IA generativa: ¡llegan los agentes!
- Esteve Almirall
- BARCELONA. Jueves, 14 de noviembre de 2024. 05:30
- Tiempo de lectura: 3 minutos
Las inversiones en IA generativa son astronómicas, con sumas que superan 10 trillions de dólares (10 billones en nuestra manera de contar), y su adopción ya es masiva en áreas como la programación, las consultas y la mejora de redacción. Sin embargo, parece que la moda ha tocado techo. Después del hype inicial, los avances actuales se centran en perfeccionar el rendimiento de los modelos en campos muy especializados como la física cuántica, las matemáticas o la economía, llegando a un nivel de doctorado y expandiendo sus capacidades en áreas como la búsqueda. Pero la innovación se mueve en otra dirección, y si observamos bien el panorama de la IA, veremos una nueva disrupción a punto de llegar: los agentes autónomos.
Los agentes son programas capaces de ejecutar tareas de forma independiente, interactuando con otros sistemas y agentes
Pero, ¿qué son exactamente estos agentes? Los agentes son programas capaces de ejecutar tareas de forma independiente, interactuando con otros sistemas y agentes para alcanzar sus objetivos. Esta idea no es nueva, sino que se remonta a los inicios de la IA, hace más de 67 años, cuando se soñó con programas capaces de actuar y colaborar sin intervención humana constante. Sin embargo, solo ahora, con los avances recientes en modelos de lenguaje y la capacidad de conexión autónoma, estas ideas pueden materializarse en aplicaciones reales.
Imaginemos, por ejemplo, un agente que organiza un viaje completo para nosotros: le decimos a dónde queremos ir, como si habláramos con ChatGPT. El agente activa a otros agentes que revisan nuestro calendario, buscan vuelos y hoteles según nuestras preferencias y, finalmente, lo reservan todo, optimizando tiempo y costos. Estas aplicaciones no solo facilitarán la vida personal, sino también la de las empresas, que incorporarán estos agentes en áreas como la gestión de inventarios, la atención al cliente, el diagnóstico médico, la asesoría legal y financiera, entre muchas otras.
Los actores y las oportunidades en IA generativa
¿Dónde están las oportunidades en el campo de la IA generativa y en qué áreas el territorio ya está ocupado?
Si miramos las infraestructuras, veremos que el camino hacia esta revolución no es tan abierto como podría parecer. Los grandes jugadores ya dominan el terreno: Nvidia, Microsoft, Google, AWS… Las barreras de entrada en esta fase son altas, y parece difícil que nuevos competidores puedan desafiar a los grandes.
En términos de modelos de lenguaje, encontramos una situación similar con OpenAI, Meta, Anthropic, xAI o Google; han consolidado su liderazgo y tienen el talento y capital necesarios para mantenerse a la cabeza. Estos monopolios tecnológicos serán los proveedores de las bases con las que trabajarán los futuros agentes, lo cual nos hace preguntarnos qué espacio quedará para la innovación fuera de estos círculos.
Las empresas incorporarán agentes en áreas como la gestión de inventarios, la atención al cliente, el diagnóstico médico, la asesoría legal y financiera, etc...
Sin embargo, nada de esto causa una gran disrupción. La disrupción nos vendrá de las aplicaciones, particularmente de un tipo específico de aplicaciones: las que realicen de forma autónoma tareas para nosotros, los agentes. Y en este campo, ¡prácticamente todo está por hacer!
Los sistemas multiagente representan un campo más accesible y abierto a nuevos participantes. Con menos capital y experiencia, las empresas más pequeñas podrán desarrollar aplicaciones que aprovechen los agentes para realizar tareas específicas. Por ejemplo, los agentes podrían automatizar el servicio de atención al cliente en pequeñas empresas o ayudar a personalizar la experiencia del usuario en tiendas en línea. Será una revolución más sutil, más pausada, pero que afectará cada rincón de nuestra sociedad.
El futuro es la co-inteligencia
A medida que estos sistemas se desarrollen, entraremos en una nueva era de co-inteligencia, en la cual humanos y sistemas autónomos trabajarán conjuntamente. Las empresas deberán replantearse su estructura, añadiendo estos agentes al núcleo digital que gestionará operativas que antes requerían equipos humanos. Esta transformación lenta pero segura traerá cambios similares a los que provocó Internet en su momento. Los agentes no se limitarán a ejecutar órdenes; tendrán la capacidad de aprender, adaptarse y colaborar en tiempo real, convirtiéndose en aliados inseparables de nuestra productividad.
¿Dónde están las oportunidades?
Los sistemas multiagente ofrecen un campo lleno de oportunidades para empresas y emprendedores, ya que permiten participar en la revolución de la IA con un capital y conocimientos inferiores a los necesarios para competir en infraestructuras o modelos base. Esta oportunidad de disrupción hace de los agentes la verdadera nueva frontera de la transformación digital, la nueva transformación de la IA.
Es importante recordar que después de cada revolución tecnológica –sea Internet, los smartphones o, ahora, la IA generativa– solo sobreviven dos tipos de organizaciones: las que se adaptan y las que están muertas. Los agentes están a punto de marcar una nueva era, y será clave decidir de qué lado queremos estar.