El Gobierno ha publicado este viernes 1.214 millones de euros de nuevas ayudas para el hidrógeno verde repartidas en siete proyectos de los 16 que se presentaron, entre los cuales hay 98 millones para el Valle del Hidrógeno de Catalunya, a la Pobla de Mafumet, Tarragona. El proyecto, que recibirá el nombre de T-Hynet y es promovido por Repsol, ya cuenta con 61 millones de ayudas de la Comisión Europea y el electrolizador (el aparato que separa las moléculas de agua para convertirlas en hidrógeno) tiene que tener una potencia de 132 MW.
Catalunya también se beneficiará de parte de los 138 millones de euros aprobados en diferentes ayudas para el proyecto HyBerus, de 360 MW, que pasará por Caspe, Fabara y también por Ascó, en Tarragona. La ayuda más importante irá a parar al Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, el proyecto Onuba, de Moeve y Fertiberia, que recibirá 303 millones de euros por un electrolizador de 405 MW en Palos de la Frontera.
El segundo más prominente es el proyecto Catalina, en Aragón, impulsado por el fondo danés CIP y Enagás, con ayudas de 245 millones de euros. Andalucía, Castilla y León, Aragón, Catalunya y Galicia son las comunidades que han recibido ayudas.
El documento con las ayudas se han publicado este viernes y los ha anunciado también la vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen, quien ha dicho que en total hay 11 instalaciones de electrólisis y que tienen que movilizar un total de 5.000 millones de euros para España. La ministra ha asegurado además que estos proyectos crearán 9.000 puestos de trabajo directos y aproximadamente 11.000 indirectas entre la construcción y la puesta en servicio.
Los proyectos suman 4 GW de capacidad, un tercio sobre el total de 12 GW previstos por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para descarbonizar la energía hasta el 2030.
"Además, creo que generarán ecosistemas que se consolidarán. Hablamos de un sector de presente y de futuro. No estamos hablando de una tecnología que llega para marcharse, sino que llega para quedarse en este camino de descarbonización", ha dicho la ministra.
El hidrógeno verde es aquel que se obtiene a partir de energías renovables mediante la separación de moléculas de agua para convertirlo en hidrógeno como vector energético. Enagás y el Gobierno lideran el gran hidroducto que lo tiene que transportar por Europa, pero todavía no hay un volumen significante disponible.
Los expertos dudan de que a corto plazo este vector energético pueda estar disponible a un precio competitivo y existe un debate sobre sus posibles usos. Todo apunta que tiene que ser un actor relevante en la descarbonización de los sectores que no se pueden electrificar, como la industria o el transporte marítimo o aéreo, y hay dudas si puede tener un papel importante en otros como la movilidad pública urbana o el automóvil, que tienden más hacia la electricidad.