con la publicación de la balanza comercial de Alemania y Francia, y la lectura final del PIB del primer trimestre de la Eurozona. En el plano empresarial tendrá lugar el pago de dividendos de Merlin Properties y Almirall. Asimismo, se celebrará la Junta General de Accionistas de Redeia Corp y Ebro Foods, e Inditex publicará resultados.

Los inversores en EE. UU. centrarán su atención en la publicación el lunes 3 y el miércoles 5 de los PMIs e ISM del sector manufacturero y servicios.

Paralelamente, a lo largo de la próxima semana iremos conociendo diversos indicadores, encuestas e informes relativos al mercado laboral. La encuesta JOLTs que se publicará el martes 4, la encuesta de empleo ADP al día siguiente o la variación de las nóminas no agrícolas que conoceremos al final de la semana podrían ser determinantes para la Fed, que en las próximas semanas deberá decidir cuándo iniciar el proceso de flexibilización de su política monetaria.