Cuando se pone en marcha un diario, como seguramente sucede en cualquier iniciativa empresarial, siempre se produce una cierta sensación de vértigo. ¿Existe mercado para un proyecto periodístico de esta naturaleza? ¿Sabremos informar bien y ser útiles a la sociedad? En momentos como los actuales, de una situación económica cuando menos inestable, ¿no es mejor ser prudente y esperar tiempos más prósperos? Son preguntas que cada día se formulan cientos de emprendedores en un país que no acaba de levantar el vuelo y que tiene en sus hombres y mujeres mucho más talento, energía y conocimiento del que se acaba materializando.

Todas estas cuestiones como editor de ON ECONOMIA me las he planteado desde hace muchos meses decenas de veces y la respuesta siempre ha sido la misma, que no es otra que afrontar con humildad pero con determinación un proyecto profesional que sea capaz de combinar la información y la opinión rigurosa desde una doble mirada: la de la economía catalana desde su amplio y productivo tejido empresarial y la de la economía española desde Catalunya. Hemos de devolver a la información el lugar que le corresponde en un momento en que se nos está escapando de las manos a los periodistas. Curiosamente, a más medios, menos información. Cada vez es más necesario romper esta ecuación que atenaza gravemente a la profesión y esto solo lo conseguiremos en la medida en que los diarios sean de la gente y para la gente.

De ahí que el proyecto de ON ECONOMIA surja con dos redacciones similares en cuanto a número de profesionales en Madrid y en Barcelona. Queremos cubrir ambos mercados porque uno y otro van ligados y lo que sucede a las empresas catalanas interesa en España y lo que ocurre en España repercute en Catalunya. Creemos que esta mirada muchas veces diferente es el principal activo y atractivo del proyecto que dirigirá Serafí del Arco, periodista experto y curtido en mil batallas. Del Arco es una garantía de todo lo que perseguimos con este nuevo diario económico al haber transitado en su trayectoria profesional por proyectos periodísticos tan diferentes como Regió7, Dossier Econòmic y El País y, fuera del ámbito periodístico, haber ejercido como responsable de la dirección de comunicación corporativa de SEAT durante siete años y más tarde de Relaciones Institucionales y Comunicación Corporativa de Nissan.

Lo que sucede a las empresas catalanas interesa en España y lo que ocurre en España repercute en Catalunya

Creo que fue en 2013 cuando leí una columna sobre periodismo de mi amigo Quim Monzó que me interesó muchísimo. Hablaba de Michael Hastings, un periodista que colaboraba en Rolling Stone y en BuzzFeed y que murió en un accidente automovilístico. Seguramente recordarán el revuelo provocado por uno de sus reportajes, que desembocó en la destitución de Stanley McChrystal, comandante en jefe de las fuerzas de los EE.UU. en Afganistán. Poco antes de morir a los 33 años, Hastings había escrito diez consejos para aspirantes a periodistas. “Tienes que estar decidido a dedicar la vida al periodismo”, era el primer consejo. Y en los dos últimos puntos advertía: “Te tiene que apasionar escribir como si fuera más importante para ti que ninguna otra cosa en el mundo”, y, también, “aprende a aceptar que parte del oficio es que te rechacen, y sigue escribiendo y leyendo”. Todos y cada uno de los puntos del decálogo de Hastings me dejaron claro que el periodismo superará cualquier crisis si es capaz de mantener su esencia. Pasan los años y evoluciona la tecnología pero los principios siguen siendo válidos. 

Con este espíritu afrontamos el nacimiento de ON ECONOMIA y con la ambición de ser útiles a la gente. Con el compromiso de ofrecer una información rigurosa, contrastada, plural y de calidad.