La Comisión Europea ha presentado este miércoles su Clean Industry Act, el plan europeo inspirado por los informes Letta y Draghi que espera ayudar con subvenciones, flexibilidad normativa e incentivos fiscales a inyectar 100.000 millones de euros en industria verde. Entre las medidas, el comisario de Energía, Dan Jorgensen, ha propuesto que el IVA máximo en la factura de la luz sea del 5%.   

Con la descarbonización industrial en el horizonte, el plan contempla ayudas para que lo completen los sectores electrointensivos como el acero, los metales y la industria química, cuya descarbonización se combina con "altos costes, competencia global injusta y regulaciones complejas", según apunta el documento, que también potenciará el uso de la economía circular. Eso sí, la UE propone liberar de exigencias en sostenibilidad a las empresas de menos de 1.000 trabajadores, que afrontan verdaderos quebraderos de cabeza para cumplir las normativas, que de todos modos deben ser más simples según el plan europeo. 

La energía asequible es uno de los principales puntos del Clean Industrial Deal, con un plan para acelerar la electrificación a partir de las renovables, completar la interconexión europea y favorecer un uso de energía eficiente. Además, se prevé no solo una reducción de la dependencia de los combustibles fósiles foráneos, sino también una cooperación europea para protegerse de la volatilidad de precios, especialmente del gas natural importado de Rusia y de Estados Unidos, que acaba propiciando una subida de la factura eléctrica. 

Las compras públicas de los países de la Unión Europea incluirán criterios que premien no solo los productos producidos por procesos sostenibles, sino también aquellos 'made in Europa', con tal de premiar la cadena de suministro local. 

La financiación de 100.000 millones de euros se ha de dar a través de un nuevo fondo de innovación.el Banco de Descarbonización Industrial. La Comisión calcula que se deben invertir 480.000 millones al año en la UE para afrontar la descarbonización. 

Para mejorar la circularidad y el acceso a los materiales, Europa intentará poner en contacto a las empresas europeas para que compren juntas las materias raras necesarias para la industria verde y crear un centro europeo de materias raras para distribuirlas entre las empresas, así como crear una ley europea de economía circular que garantice que el 24% de los materiales sean circulares de cara a 2030. 

La Comisión lanzará también asociaciones para el comercio y la inversión limpios para lograr acuerdos beneficiosos en el mapa mundial y aprobará medidas de defensa comercial ante las tensiones mundiales. Propone además simplificar y fortalecer el Mecanismo de Ajuste en Frontera de Carbono, que cobra a las importaciones una tasa para compensar el hecho de que no se produzca con los estándares verdes europeos. 

La reducción de burocracia, el aprovechamiento de la escala del mercado único, la promoción de empleos de calidad y la mayor coordinación entre políticas europeas y nacionales son otros cuatro puntales del Clean Industrial Deal. 

"El Pacto de Industria Limpia es el plan empresarial de Europa para atajar la crisis climática, impulsar la competitividad, asegurar la resiliencia económica y retener talento", dijo la vicepresidenta de la Comisión Teresa Ribera en la presentación del documento.

Reacciones positivas

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española considera "ilusionantes" y "decisivas" las medidas industriales presentadas por la Comisión Europea este miércoles en Bruselas, pero advierte de que su impacto dependerá de cómo los Estados miembros utilicen el margen de actuación que se les otorga para impulsar sus sectores industriales.

En concreto, la entidad coincide con lo manifestado en Bruselas al señalar que la industria es "el epicentro de la identidad y de la competitividad europeas", y ante el actual contexto geopolítico y la "ralentización" de la economía, Europa debe abordar "con medidas concretas" los retos que implica el impulso a su competitividad industrial, según informa Europa Press.

No obstante, la agrupación de industrias, en la que se encuentran asociaciones como Anfac, AOP, Aspapel, Feique, FIAB, Unesid u Oficemen, considera que la efectividad de las medidas queda condicionada a la voluntad y el compromiso de los Estados miembros en la ejecución del margen de actuación que se les otorga para impulsar sus sectores industriales.

"Con todo ello, damos la bienvenida a este enfoque comunitario dado por Bruselas para impulsar la reindustrialización, pero consideramos fundamental que los Estados, y España en particular, actúen con compromiso, para evitar que se produzca una distorsión competitiva de la UE dada por el mayor o menor impulso que unos u otros países den al proceso", han valorado desde la entidad.

La Alianza, en términos generales, considera que las medidas anunciadas en torno al abaratamiento de la energía son "determinantes", pues como viene advirtiendo la agrupación, "el mayor coste energético en la UE deja en desventaja a las empresas industriales europeas frente a otros competidores internacionales", tal y como ha advertido su portavoz Carlos Reinoso.

Desde la patronal europea BusinessEurope, su director general, Markus J. Beyrer, tildó de "alentador" que la Comisión Europea haya reconocido que es urgente reducir los costes de la energía que afrontan las empresas europeas frente a sus competidores extracomunitarios, pero advirtió de que las acciones deben ser más "rápidas y coherentes", informa la agencia EFE.

"No podemos esperar hasta final de año para tomar medidas críticas. Instamos a la Comisión a ir más allá de las palabras y predicar con el ejemplo", urgió Beyrer.

La patronal europea de pymes y artesanía SMEUnited, por su parte, valoró que el nuevo Pacto de Industria Limpia incluya medidas para impulsar tanto el crecimiento como la transición limpia, pero advirtió de que no queda del todo claro cómo apoyarán específicamente a las pymes en su descarbonización.

El presidente de la organización, Petri Salminen, subrayó que el papel clave de las pymes en los ecosistemas industriales limpios "debe quedar mejor reflejado" cuando se empiece a implementar el pacto, porque -aseguran- en sectores como el transporte el 99,74 % de las empresas son pymes, mientras que en energía o renovables el porcentaje llega al 99,46 %.

Para Eurochambres, la Asociación de Cámaras Europeas de Comercio e Industria, el Pacto es un esperado reconocimiento por parte de Bruselas de que hay que integrar clima y crecimiento, pero incidieron en que su éxito depende de que incluya una "regulación proporcionada que evite complejidades innecesarias para las empresas".

"El Pacto Verde no era la estrategia de crecimiento que pretendía ser y se basaba en la idea errónea de que la UE puede regular su camino hacia el cero neto. A primera vista, el Pacto Industrial Limpio consolida una mejor respuesta climática con la competitividad", dijo el presidente de Eurochambres, Vladimír Dlouhý.