El Govern rechazó el pasado jueves día 4 en la última ponencia de energías renovables la construcción de tres parques eólicos más a Forestalia en la provincia de Lleida, tocando Aragón, para proteger a dos parejas de águilas, una de ellas dorada y la otra perdicera. El informe de la Generalitat también alude, no obstante, a la superficialidad de los informes ambientales presentados por la empresa.
Los parques sumaban 84 MW en un mix eléctrico, el catalán, que anda necesitado de eólica y fotovoltaica, ya que genera cinco veces menos renovables que el resto de España. La Generalitat ya tumbó un parque en Terres de l'Ebre en noviembre del año pasado y dos más en diciembre a Forestalia, justamente la empresa encargada de trazar las líneas de Muy Alta Tensión (MAT) que cruzarán media Catalunya para importar renovables de Aragón.
En la misma ponencia sobre renovables, el Govern exigía someter a evaluación ambiental a dos parques fotovoltaicos, hecho que hará que pierdan
En los tres informes de los parques eólicos se explica "la incompatibilidad del proyecto con la conservación de una pareja de águilas doradas que exigía el correspondiente estudio de seguimiento de radio" y también hace alusión a la afectación de la línea de alta tensión de 220 kV "sobre el espacio vital de una pareja de águilas perdiceras".
El parque Les Alzinetes, de 12,2 MW, promovido en el término municipal de Maials, recibió la resolución negativa aludiendo especialmente a la afectación a las águilas. Aunque el resto de impactos ambientales del estudio son moderados y compatibles con el parque, el informe del Govern también alerta de que el estudio ambiental presentado por la empresa es "superficial". El proyecto estaba promovido por Energía Inagotable de Cassiopeia, como el resto de parques tumbados, es propiedad de Nearco Energías, a su vez propiedad de Forestalia.
Lo mismo sucede con el parque eólico Les Basses Roges 3, de 24,4 MW y cuatro aerogeneradores, promovido por Energías Renovables de Hades, propiedad de nuevo de Nearco y por tanto de Forestalia.
Y también con Les Basses Roges 2, de 48,8 MW que se ubicaría "en el área crítica de la pareja" de águilas doradas, según la conclusión del informe. En su caso, el parque es propiedad de Energías Renovables del Grian, también filial de Forestalia.
El riesgo principal para estas águilas, la perdicera en riesgo de extinción y la dorada casi en riesgo, son los cables de alta tensión, que de hecho se cobran la vida de entre 300 y 400 águilas al año. Lleida es la provincia catalana donde más aves mueren por este motivo.
Desde que entró en vigor en 2019 el decreto ley 16/2019 que tumbaba la moratoria de construcción de parques de energía renovable, el Govern ha autorizado tan solo 235,21 MW de energía eólica repartidos en seis parques, mientras que ha rechazado 349 MW de 10 parques diferentes. Los tres denegados de esta vez suponen un 25% de las denegaciones emitidas por el Govern.
Catalunya acumula un retraso en renovables que la deja muy lejos de alcanzar sus objetivos en 2030. Así, en 2023 tan solo generó un 14,2% de la luz con renovables, un porcentaje 4 veces menor que el estado español, que consiguió superar la mitad y colocarse en un 57,6%. Actualmente, en Catalunya hay instalados 4.600 MW de renovables, entre los 1.376 de eólica y los 400 de fotovoltaica, sin contar con el autoconsumo, sobre un total de 77.000 MW en toda España. Durante la legislatura de Pere Aragonés, aunque se han autorizado 1.692 MW de renovables, tan solo se han puesto en marcha 132 MW, 72 de fotovoltaica y 105 de energía eólica.
Aparte de los parques eólicos desestimados en la última ponencia, existen tres parques más (Les Crestes, Fontcalda y El Calvari, en la Terra Alta), que suman 150 MW y podrían perder los derechos de conexión si no reciben la Declaración de Impacto Ambiental positiva antes del 21 de julio.
La lentitud administrativa y la fuerte oposición del territorio, que aúna en ocasiones a agricultores, activistas y ayuntamientos, ha frenado las ambiciones climáticas de Catalunya, que para alcanzar los planes previstos por la Prospectiva energética de Catalunya, Proencat, elaborada por el propio Govern, Catalunya debería instalar 12.000 MW nuevos hasta 2030, 5.000 de eólica y 7.000 de fotovoltaica. Para ello, necesita un ritmo de instalación de 2.000 MW por año, casi 20 veces más que el ritmo actual, totalmente impensable con el ratio de denegaciones actual. El Govern también estimaba necesarios la inversión de 84.361 millones de euros.